III. CARACTERISTICAS ECONOMICAS

El análisis de la participación de la población en la actividad económica, cobra especial relevancia en momentos como el actual, caracterizado por un proceso recesivo con consecuencias innegables en el mercado de trabajo. En este contexto, las cifras del Censo permiten realizar un diagnóstico de la participación económica, destacando los aspectos laborales de la población femenina, infantil y de la tercera edad, así como el nivel de calificación técnica y profesional de los trabajadores. Otro tópico de interés y que se aborda en este capítulo es la tasa de actividad y los niveles de desocupación, características que influyen en el grado de bienestar de los hogares.

3.1 CONDICION DE ACTIVIDAD

Las características económicas de la población fueron investigadas en las personas de 6 y más años de edad, debido a la presencia, cada vez mayor de niños de 6 a 14 años, en el mercado de trabajo.

Bajo esta consideración, la Población Económicamente Activa (PEA), comprende a todas las personas de 6 y más años de edad que en la semana anterior al día del Censo se encontraban trabajando, buscando trabajo por primera vez o estaban desocupadas porque habían perdido su empleo anterior.

En 1993, en el departamento de Tumbes, fueron empadronadas 155,521 personas, de este total 132,293 (85,1%) tenían 6 y más años de edad.



Con relación a la condición de actividad, la PEA departamental, está constituída por 50,713 habitantes que representan el 38,3% del grupo de 6 y más años de edad, esta proporción fué similar en 1981. Durante el último período intercensal (12 años), la PEA se incrementó anualmente en 1,522 personas, las que estarían demandando un empleo en el mercado de trabajo.

En la evolución de la PEA, se destaca la progresiva incorporación de la población femenina que de una proporción de 10,4% en 1981 aumentó significativamente a 17,7% en 1993. Contrariamente la PEA masculina, en el referido período de análisis, disminuye de 63,0% a 56,3%, sin embargo, continúa su predominio en el ámbito laboral.











La desocupación es mayor en las mujeres que en los hombres. De la PEA masculina el 7,3% se encontraba desocupada y el 14,0% de mujeres se encontraban en tal situación.

En la Población Económicamente No Activa, se observa un porcentaje importante (59,8%) de población femenina que no trabaja, dedicada en su mayoría a las tareas del hogar y un 31,0% son estudiantes. En el caso de los hombres un 51,5% de la NO PEA son estudiantes.









Los niveles de desempleo aumentaron en 1993 en comparación a 1981, tanto en el área urbana como rural.

En efecto, la importancia relativa de la Tasa de Desocupación en el área urbana se incrementa de 2,0% a 9,4% y el área rural describe una tendencia similar, al aumentar de 3,1% a 3,9%.



Según sexo en 1993, el nivel de desempleo femenino es más acentuado que el masculino, especialmente en el área rural. En las zonas urbanas de Tumbes de cada 100 personas de la PEA 14 son mujeres y 8 son varones desocupados, en el ámbito rural dicha relación es de 3 para hombres y 12 para mujeres.











Es importante examinar el comportamiento de la participación de la población por actividad económica, que ayuda a conocer la dinámica y estructura de la economía del departamento. En las provincias se advierte algunas particularidades que dan cuenta de las diferencias internas en las características económicas.

En las tres provincias de Tumbes, de cada 100 personas de 6 y más años, 40 forman parte de la PEA. Contralmirante Villar es la provincia que posee la más baja participación laboral femenina (12,8%), y en Tumbes, donde está la ciudad capital, la población femenina tiene una mayor participación en el mercado laboral (18,3%).