Al igual que en ENDES anteriores (1986 y
1991-1992), en la ENDES 1996 se obtuvo la historia de nacimientos
de cada una de las mujeres entrevistadas, en la que se averiguó
el sexo, fecha de nacimiento, edad actual y la condición
de sobrevivencia de cada hijo nacido vivo. En el caso de los
nacidos vivos que fallecieron se registraba la edad a la que había
ocurrido el deceso, con tres variantes:
- En días para niños que murieron
durante el primer mes de vida;
- En meses para los que perecieron entre uno y
23 meses; y
- En años para los que fallecieron después
de cumplir los dos años.
Estos datos permiten calcular, para períodos
determinados, las siguientes probabilidades de morir:
Mortalidad neonatal: probabilidad de morir durante
el primer mes de vida (MN);
Mortalidad infantil: probabilidad de morir durante
el primer año de vida (1q0);
Mortalidad post-infantil: probabilidad condicional
de morir entre el primero y el quinto aniversario (4q1);
Mortalidad en la niñez: probabilidad de morir
antes de cumplir 5 años (5q0).
Al igual que las otras variables demográficas,
la mortalidad está sujeta a errores de declaración.
La confiabilidad de las estimaciones de la mortalidad depende
de los niveles de omisión de hijos que han fallecido al
poco tiempo de nacer, especialmente cuando la defunción
ha ocurrido bastante tiempo antes de la encuesta. Es importante,
de igual manera, la calidad diferencial de la declaración
de las fechas de nacimiento de hijos sobrevivientes e hijos muertos.
Otro error que puede ocurrir es la declaración errónea
de la edad al morir o de la fecha de defunción del hijo.
En encuestas de otros países se ha observado una tendencia
en las madres a redondear hacia "un año" (12
meses) como edad del hijo al morir, aún cuando el niño
hubiera fallecido no exactamente a los 12 meses sino en meses
próximos a esa edad. Este redondeo hace que en el mes
12 se produzca una gran concentración de defunciones.
Cuando el traslado de las muertes ocurridas a los 10 u 11 meses
de vida, hacia el año, es grande, se origina una subestimación
de la mortalidad infantil y la sobreestimación de la mortalidad
de la niñez. En el caso de la ENDES 1996 y al igual
que en la ENDES 1991-1992 no hay evidencias significativas
de desplazamientos de edades al fallecer de menores de un año
hacia los 12 meses o más en las declaraciones referidas
a los 5 años anteriores a la encuesta.
Niveles y Tendencias de la Mortalidad Infantil
y en la Niñez
En el Cuadro 7.1 se presentan estimaciones de l
a mortalidad infantil y en la niñez según área
de residencia, calculadas a partir de la historia de nacimientos
y defunciones obtenida en las entrevistas a mujeres en edad reproductiva.
Especial atención debe prestarse a la mortalidad durante
el primer mes de vida (mortalidad neonatal), pues cuando desciende
la mortalidad se espera que los riesgos tiendan a concentrarse
en el primer mes de vida, por provenir ellos fundamentalmente
de razones congénitas. En cambio, las causas de las defunciones
entre los 2 los 11 meses son atribuibles a los condicionantes
socio-económicos imperantes en los hogares y en su entorno.
Mortalidad infantil y en la niñez para
diez años anteriores
- De cada 1,000 niños que nacieron en el
departamento de Apurimac durante 1986-1996, 73 niños murieron
antes de cumplir su primer año de vida.
- Sin embargo, observamos que en su mayoría
(59%) los niños mueren más durante el primer mes
de vida que en período post neonatal (después del
primer mes de vida).
- La mortalidad rural del departamento de Apurimac,
es mayor que la del área urbana, en la primera ocurren
78 defunciones de menores de 1 año por cada mil nacidos
frente a 55 del área urbana en el período de 1986-1996.
- La mortalidad en la niñez es de 100 defunciones
de menores de 5 años, por cada mil nacidos vivos. En el
área rural los niños menores de 5 años mueren
con una tasa mayor que los niños del área urbana.
Diferenciales de la Mortalidad Infantil y en la
Niñez
Para el análisis de los diferenciales de
la mortalidad es recomendable ampliar el período de referencia
hacia los 10 años anteriores a la encuesta, debido a que
si bien el tamaño de la muestra puede ser suficiente para
proporcionar estimaciones confiables para un período de
5 años en algunas de las características estudiadas,
aún así varias de las estimaciones siguen siendo
débiles.
Mortalidad infantil por características
demográficas
- Cuando analizamos los resultados por el número
de orden de los nacimientos, los riesgos de mortalidad aumenta.
Cuando el nacimiento es de cuarto o de sexto orden, el riesgo
de muerte durante el primer año es mayor que el riesgo
de un nacimiento que sea el primero (40 versus 21 por mil).
- El análisis de los resultados por la duración
del período intergenésico permite apreciar otro
aspecto en el que se vinculan estrechamente la fecundidad y la
mortalidad infantil. Cuando el intervalo intergenésico
es corto, el tiempo disponible para su recuperación es
corto, es poco el tiempo que la madre puede dispensar para el
cuidado del hijo, fomentando inclusive una corta lactancia que
afecta la nutrición del niño. Los resultados confirman
que el riesgo de muerte es mayor cuando el período intergenésico
es menor a dos años (45 por mil). Este riesgo de mortalidad
es mayor que el observado cuando el intervalo intergenésico
es de por lo menos cuatro años (17 por mil).


Mortalidad infantil por lugar de residencia y
nivel de educación
- Al igual que en encuestas anteriores, los resultados
de la ENDES 1996 corroboran que uno de los factores más
importantes en la generación de diferenciales en la mortalidad
infantil es el nivel de educación de las madres. Los niños
de madres sin educación presentan un riesgo de mortalidad
infantil (53 por mil) dos veces mayor al de los niños de
madres con educación superior (25 por mil).

Grupos de Alto Riesgo Reproductivo
Con el fin de sintetizar los diversos aspectos antes
presentados, el estudio de la mortalidad también puede
emprenderse a través de las categorías de alto riesgo
de mortalidad en la población, no solo desde el punto de
vista de los niños nacidos vivos, sino también desde
el punto de vista del grupo de mujeres cuyos hijos se encuentran
en categorías de riesgo de mortalidad en el futuro. El
Cuadro 7.2 contiene el porcentaje de niños nacidos en los
últimos cinco años en grupos de alto riesgo de mortalidad,
y el porcentaje de mujeres en unión en riesgo de concebir
un niño con alto riesgo de mortalidad, según categorías
de riesgo. La razón de riesgo en la segunda columna del
Cuadro 7.2 se define como el cociente de (1) la proporción
de niños muertos entre aquellos nacidos en una categoría
específica de riesgo, y (2) la proporción de niños
muertos entre aquellos nacidos a mujeres en ninguna categoría
de riesgo elevado. Los primeros nacimientos a mujeres mayores
de 18-34 años constituyen una categoría especial
de riesgo no evitable.
Normalmente se consideran como de riesgo elevado
los nacimientos que ocurren en las siguientes condiciones:
×
La madre tiene menos de 18 años al momento del nacimiento;
×
La madre tiene más de 34 años al momento del nacimiento;
×
El intervalo intergenésico es menos de 24 meses;
×
El orden del nacimiento es mayor de 3.
Tomando en cuenta estos grupos se construyen categorías
especiales de riesgo combinando dos o más de ellos. Por
otro lado, las mujeres se asignan a una categoría dada
dependiendo de la situación en que se encontrarían
en el momento del nacimiento del niño si éste fuese
concebido en el mes de la entrevista: edad actual menor de 17
años y 2 meses; edad actual mayor de 34 años y 3
meses; el nacimiento anterior ocurrió hace menos de 15
meses; el nacimiento anterior fue de orden 3 o superior.
Categorías de alto riesgo reproductivo
- Un 67 por ciento de los nacimientos de los últimos
cinco años ocurrieron en alguna condición de alto
riesgo reproductivo. Estos niños, en promedio, tendrían
casi el doble de riesgo de morir en el primer año de vida
con respecto a los hijos de madres en ninguna categoría
de riesgo elevado.
- Dos categorías, aquellos nacimientos de
orden nacimiento 3 y mayor (24%) e intervalo de nacimiento menor
de 24 meses (9%), concentran el 33 por ciento de los nacimientos.
Otro 16% de nacimientos se consideran de alto riesgo por ser de
orden mayor de 3 a madres que tienen 35 o más años.
Y un 9% adicional por ser de orden mayor de 3 e intervalo menor
de 24 meses.
- El 75 por ciento de las mujeres actualmente unidas
están en posibilidades de concebir hijos con alto riesgo
reproductivo. Un 19% de las mujeres están a riesgo elevado
por haber concebido nacimientos de orden mayor de 3 y un 30 por
ciento de dichas mujeres unidas están en riesgo han tenido
tres o más hijos y edad mayor de 34 años.
