SINTESIS DEL CAPITULO

a.   La  estructura  por  tama¤o  poblacional  del  conjunto  de   los
     conglomerados del pa¡s, se ha presentado distorsionada en todo el
     per¡odo considerado, dada la existencia en un extremo, de un gran
     n£mero  de conglomerados, que albergaba un porcentaje reducido de
     poblaci¢n y,  en el otro extremo, la de contados conglomerados de
     m s  de  100,000 personas que contando con un porcentaje entre el
     1.2% (1961) y el 15% (1993) de los conglomerados urbanos,  alber-
     gaban entre  el  50.1% y, el 72.6% de  la  poblaci¢n, para 1961 y
     1993, respectivamente.  

     Este  alto  nivel de  concentraci¢n, sustentado esencialmente por
     Lima Metropolitana,  que en promedio acoge el 45% de la poblaci¢n
     urbana,  lo  que  define  a la estructura urbana del pa¡s como de
     caracter primacial, con un ¡ndice  de  primac¡a   superior  a  4,
     catalogado como extremadamente alto a nivel internacional.

b.   Sin  considerar  Lima  Metropolitana  y,  para  los tres per¡odos
     intercensales, el Per£ muestra una  estructura  bastante  equili-
     brada  en  los  primeros rangos por tama¤o, que ha ido aumentando
     con el transcurso de los a¤os: hasta el  de  50,000  personas  en
     1961;  hasta  el  de  100,000  personas  en  1972   y,  hasta  el
     de las 250,000  y  200,000  personas  en los  a¤os 1981  y  1993,
     respectivamente.

     En  los  rangos  superiores, no ha existido, ni existe, el n£mero
     suficiente  de  ciudades  mayores   que   puedan   equilibrar  el
     desarrollo concentrador de nuestro pa¡s.

c.   Esto  se  corrobora con el an lisis de la evoluci¢n de la estruc-
     tura urbana seg£n ciudades de m s de 20,000 habitantes, en el que
     adem s de ratificar el caracter primacial de Lima  Metropolitana,
     se constata c¢mo el resto de las ciudades, luego de conformar una
     estructura  urbana  pr cticamente quebrada en 1961, va articul n-
     dose  en  una  forma  m s  homog‚nea  en  1972,  que  comienza  a
     desalinearse por la d‚cada  de  los  80,  donde  las ciudades m s
     grandes no crecen en la medida  de  los  requerimientos,  lo  que
     demuestra que adem s de su escaso n£mero,  no  est n creciendo lo
     suficiente como para conformar una estructura m s homog‚nea capaz
     de sustentar un desarrollo regional descentralizado.


NOTAS DE PIE

(17) La regla "rango-tama¤o" se deriva de la observaci¢n emp¡rica,  en
     pa¡ses  desarrollados,  de  que,  si las ciudades de un pa¡s eran
     ordenadas  seg£n  el  tama¤o  poblacional,  la  poblaci¢n de cada
     ciudad (por ejemplo de un rango K) era aproximadamente igual a la
     poblaci¢n de la ciudad m s grande dividida por el rango K.

(18) Berry B. Size. Distributions and Economic Development. 1961.

(19) "Regla Rango-Tama¤o" ya citada.

(20) La  £nica  excepci¢n  es la ciudad de Ica, que lleg¢ a los 49,100
     habitantes  en  ese a¤o, muy distanciada en 14,600 habitantes con 
     la siguiente ciudad en el rango inmediato inferior.