Al analizar las características educativas de la población que accedió a los servicios de salud del IPSS, se observa que acuden en mayor medida aquellas personas que presentan mejor formación en materia de educación. Al observar el nivel de educación logrado, se aprecia que mientras más altos son los niveles de educación adquiridos, se accede en mayor medida a los servicios del IPSS. Así, el 34,7% de la población con educación superior no universitaria y el 42,5% con educación universitaria fueron atendidos en establecimientos del IPSS, en cambio, la población afectada con bajos niveles educativos lo hizo en menor medida, 15,8% sin nivel alguno de educación y 18,6% con educación primaria.

De igual forma se aprecia al analizar a la población que accede a estos servicios de acuerdo al promedio de años de estudio aprobados, observándose que el acceso aumenta a medida que va aumentando los años promedios de estudios aprobados o alcanzados. Así, mientras que el 15,9% de la población sin ningún año de estudios aprobados consultaron en un establecimiento del IPSS, la población enferma entre 14 y 15 años de estudio consultó el 47,8%.

Al investigar a la población de 15 y más años que consultó según su condición de analfabetismo, se detecta que el 13,2% de los consultantes de este sector no sabían leer ni escribir. En cambio, la población que sabe leer y escribir consultó el 25,2%.