![]() ![]() ![]() |
|
ÚÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ¿ ³ 2.2 PRESENTACION DE METODOLOGIAS APLICADAS EN PAISES: ³ ³ LA EXPERIENCIA PERUANA EN LA CONSTRUCCION DEL MAPA DE NBI ³ ÀÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÙ Jorge Reyes Moyano Instituto Nacional de Estad¡stica e Inform tica (INEI) Lima, Per£ I. ASPECTOS CONCEPTUALES Y METODOLOGICOS DE LA MEDICION DE LA POBREZA 1. Conceptos y enfoques de la pobreza El primer obst culo que se enfrenta al estudiar la pobreza es ensayar una definici¢n de consenso, debido a la dificultad te¢rica que la propia din mica social imprime al concepto. En esta perspectiva, la pobreza constituye un fen¢meno social que se relaciona con el grado de bienestar alcanzado por una sociedad determinada. La percepci¢n de la pobreza evoluciona en el tiempo e incluso entre sociedades, en raz¢n de su desarrollo diferenciado. En la percepci¢n de la pobreza influye el enfoque en que se ubique el investigador y su postura en la determinaci¢n de los criterios normativos. Ello hace que este tema, muchas veces, no genere una apreciaci¢n un¡voca y uniforme por parte de los investigadores sociales. Sin embargo, en trminos operacionales, la pobreza puede definirse como una condici¢n de privaci¢n para acceder a una canasta de bienes y servicios b sicos con los cuales se pueda vivir adecuadamente seg£n los est ndares prevalecientes de necesidades y satisfactores, determinados por una sociedad de acuerdo a su nivel de desarrollo. En otras palabras, no obstante la relatividad intr¡nseca del concepto, se le puede asociar con un estado de insuficiencia en el nivel de vida o con la carencia de lo necesario para el sustento de la vida. En s¡ntesis, la pobreza se manifiesta como una situaci¢n de subconsumo, desnutrici¢n, inadecuadas condiciones habitacionales, bajos niveles educativos, precaria inserci¢n en el mercado laboral, insuficiencia de ingresos, y hasta una combinaci¢n de ausencia de oportunidades y capacidades perdidas. En un sentido amplio, existen dos concepciones de pobreza: una concepci¢n subjetiva y otra objetiva. Seg£n la concepci¢n subjetiva, la pobreza es una sensaci¢n individual dependiente de las preferencias y consideraciones de cada individuo y de lo que ste juzgue necesario para tener un nivel de vida adecuado. En esta perspectiva, habr n tantas definiciones de pobreza como expectativas individuales. La concepci¢n objetiva de la pobreza, tiene como punto de partida la explicitaci¢n de criterios £nicos que el investigador utiliza para identificar a los pobres. Dentro de esta concepci¢n, existen dos enfoques de la pobreza : pobreza relativa y pobreza absoluta. En el enfoque de pobreza relativa, el bienestar de un individuo o familia no depende de su nivel absoluto de consumo o gasto, sino del bienestar obtenido en relaci¢n con otros miembros de la sociedad. El punto inicial consiste en buscar un referente que puede ser el promedio social o de un grupo social determinado. De este modo, se define la pobreza como una situaci¢n de insatisfacci¢n de necesidades b sicas de acuerdo al referente social. El enfoque de pobreza absoluta implica, en cambio, que el bienestar de un individuo o familia est en funci¢n de su nivel absoluto de consumo o gasto en relaci¢n con est ndares m¡nimos, que la sociedad determina como aceptables de acuerdo a su nivel de desarrollo. De esta manera, se identifica como pobres a quienes no satisfacen los est ndares m¡nimos de consumo o gasto, o a quienes no acceden a lo establecido como aceptable para un nivel de desarrollo. Es de se¤alar, que este punto de vista absoluto no es ajeno a la definici¢n que maneje el investigador en la formulaci¢n de los m¡nimos. El enfoque de pobreza absoluta es reconocido por diversos investigadores sociales como el m s adecuado, sobre todo en pa¡ses en donde la pobreza es un fen¢meno extendido. 2. Mtodos de medici¢n con el enfoque absoluto Existen tres mtodos para medir la pobreza: el de necesidades b sicas insatisfechas, el de l¡nea de pobreza y el mtodo integrado. 2.1 El mtodo de necesidades b sicas insatisfechas (NBI) Es un mtodo directo de medici¢n de la pobreza seg£n la satisfacci¢n efectiva de las necesidades b sicas. Para ello, es necesario definir las necesidades indispensables de un hogar o familia, en los aspectos de educaci¢n, salud, condiciones de la vivienda, empleo adecuado, servicios de la vivienda, etc. Una vez definidas las necesidades b sicas, se establecen los l¡mites m¡nimos de satisfacci¢n. Seguidamente, en base a la definici¢n de las necesidades y los l¡mites se procede a identificar los hogares y la poblaci¢n cuyo consumo efectivo se encuentra por debajo de los l¡mites m¡nimos de satisfacci¢n establecidos. Este mtodo, aplicado a la informaci¢n obtenida de los censos de poblaci¢n y vivienda, tiene la ventaja de cuantificar e identificar la pobreza hasta el nivel de reas pobladas peque¤as. Los indicadores que generalmente se utilizan para medir la pobreza por el mtodo de necesidades b sicas insatisfechas son, entre otros, los siguientes: a) viviendas inadecuadas por sus materiales; b) hacinamiento cr¡tico por habitaci¢n; c) falta de servicios para la eliminaci¢n de excretas; d) inasistencia a escuelas primarias de los menores, y e) la capacidad econ¢mica del hogar, que relaciona el nivel educativo del jefe del hogar con la tasa de dependencia econ¢mica. El ¡ndice de necesidades b sicas insatisfechas reacciona ante deterioros constantes y persistentes del ingreso de los hogares y sus efectos en las condiciones de vida de la poblaci¢n. 2.2 El mtodo de l¡nea de pobreza (LP) Es un mtodo indirecto de medici¢n de la pobreza, puesto que a partir de un ingreso que valora un consumo m¡nimo de bienes alimentarios y no alimentarios, se deduce la satisfacci¢n potencial de las necesidades b sicas. El mtodo de NBI o mtodo directo, resulta m s eficiente en la medici¢n que el mtodo de l¡nea de pobreza o indirecto, ya que no se basa en supuestos particulares sobre el comportamiento del consumo, sino en el consumo efectivo. El mtodo de LP consiste en calcular el ingreso necesario para cubrir el costo de una canasta b sica de consumo, constituida por una canasta alimentaria y otra de bienes y servicios no alimentarios. La canasta alimentaria se define como aquella que re£ne el conjunto de alimentos cuya composici¢n cubre las necesidades nutricionales m¡nimas de la poblaci¢n, considerando los h bitos de consumo predominantes, la disponibilidad efectiva de los alimentos en el mercado, y los precios relativos de los mismos. Al costo de esta canasta, se le agrega un monto estimado de los recursos requeridos por los hogares para satisfacer tambin las necesidades no alimentarias como vivienda, vestuario, educaci¢n, salud, transporte y esparcimiento. Una vez calculado el costo de la canasta b sica de consumo -que determina la l¡nea de pobreza-, se procede a confrontar los ingresos de cada hogar con respecto a la l¡nea divisoria, identific ndose como pobres, a todos aquellos cuyos ingresos caen por debajo de ella. De acuerdo a lo expuesto, se deduce que mientras el mtodo de NBI se basa en un conjunto de normas o indicadores que comprenden un n£cleo importante del total de necesidades, el de LP se sustenta en un solo indicador representativo, que es el ingreso. 2.3 El mtodo integrado La aplicaci¢n independiente de cada uno de los mtodos -por necesidades b sicas insatisfechas y l¡nea de pobreza- puede generar mediciones diferentes de pobreza, utilizando incluso la misma fuente de informaci¢n. Esto es explicable en la medida en que el de l¡nea de pobreza (LP) es un mtodo indirecto, y el de necesidades b sicas insatisfechas (NBI) es un mtodo directo. Estas diferencias han determinado que algunos especialistas sostengan que el de NBI estar¡a midiendo la pobreza estructural y el de LP la pobreza coyuntural. En este sentido, se afirma por ejemplo que los hogares con viviendas inadecuadas no podr¡an cambiar su situaci¢n en el corto plazo, aun cuando su ingreso mejorara por alg£n tiempo. Se dice que el mtodo de l¡nea de pobreza es coyuntural, por cuanto la insuficiencia de ingresos estar¡a relacionada con los movimientos econ¢micos de corto plazo. Otra de las diferencias que suelen asignarse a las mediciones con NBI y LP, surge de relacionar a la primera con el patrimonio acumulado o riqueza del hogar lograda en el pasado, en tanto que la LP estar¡a referida al consumo del momento. Reconociendo estas diferencias entre NBI y LP, se han combinado los dos mtodos dando lugar al mtodo integrado, en el cual se conciben cuatro grupos -evidenciando de esta manera la diversidad de la pobreza absoluta- de acuerdo con el siguiente esquema: ÚÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ¿ ³ LP ³ INGRESOS POR ³ INGRESOS IGUALES O ³ ³ NBI ³ DEBAJO DE LA ³ POR ENCIMA DE LA ³ ³ ³ LINEA DE POBREZA ³ LINEA DE POBREZA ³ ÀÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÙ PRESENCIA DE AL MENOS Hogares en situaci¢n de Hogares con carencia UNA CARENCIA CRITICA pobreza cr¢nica. inerciales. AUSENCIA DE CARENCIAS Hogares en situaci¢n de Hogares con condiciones CRITICAS pobreza reciente. de integraci¢n social. ÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ Fuente: Kaztman, Rubn (1989), "La heterogeneidad de la pobreza: el caso de Montevideo", Revista de la CEPAL, Nø 37, abril Los hogares en condiciones de integraci¢n social identifican a todos aquellos cuyos ingresos per c pita superan la l¡nea de pobreza o el costo de la canasta b sica de consumo y, simult neamente, no presentan carencias en las necesidades b sicas consideradas. Es decir, en vivienda, servicios b sicos y educaci¢n. Los hogares con carencias inerciales ser¡an aquellos que pese a tener ingresos por encima de la l¡nea de pobreza, presentan carencias cr¡ticas en las necesidades b sicas consideradas. Los hogares en situaci¢n de pobreza cr¢nica, a su vez, ser¡an los que en forma simult nea se encuentran por debajo de la l¡nea de pobreza y presentan carencias cr¡ticas en una o m s necesidades b sicas. La investigaci¢n social se¤ala a este grupo como representativo del n£cleo de la pobreza. Los hogares en situaci¢n de pobreza reciente comprender¡an a los que tienen ingresos por debajo de la l¡nea de pobreza, pero que no acusan carencias en el registro de las necesidades b sicas. 3. Experiencia latinoamericana en medici¢n por NBI A partir de las orientaciones metodol¢gicas dadas por la CEPAL (Comisi¢n Econ¢mica para Amrica Latina y el Caribe), se ha venido generalizando en Amrica Latina desde la dcada de los a¤os 70 la construcci¢n de mapas y la medici¢n de la pobreza utilizando alternativamente los tres mtodos antes mencionados. En Argentina, el Ministerio de Econom¡a y Obras y Servicios P£blicos, elabor¢ un mapa de NBI en base al £ltimo censo de poblaci¢n y vivienda, utilizando cuatro indicadores: hacinamiento (hogares con m s de 3 personas por cuarto); vivienda inadecuada (pieza de inquilinato, vivienda precaria o de otro tipo, excluyendo casa, departamento y rancho); condiciones sanitarias (hogares que habitan en viviendas sin retrete con descarga de agua), e inasistencia escolar (hogares con ni¤os en edad escolar -6 a 12 a¤os- que no asisten a la escuela). Bolivia, con el Instituto Nacional de Estad¡stica (INE) como organismo ejecutor, consider¢ en la medici¢n por NBI seis indicadores: - Vivienda inadecuada: Piso de tierra y otros materiales; techo de paja, ca¤a, palma y otros materiales de desecho; paredes de adobe sin revocar, tapial, piedra, ca¤a, palma, paja y otros materiales de desecho. La presencia de dos de las tres condiciones en cuanto a piso, pared y techo define la condici¢n de "carenciado". - Hacinamiento: Habitan 2.5 personas por cada dormitorio, sin un cuarto multiuso por cada 5 personas, y sin cocina. - Saneamiento b sico: Sin dotaci¢n de agua y drenaje. - Insumo energtico: Indicador compuesto que considera energ¡a elctrica y combustible para cocinar. - Rezago educativo: Es suficiente un a¤o de rezago para ser "carenciado". - Salud: No tiene acceso a centros de salud. En Colombia, el Departamento Administrativo Nacional de Estad¡sticas (DANE), empleando el mtodo NBI plante¢ los siguientes cinco indicadores: - Vivienda inadecuada: En el nivel de cabeceras municipales agrupa a las viviendas m¢viles, refugio natural o puente, y aquellas sin paredes o con paredes exteriores de tela o desechos, o con piso de tierra. Para el resto: viviendas m¢viles, refugio natural o puente y aquellas de paredes de material semipermanente o perecedero (bahareque, guadua, ca¤a o madera), que simult neamente tuvieran piso de tierra. - Hacinamiento: Hogares con m s de 3 personas por cuarto (excluyendo cocina, ba¤os y garaje). - Servicios de agua y desage: La disponibilidad de agua se considera en combinaci¢n con el sistema de eliminaci¢n de excretas. En este sentido se diferenciaron las condiciones para las cabeceras municipales y el resto. Cabeceras municipales: Hogares en viviendas sin retrete, o que careciendo de acueducto se proveyeran de agua en r¡o, nacimiento, carro tanque, o de la lluvia. Resto: Hogares en viviendas sin retrete ni acueducto y que se proveyeran de agua de r¡o, nacimiento o lluvia. - Asistencia escolar: Hogares con a lo menos un ni¤o mayor de 6 a¤os y menor de 12 a¤os, pariente del jefe de hogar, y que no asiste a un centro de educaci¢n formal. - Tasa de dependencia o alta carga econ¢mica: Hogares con m s de 3 personas por miembro ocupado, cuyo jefe haya aprobado como m ximo dos a¤os de educaci¢n primaria. En el caso del Ecuador, el Instituto Nacional de Estad¡stica y Censos (INEC), elabor¢ un mapa de NBI en base a los seis indicadores siguientes: - Vivienda inadecuada: Considera paredes de adobe o tapia, madera, ca¤a no revestida u otros materiales, y piso de ca¤a, tierra u otros materiales. - Hacinamiento: Hogares con m s de tres personas por cuarto. - Abastecimiento de agua: Area urbana: Hogares cuya fuente de abastecimiento de agua es pozo o vertiente, r¡o o acequia, carro repartidor u otra. Area rural: Hogares cuya fuente de abastecimiento de agua es r¡o o acequia, carro repartidor u otra. - Servicio higinico: Area urbana: Hogares sin ning£n sistema de eliminaci¢n de excretas o que no disponen de servicio higinico, o que s¢lo disponen de letrina y pozo ciego. Area rural: Hogares sin ning£n sistema de eliminaci¢n de excretas o que no disponen de servicio higinico. - Asistencia escolar: Hogares con ni¤os de 7 a 12 a¤os de edad que no asisten a establecimientos de educaci¢n regular. - Relaci¢n de dependencia: Area urbana: Hogares cuyo jefe es menor de 45 a¤os de edad con 5 ¢ menos a¤os de educaci¢n primaria aprobados, y que tienen 4 ¢ m s personas por miembro ocupado, u hogares cuyo jefe tiene 45 o m s a¤os, 2 ¢ menos a¤os de educaci¢n primaria aprobados, y que tienen 4 o m s personas por miembro ocupado. Area rural: Hogares cuyo jefe tiene 2 ¢ menos a¤os de educaci¢n primaria aprobados y que tienen 4 ¢ m s personas por miembro ocupado. En Paraguay, la Direcci¢n General de Estad¡stica y Censos, us¢ tres indicadores. Vivienda inadecuada: hogares en viviendas con paredes de material distinto a ladrillos, techo de paja o madera, y piso de tierra. Hacinamiento: hogares con 3 ¢ mas personas por pieza utilizada para dormir. Servicio higinico: hogares con letrina com£n o sin servicio sanitario. En Uruguay, la Direcci¢n General de Estad¡stica y Censos defini¢ el mbito de NBI con seis indicadores: - Vivienda inadecuada: Hogares residiendo en viviendas con paredes de lata o material de desecho, o techos de lata o material de desecho, o piso de tierra o cascote suelto. O viviendas con seis o m s hogares, y al menos dos de ellos compartiendo el servicio sanitario. - Hacinamiento: Hogares con m s de 2 personas por cuarto (exclu- yendo cocina y ba¤o). - Disponibilidad de agua potable: Hogares que utilizan para beber y cocinar agua con abastecimiento por ca¤er¡a fuera del terreno de la vivienda o a m s de 100 metros de la vivienda, o con abastecimiento por ca¤er¡a en el terreno de la vivienda y cuyo origen es ®otro¯ (arroyo, r¡o, etc.), o sin abastecimiento por ca¤er¡a y cuyo origen es la red general p£blica o privada, u ®otro¯ (arroyo, r¡o, etc.). - Servicio sanitario: Hogares sin servicio sanitario o sin sistema de evacuaci¢n o con sistema de evacuaci¢n igual a ®otro¯, o con servicio sanitario sin descarga de agua, compartido con otros hogares. - Asistencia escolar: Hogares con presencia de ni¤os (de 6 a 15 a¤os) que no asisten a la escuela habiendo asistido y que no terminaron la educaci¢n primaria, o personas de entre 7 y 15 a¤os que nunca asistieron a un establecimiento de ense¤anza regular. - Relaci¢n de dependencia: Hogares con jefes de 44 a¤os o menos con educaci¢n primaria incompleta, o de 45 a¤os o m s con hasta dos a¤os de educaci¢n formal, en hogares con m s de 3 personas por cada persona ocupada o perceptora. EXPERIENCIA LATINOAMERICANA EN MEDICION POR NBI TIPO DE VIVIENDA ÚÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ¿ ³ ARGENTINA COLOMBIA ECUADOR PARAGUAY URUGUAY VENEZUELA ³ ³ ³ ÀÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÙ Hogares que habitan una Cabeceras municipales Hogares en viviendas con: Hogares en viviendas con: Hogares residiendo en Hogares en viviendas: vivienda de tipo . Viviendas m¢viles, . Paredes de adobe o tapia . Paredes de material viviendas con: ù Improvisadas (ranchos y inconveniente (pieza de refugio natural o puente y madera, ca¤a no revestida distinto a ladrillo, y . Paredes de lata o material ranchos campesinos), o inquilinato, vivienda aquellas sin paredes o con u otros materiales, y . Techo de paja o madera, de desecho; o ù En casas de vecindad o precaria u "otro tipo", lo paredes exteriores de tela . Piso de ca¤a, tierra u y . Techos de lata o material en otra clase (tr ileres o que excluye casa, o desechos, o con piso de otros materiales . Piso de tierra de desecho; o remolques, departamento o rancho) tierra. . Paredes de ca¤a revestida, . Piso de tierra o cascote embarcaciones, carpas, Resto y suelto, o cuevas, etc.) . Viviendas m¢viles, . Piso de tierra u otros . 6 ¢ m s hogares y que la refugio natural o puente, materiales. menos .dos de ellos y aquellas de paredes de comparten el servicio material semipermanente sanitario. o perecedero (bahareque, guadua, ca¤a o madera) piso de tierra que simult neamente tengan piso de tierra. HACINAMIENTO ÚÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ¿ ³ ARGENTINA COLOMBIA ECUADOR PARAGUAY URUGUAY VENEZUELA ³ ³ ³ ÀÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÙ Hogares con m s de 3 Hogares con m s de 3 Hogares con m s de 3 Hogares con 3 ¢ mas Hogares con m s de 2 Hogares con m s de 3 personas por cuarto. personas por cuarto personas por cuarto personas por pieza utilizada personas por cuarto personas por dormitorio. (excluyendo cocina, ba¤os (excluyendo cocina, ba¤os, para dormir. (excluyendo cocina y y garaje). vest¡bulos y pasillos). ba¤o). DISPONIBILIDAD DE AGUA POTABLE ÚÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ¿ ³ ARGENTINA COLOMBIA ECUADOR PARAGUAY URUGUAY VENEZUELA ³ ³ ³ ÀÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÙ No definido Se consider¢ en Area urbana No definido Hogares que utilizan para Area urbana combinaci¢n con el sistema ù Hogares que se establecen beber y cocinar agua: ù Si carece al menos de eliminaci¢n de excretas. de agua de pozo o ù Con abastecimiento por uno de los dos servicios vertiente, r¡o o acequia, ca¤er¡a fuera del terreno (agua y desague). carro repertidor u otra. de la vivienda o a m s de 100 metros de la vivienda, Area rural o . Hogares que abastecen ù Con abastecimiento por Area rural de agua de r¡o o acequia, ca¤er¡a en el terreno de la ù Si carece de los dos carro repartidor u otra vivienda y cuyo origen es servicios. fuente. "otro" (arroyo, r¡o, etc.), o ù Sin abastecimiento por ca¤er¡a y cuyo origen es la red general p£blica o privada u "otro" (arroyo, r¡o, etc.). TIPO DE SISTEMA DE ELIMINACION DE EXCRETAS ÚÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ¿ ³ ARGENTINA COLOMBIA ECUADOR PARAGUAY URUGUAY VENEZUELA ³ ³ ³ ÀÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÙ Hogares que no poseen Cabeceras municipales Area urbana Hogares: con letrina com£n Hogares: Area Urbana ning£n tipo de retrede. ù Hogares en viviendas sin ù Hogares sin ning£n sistema de o sin servicio sanitario ù Sin servicio sanitario, o ù Si carece de al menos uno sanitarios, o que careciendo eliminaci¢n de excretas; o . Sin sistema de evacuaci¢n o de los dos servicios (agua de acueducto se proveen de que no disponen de servicio . con sistema de evacuaci¢n y desague) agua en r¡o, nacimiento, higinico, o igual a "otro", o carro tanque o de la lluvia. que s¢lo disponen de letrina y . Con servicio sanitario sin Area rural Resto pozo ciego. descarga de agua, ù Si carece de los dos ù Hogares en viviendas sin Area rural compartido con otros servicios (agua y desague) sanitario y acueducto, y que ù Hogares sin ning£n sistema de hogares. se proveen de agua de r¡o, eliminaci¢n de excretas, o nacimiento o de la lluvia. que no disponen de servicio higinico. ASISTENCIA ESCOLAR ÚÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ¿ ³ ARGENTINA COLOMBIA ECUADOR PARAGUAY URUGUAY VENEZUELA ³ ³ ³ ÀÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÙ Hogares con alg£n ni¤o en Hogares con, a lo menos, Hogares con ni¤os de 7 a 12 No definido. Hogares con ni¤os (de 6 a 15 Hogares con ni¤os en edad edad escolar (6 a 12 a¤os) un ni¤o mayor de 6 a¤os y a¤os de edad que no asisten a a¤os) que no asisten a la escolar (7 a 12 a¤os) que que no asiste a la escuela. menor de 12, pariente del establecimientos de educaci¢n escuela habiendo asistido y no asistieron a la escuela jefe, que no asiste a un regular. que no terminaron la centro de educaci¢n formal. educaci¢n primaria, o personas entre 7 y 15 a¤os que nunca asistieron a un establecimiento de ense¤anza regular. RELACION DE DEPENDENCIA Y NIVELES EDUCACIONALES DE LOS JEFES DE HOGAR ÚÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ¿ ³ ARGENTINA COLOMBIA ECUADOR PARAGUAY URUGUAY VENEZUELA ³ ³ ³ ÀÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÙ Hogares con 4 ¢ m s Hogares con m s de 3 Area urbana No definido. Hogares con jefes de 44 a¤os Hogares con m s de 3 personas por miembro personas por miembro Hogares cuyo jefe es menor de o menos con educaci¢n personas por miembro ocupado y, adem s, cuyo ocupado, cuyo jefe haya 45 a¤os, con 5 ¢ menos a¤os de primaria incompleta, 0 de 45 ocupado, cuyo jefe de jefe tuviera baja educaci¢n aprobado como m ximo dos educaci¢n primaria aprobados y a¤os o m s con hasta dos hogar no haya alcanzado (nunca asisti¢ a alg£n a¤os de educaci¢n primaria. que tienen 4 ¢ mas personas por a¤os de educaci¢n formal, en una escolaridad de tres establecimiento eduacional miembro ocupado; u hogares hogares con m s de 3 a¤os o grados. o asisti¢, como m ximo, cuyo jefe tiene 45 ¢ m s a¤os, personas por cada persona hasta 2ø a¤o de nivel 2 ¢ menos a¤os de educaci¢n ocupada o perceptora. primario). primaria aprobados, y que tienen 4 ¢ mas personas por miembro ocupado Area rural Hogares cuyo jefe tiene 2 ¢ menos a¤os de educaci¢n primaria aprobados y que tienen 4 ¢ m s personas por miembro ocupado. ÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ En Venezuela, la Oficina Central de Estad¡stica e Inform tica (OCEI), levant¢ el mapa de pobreza con cinco indicadores: - Vivienda inadecuada: Hogares en viviendas improvisadas (ranchos y ranchos campesinos), en casas de vecindad o en otra clase (tr iler, remolque, embarcaci¢n, carpa, cueva, etc.). - Hacinamiento: Hogares con m s de 3 personas por dormitorio. - Servicio de agua y desage: Area urbana: Si carece de uno al menos de los dos servicios (agua y desage). Area rural: Si carece de ambos servicios. - Asistencia escolar: Hogares con ni¤os en edad escolar (7 a 12 a¤os) que no asisten a la escuela. - Relaci¢n de dependencia: Hogares con m s de 3 personas por miembro ocupado, cuyo jefe de hogar no alcanza una escolaridad de tres a¤os o grados. Como se puede apreciar, todos los pa¡ses coinciden en la identificaci¢n de las necesidades b sicas en funci¢n de la vivienda, infraestructura de apoyo al funcionamiento de la vivienda, dotaci¢n de servicios, educaci¢n e inserci¢n laboral. Asimismo, se puede observar cierta estandarizaci¢n en la selecci¢n de indicadores para cada una de las NBI, los que son fundamental- mente cinco: hogares en viviendas con caracter¡sticas inadecuadas, hacinamiento, servicios b sicos de agua y desage, inasistencia de menores a la escuela, y carga o dependencia econ¢mica. En cuanto a los satisfactores de cada una de las necesidades se encuentran variantes, dependiendo siempre de los est ndares prevalecientes o de los m¡nimos para cada pa¡s, de acuerdo al grado de desarrollo alcanzado. 4. Experiencia peruana en medici¢n de la pobreza En el Per£ se han efectuado diversos trabajos vinculados a la elaboraci¢n de mapas de pobreza. Uno de los primeros estudios con perspectiva geogr fica lo realiza Richard Webb, en su libro Pol¡tica gubernamental y distribuci¢n del ingreso en el Per£, 1963-1973. Se basa en una distribuci¢n del ingreso promedio per c pita provincial y departamental, con informaci¢n del Censo de 1961. En el trabajo de la AID (Agencia Internacional para el Desarrollo), La pobreza en el Per£, se efect£a un an lisis geogr fico, en funci¢n de doce indicadores, asignando a cada uno la misma ponderaci¢n. La cobertura geogr fica utilizada fue la correspondiente a provincias. Carlos Amat y Le¢n, en La desigualdad interior en el Per£ utiliz¢, adem s de la informaci¢n del Censo nacional de poblaci¢n y vivienda de 1972, las estad¡sticas de educaci¢n y salud del Instituto Nacional de Estad¡stica y las de empleo del Ministerio de Trabajo, para el mismo a¤o de estudio. Defini¢ indicadores socioecon¢micos relacionados con la satisfacci¢n de necesidades b sicas como salud, educaci¢n, vivienda, ocupaci¢n y urbanizaci¢n, incorporando la variable ingreso. A travs de un an lisis m£ltiple calcul¢ el peso relativo de cada indicador, para obtener finalmente un ¡ndice general del nivel de desarrollo. Este ¡ndice busca medir el grado de alejamiento de las provincias con respecto al nivel de desarrollo de la provincia de Lima. El Banco Central de Reserva (BCR) public¢ en 1982 el Mapa de la pobreza del Per£, en base a los resultados del Censo nacional de poblaci¢n y vivienda de 1972 y de un informe del Ministerio de Salud. Consider¢ para el estudio trece indicadores socioecon¢micos de nivel provincial, relacionados con la vivienda, educaci¢n, salud y algunas caracter¡sticas demogr ficas, como la tasa de mortalidad, natalidad, poblaci¢n econ¢micamente activa, y poblaci¢n rural. Utiliz¢ la tcnica de estandarizaci¢n de 0 a 1, ponderando los indicadores con una estructura arbitraria de pesos relativos. Esta investigaci¢n estableci¢ una tabla de pobreza y defini¢ cinco estratos de pobreza a nivel provincial. En base a la informaci¢n del Censo de 1981 se realizaron nuevos estudios sobre la pobreza, destacando los trabajos ejecutados por el BCR y el Instituto Nacional de Planificaci¢n (INP). El estudio del BCR, Mapa de pobreza del Per£, publicado en 1986, utiliz¢ como principal fuente de informaci¢n el Censo de poblaci¢n y vivienda de 1981, y adicionalmente datos estad¡sticos provenientes del Ministerio de Salud y del Instituto Nacional de Planificaci¢n, pr¢ximos al a¤o censal. Se seleccionaron los diez indicadores siguientes: - ingreso promedio por persona ocupada de 15 a¤os y m s; - porcentaje de poblaci¢n en edad escolar que asiste a locales de ense¤anza (de 5 a 19 a¤os); - porcentaje de poblaci¢n analfabeta de 15 a¤os y m s; - porcentaje de poblaci¢n de 15 a¤os y m s sin educaci¢n primaria completa; - porcentaje de poblaci¢n de 15 a¤os y m s con educaci¢n superior; - porcentaje de poblaci¢n ocupada infantil (de 6 a 14 a¤os); - porcentaje de viviendas sin agua potable por red de tuber¡a, pil¢n o pozo; - porcentaje de viviendas sin desage por red de tuber¡a, pozo negro o ciego; - porcentaje de viviendas sin alumbrado elctrico, y - n£mero de camas hospitalarias y de internamiento por cada 1 000 habitantes. El indicador de ingreso promedio por persona ocupada fue ajustado de acuerdo a la estimaci¢n de los ingresos no monetarios (autoconsumo y trueque). El trabajo identific¢ la pobreza hasta el nivel provincial. Con informaci¢n tambin del Censo de 1981, el Instituto Nacional de Planificaci¢n public¢ La distribuci¢n territorial de la pobreza en el Per£, en 1989. El estudio obtuvo una aproximaci¢n a la pobreza en los aspectos de ubicaci¢n geogr fica y sus caracter¡sticas. La provincia fue la unidad espacial de an lisis, elabor ndose una tabla por niveles de pobreza. Con respecto a los criterios de ponderaci¢n, se utiliz¢ el an lisis factorial y adicionalmente a la informaci¢n del Censo de poblaci¢n y vivienda se consideraron los resultados del Censo agropecuario. Los indicadores seleccionados fueron los siguientes: - ingreso laboral promedio anual per c pita; - educaci¢n (tasa de analfabetismo y escolaridad); - vivienda (porcentaje de viviendas sin agua potable o sin desage);. - salud (tasa de mortalidad infantil), y - ocupaci¢n (porcentaje de poblaci¢n econ¢mica activa, PEA, ocupada en el sector agricultura, caza y silvicultura). Sobre la base de los promedios provinciales de los siete indicadores seleccionados y utilizando la tcnica del an lisis factorial de componentes principales, se obtuvo un ¡ndice global de pobreza. Con este ¡ndice se ordenaron las provincias y luego se procedi¢ a agruparlas en cuatro estratos de ingreso, mediante la tcnica del an lisis de conglomerados. Tambin destaca el trabajo Los niveles de vida en las provincias del Per£, de Arambur£, Petrera y Tagliferro que, en base a una conceptualizaci¢n del nivel de vida, seleccion¢ cinco indicadores: - proporci¢n de viviendas sin ning£n artefacto; - ingreso laboral promedio per c pita; - proporci¢n de mujeres analfabetas mayores de 15 a¤os; - tasa espec¡fica de actividad de ni¤os de 6 a 9 a¤os, y - tasa de mortalidad infantil. Luego, con el fin de lograr un indicador resumen de nivel de vida, se estandarizaron los cinco indicadores conformando el ¡ndice de nivel de vida. Seguidamente, en base a los puntos de corte de la distribuci¢n, se establecieron los estratos en una escala de mayor a menor nivel de vida. Los trabajos antes mencionados, y otros, tienen como limitante no arribar a una cuantificaci¢n de la pobreza, siendo ste el principal defecto del enfoque relativo de la pobreza. Por otro lado, la ubicaci¢n geogr fica de mayor a menor pobreza difiere en cada uno de los mapas, no obstante referirse al mismo a¤o, b sicamente en raz¢n de los indicadores utilizados para la determinaci¢n del ¡ndice de nivel de vida, y por las tcnicas de ponderaci¢n o normalizaci¢n empleadas en la agregaci¢n y s¡ntesis de los indicadores seleccionados. 5. Metodolog¡a utilizada por el INEI Para la construcci¢n del Mapa de pobreza en el INEI, se utiliz¢ el mtodo de las necesidades b sicas insatisfechas, m s conocido como NBI, estudiando el fen¢meno a partir de la informaci¢n del Censo de poblaci¢n y vivienda de 1993 y arribando a una focalizaci¢n a nivel de distritos. El enfoque desarrollado fue el de pobreza absoluta, con la premisa de que el bienestar de un individuo o familia est en relaci¢n con est ndares m¡nimos socialmente aceptables. Las necesidades b sicas se definieron con sus respectivos componentes. A partir de stos, se dise¤¢ un conjunto de indicadores que expresan el nivel de satisfacci¢n de cada necesidad. Para la identificaci¢n de los hogares con necesidades b sicas satisfechas e insatisfechas, se determin¢ un nivel m¡nimo para cada indicador. De la aplicaci¢n de estos indicadores se generaron tres grupos por condici¢n de pobreza y necesidades b sicas satisfechas: a) Hogares con necesidades b sicas satisfechas (NBS), los que se consideran como no pobres. Comprende al estrato que no presenta ninguna necesidad b sica insatisfecha. b) Hogares con necesidades b sicas insatisfechas (NBI), los cuales se identifican como pobres. En este estrato se encuentran todos aquellos hogares que presenten al menos una necesidad b sica insatisfecha. c) Hogares con dos o m s necesidades b sicas insatisfechas. La magnitud de los hogares y finalmente de la poblaci¢n en cada uno de los grupos ya se¤alados, se obtiene ubicando a las personas de acuerdo a las condiciones de cada uno. La medici¢n est referida a los hogares que habitan en viviendas particulares con ocupantes presentes, no incluye a las personas que habitan en viviendas colectivas como hoteles, c rceles, hospitales, etc. Este mtodo ha sido desarrollado por la CEPAL para ser aplicado esencialmente con la informaci¢n proveniente de los censos de poblaci¢n y vivienda, ya que a partir de stos se obtiene una mayor aproximaci¢n por la cobertura a los diferentes niveles geogr ficos, que no es posible lograr con las encuestas de hogares u otras producciones estad¡sticas de car cter muestral. A travs del mtodo de NBI podemos identificar el n£cleo representativo de la pobreza, as¡ como jerarquizar geogr ficamente todo el territorio nacional para la focalizaci¢n de las pol¡ticas y programas de inversi¢n en vivienda, salud, educaci¢n, servicios p£blicos, y otros aspectos que caen dentro de la pol¡ticas sociales. 5.1 Indicadores seleccionados Se seleccionaron dos grupos de indicadores, uno para la medici¢n de NBI y otro de indicadores complementarios, que sirvieron de base para el diagn¢stico global del fen¢meno en estudio. Los indicadores de NBI fueron planteados privilegiando el criterio del m¡nimo satisfactor en la definici¢n de lo adecuado, bajo la concepci¢n objetiva de establecer criterios £nicos de medici¢n de pobreza absoluta. A continuaci¢n se describen estos indicadores. i) Hogares en viviendas con caracter¡sticas f¡sicas inadecuadas El acceso a la vivienda es una necesidad b sica que debe guardar condiciones est ndar en cuanto a habitabilidad, privacidad y una comodidad m¡nima, y en la cual los miembros del hogar puedan desarrollar sus actividades individuales y sociales sin privaciones. En este sentido, el indicador hogares en viviendas con caracter¡s- ticas f¡sicas inadecuadas alude al material predominante en las paredes y pisos, as¡ como al tipo de vivienda. De este modo, se consider¢ que no cumplen con los requerimientos m¡nimos aquellos hogares que habitan en viviendas cuyo material predominante en las paredes exteriores es la estera; a los hogares cuyas viviendas tienen piso de tierra y paredes exteriores de quincha, piedra con barro, madera u otros materiales, y a los hogares que habitan en viviendas improvisadas (de cart¢n, lata, ladrillos y adobes superpuestos, etc.). ii) Hogares en viviendas con hacinamiento Otro indicador que define el acceso a una vivienda adecuada se refiere a la existencia o no de hacinamiento, es decir la densidad de ocupaci¢n de los espacios de la vivienda. El hacinamiento resulta de relacionar el n£mero de personas con el n£mero total de habitaciones que tiene la vivienda, sin contar el ba¤o, cocina ni pasadizo. Se determina que hay hacinamiento cuando residen m s de tres personas por cuarto. iii) Hogares en viviendas sin desage de ning£n tipo Dentro de la infraestructura de los servicios b sicos del hogar, la disponibilidad de servicio higinico es esencial. Efectiva- mente, el disponer de un servicio higinico o de un lugar de la vivienda destinado a la deposici¢n de excretas, asegura la posibilidad de evitar riesgos de contaminaci¢n y la presencia de factores que atenten contra la salud. Existe abundante evidencia de la estrecha relaci¢n entre la mortalidad infantil y el acceso a un medio adecuado de eliminaci¢n de excretas, basada en la carencia del mismo y en la ausencia de condiciones de saneamiento b sico. En este sentido, el indicador de hogares en viviendas sin desage de ningun tipo, considera que el m¡nimo necesario lo constituye la disponibilidad de un sanitario; por tanto, comprende a los hogares que no disponen de servicio higinico por red de tuber¡a o pozo ciego. iv) Hogares con ni¤os que no asisten a la escuela La educaci¢n que se adquiere en la escuela desde los primeros a¤os constituye el v¡nculo inicial de integraci¢n del ni¤o a la sociedad. En consecuencia, la inasistencia a la escuela de ni¤os en edad escolar representa una privaci¢n cr¡tica, por lo que se adopt¢ el criterio de que aquellos hogares con presencia de al menos un ni¤o de 6 a 12 a¤os que no asiste a un centro educativo, no tiene capacidad de acceso a los servicios educativos. v) Hogares con alta dependencia econ¢mica En vista de que los indicadores expresados anteriormente no cubren aspectos relacionados con la satisfacci¢n de necesidades ligadas al consumo corriente en alimentaci¢n, salud, vestuario, transporte, etc., y de que el censo no incorpora la variable ingreso, es de pr ctica com£n en Amrica Latina, en el marco del mtodo de NBI, construir un indicador indirecto de la capacidad econ¢mica de los hogares, con el cual se busca identificar los hogares que no disponen de los recursos suficientes para alcanzar niveles m¡nimos de consumo en todos aquellos bienes y servicios que normalmente se obtienen a travs del flujo de ingresos monetarios. El indicador representa en cierta forma una probabilidad de insuficiencia de ingresos para cubrir las necesidades, en la medida en que se vale de dos determinantes: el nivel educativo del jefe del hogar, y la carga econ¢mica determinada por el tama¤o familiar; es decir, el n£mero de dependientes del hogar. Adicionalmente, se consider¢ que un hogar ten¡a alta carga o dependencia econ¢mica por no existir ning£n miembro ocupado y el jefe de hogar contar s¢lo con educaci¢n primaria incompleta. - Nivel educativo del jefe del hogar. El jefe del hogar es por lo general el £nico o el principal perceptor de ingresos del hogar, por lo que se defini¢ como nivel cr¡tico de educaci¢n cuando el jefe del hogar cuenta con educaci¢n primaria incompleta. - Nivel de dependencia. Se consider¢ como perceptores de ingresos s¢lo a los ocupados, incluidos los trabajadores familiares no remunerados y a los hogares sin ning£n miembro ocupado y se estableci¢ como cr¡tica la presencia de m s de tres personas por ocupado. 5.2 Procedimiento metodol¢gico para calcular el ¡ndice de necesidades b sicas insatisfechas (NBI) El procedimiento metodol¢gico consiste, en primer lugar, en identificar a los hogares carentes por cada indicador (Ij); luego, para el c lculo de la proporci¢n de hogares carentes por cada indicador, se le relaciona con el total de hogares de la divisi¢n pol¡tico-administrativa correspondiente. Finalmente, se agrupan los hogares que tienen al menos una NBI, de la manera siguiente: Hog1 = Hogares con 1 necesidad b sica insatisfecha. Hog2 = Hogares con 2 necesidades b sicas insatisfechas. Hog3 = Hogares con 3 necesidades b sicas insatisfechas. Hog4 = Hogares con 4 necesidades b sicas insatisfechas. Hog5 = Hogares con 5 necesidades b sicas insatisfechas. En base a estos cinco grupos de hogares se obtiene por sumatoria y agregaci¢n el ¡ndice de necesidades b sicas insatisfechas (INBI), que representa el indicador sinttico de los hogares con al menos una necesidad b sica insatisfecha para cada rea geogr fica, resumida en la siguiente expresi¢n matem tica: n=5 HOGi INBI= ä ÄÄÄÄÄÄ i=l HT Donde: INBI = Indice de necesidades b sicas insatisfechas para cada An HOGi = Hogares con al menos una necesidad b sica insatisfecha, reflejada en cada IJ An = Area geogr fica (distrital, provincial, departamental, nacional) Ij = Indicador de carencia HT = Total de hogares II. MAPA DE NECESIDADES BASICAS INSATISFECHAS A NIVEL NACIONAL Y DEPARTAMENTAL 1. An lisis global (cuadro 1) Seg£n los censos nacionales de 1993, existen 2 millones 567 mil hogares que presentan al menos una necesidad b sica insatisfecha (NBI), y representan el 53.9% del total de hogares del pa¡s. Mirado como poblaci¢n afectada, significa que 12 millones 374 mil peruanos presentan alguna de estas caracter¡sticas de pobreza. Para efectos del presente estudio, se han considerado cinco necesidades b sicas insatisfechas: hogares en viviendas con caracter¡sticas f¡sicas inadecuadas; hogares en viviendas con hacinamiento; hogares en viviendas sin desage de ning£n tipo; hogares con al menos un ni¤o de 6 a 12 a¤os que no asiste a la escuela, y hogares con alta dependencia econ¢mica. En el rea urbana, los hogares con al menos una NBI representan el 39.2% del total de hogares urbanos, comprendiendo una poblaci¢n de 6 millones 465 mil personas. En el rea rural, el porcentaje de hogares con al menos una NBI es mayor que en el rea urbana, representando el 88.2% de los hogares rurales. Esta situaci¢n afecta a 5 millones 909 mil personas. 2. Hogares seg£n tipo de necesidad b sica insatisfecha (cuadro 2) La necesidad b sica insatisfecha que afecta en mayor proporci¢n a los hogares, es la carencia del servicio de desage. Seg£n los censos de 1993, los hogares que habitan en viviendas sin desage de ning£n tipo, representan el 37.8% del total del pa¡s, que equivale a 1 mill¢n 801 mil hogares. Esta situaci¢n afecta a 7 millones 954 mil personas a nivel nacional. Este indicador identifica a los hogares que no disponen de ning£n sistema de eliminaci¢n de excretas, ni siquiera un pozo ciego o negro, estando por tanto expuestos a un mayor riesgo en salubridad que compromete la salud y vida de las personas, en especial de los ni¤os. La falta de desage es m s notoria en el rea rural, donde alcanza al 76.6% de los hogares rurales, lo que representa 1 mill¢n 93 mil hogares y afecta a 4 millones 941 mil personas. En el rea urbana son 708 mil hogares (21.2% del total de hogares urbanos), afectando a 3 millones 13 mil habitantes. Los hogares que ocupan viviendas con hacinamiento, constituyen el 17.8% total del pa¡s; representan 850 mil hogares y afectan a 5 millones 458 mil personas. Este indicador alude a los hogares que tienen m s de tres personas por cuarto, es decir en condici¢n de hacinamiento, con escasa disponibilidad de espacio para el desarrollo y la privacidad del hogar. En el rea rural, el 28.4% de hogares (405 mil hogares) viven en condici¢n de hacinamiento e involucran a 2 millones 650 mil personas. En el rea urbana suman 445 mil hogares (13.3%) y 2 millones 808 mil personas. Otro indicador de NBI se refiere a los hogares que ocupan viviendas con caracter¡sticas f¡sicas inadecuadas, que en el pa¡s son 677 mil; esto es, 14.2% del total nacional, afectando a 3 millones 11 mil personas. Este indicador identifica a los hogares que habitan en viviendas improvisadas, construidas con materiales ligeros (lata, cart¢n, ladrillos sobrepuestos, etc.) o que tienen paredes de estera y piso de tierra. En el rea rural, los hogares en viviendas inadecuadas, constituyen el 22.5% (321 mil hogares) y comprometen a 1 mill¢n 442 mil personas. En el rea urbana, no obstante que el n£mero de hogares afectados es mayor (356 mil), representan s¢lo el 10.7% y afectan a 1 mill¢n 569 mil personas. Los hogares con alta dependencia econ¢mica son, aproximadamente, 457 mil y representan al 9.6% del total de hogares del pa¡s. Este indicador se refiere a los hogares donde el jefe del hogar tiene educaci¢n primaria incompleta y existen m s de tres personas por persona ocupada, lo que influye en una inadecuada o precaria inserci¢n laboral y, por consiguiente, en bajos ingresos en hogares con un mayor n£mero de personas dependientes. En el rea rural, el 17.8% de los hogares (254 mil) se encuentran en esta situaci¢n, afectando a la cuarta parte de la poblaci¢n rural (1 mill¢n 641 mil personas). En el rea urbana, aproximada- mente 203 mil hogares (6.1%) y 1 mill¢n 329 mil personas presentan esta NBI. Los hogares con ni¤os que no asisten a la escuela comprenden el 7.7% de los hogares del pa¡s, que representan 366 mil hogares. Esta carencia se expresa en un mayor grado en el rea rural, donde afecta al 13.6% de los hogares (193 mil). En el rea urbana, al 5.2% de los hogares (172 mil). Esta necesidad b sica insatisfecha identifica a los hogares con al menos un ni¤o de 6 a 12 a¤os que no asiste a la escuela. La inasistencia escolar de las personas constituye una carencia que reduce significativamente las posibilidades futuras de una adecuada inserci¢n laboral, y que est asociada, con frecuencia, a los bajos niveles de instrucci¢n de los padres. 3. Hogares seg£n n£mero de necesidades b sicas insatisfechas (cuadro 3) El nivel de pobreza del hogar est vinculado al n£mero de necesidades b sicas insatisfechas. Cuanto mayor es el n£mero de NBI, mayor ser el grado de pobreza de dicho hogar. El 53.9% de los hogares, tal como se indic¢, presenta por lo menos una necesidad b sica insatisfecha; es decir, involucra a los hogares que tienen una, dos, tres, cuatro o cinco NBI en forma simult nea. En consecuencia, en el marco de las cinco NBI consideradas en el estudio, el 46.1% de los hogares del pa¡s no est n afectados por ninguna de estas NBI. El 30.6% de hogares tienen una necesidad b sica insatisfecha, o sea 1 mill¢n 459 mil hogares. En el rea urbana, existen 866 mil hogares con una NBI, que representan el 25.9% del total de hogares urbanos. En el rea rural hay 592 mil hogares, que constituyen el 41.5% de los hogares rurales. La estructura de los hogares seg£n el n£mero de NBI es diferencial por reas de residencia. En el rea urbana, los hogares con una necesidad b sica insatisfecha constituyen el grupo m s importante (25.9%). Los hogares con dos a cinco NBI s¢lo llegan al 13.3%. En cambio, en el rea rural los hogares con una NBI representan el 41.5%, los hogares con dos NBI son el 28.4%, los que tienen tres NBI llegan al 13.3%, y los que tienen cuatro a cinco NBI son el 5%. Es decir, los hogares con dos o m s necesidades constituyen el 46.7% de los hogares rurales. En conclusi¢n, en el rea urbana los hogares con una NBI son la mayor¡a, contrariamente a lo que ocurre en el rea rural donde los hogares con dos a m s NBI son la mayor¡a. A nivel nacional, los hogares que tienen dos a cinco NBI, son 1 mill¢n 108 mil, afectando a 6 millones 178 mil personas. En el rea urbana, son 442 mil hogares afectados y comprometen a 2 millones 448 mil personas. En cambio, en el rea rural, estos hogares ascienden a 666 mil e involucran a 3 millones 730 mil personas. 4. Hogares con necesidades b sicas insatisfechas seg£n departamentos (cuadro 4) Todos los departamentos del pa¡s presentan, unos m s que otros, hogares con necesidades b sicas insatisfechas. Se pueden establecer cinco grupos de departamentos seg£n su indicador sinttico. El primer grupo est constituido por los m s afectados, con porcentajes por encima del 80%. En Huancavelica, el 91.5% de los hogares tienen al menos una NBI; en Ayacucho, el 82.8% de los hogares est n en similar condici¢n, y en Apur¡mac, el 82.5% de los hogares presentan tambin por lo menos una NBI. En el segundo grupo, est n los departamentos cuyos hogares con al menos una NBI fluct£an entre el 70% y 80%. Ellos son: Pasco (79%), Hu nuco (76.4%), Cusco (74.3%), Loreto (74.2%), Cajamarca (73.6%), Amazonas (73.2%), Madre de Dios (72.1%) y Puno (71.7%). El tercer grupo re£ne a los departamentos con indicadores sintticos con m s de 50% y menos de 70%. Estos son: Ucayali (69.2%), San Mart¡n (67.9%), Piura (67.5%), Jun¡n (63%), Ancash (61.9%) y Tumbes (59%). En el cuarto grupo, con indicadores sintticos de m s de 40% y menos de 50%, est n los departamentos de Moquegua (48.6%), La Libertad (47.7%), Lambayeque (43.9%), Ica (41.6%) y Arequipa (41.5%). El quinto grupo, con indicadores menores de 40%, lo conforman los departamentos de Tacna (36.7%), Lima (31.8%) y la provincia constitucional del Callao (31.6%). Cuadro 1 PERU: TOTAL DE HOGARES CON AL MENOS UNA NECESIDAD BASICA INSATISFECHA Y POBLACION AFECTADA; SEGUN AREA DE RESIDENCIA ÚÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ¿ ³ Area ³ Total ³ Hogares con NBI ³ Poblaci¢n ³ Poblaci¢n con NBI ³ ³ de ³ de ÃÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ´ en ÃÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ´ ³ residencia ³ hogares ³ % ³ Absoluto ³ hogares ³ % ³ Absoluto ³ ÀÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÙ TOTAL PAIS 4 762 779 54 2 566 549 21 801 654 57 12 374 322 AREA URBANA 3 336 221 39 1 308 424 15 242 089 42 6 465 428 AREA RURAL 1 426 558 88 1 258 125 6 559 565 90 5 908 894 ÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ FUENTE: INEI - CENSOS NACIONALES DE 1993. Cuadro 2 PERU: HOGARES CON NECESIDADES BASICAS INSATISFECHAS Y POBLACION AFECTADA; SEGUN AREA DE RESIDENCIA Y TIPO DE INDICADOR ÚÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ¿ ³ Area de residencia ³ Hogares con NBI ³ Poblaci¢n con NBI ³ ³ ÃÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÅÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ´ ³ y Tipo de indicador ³ % ³ Absoluto ³ % ³ Absoluto ³ ÀÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÙ PAIS 54 2 566 549 57 12 374 322 Viv, CARACT, FISICAS INADECUADAS 14 677 387 14 3 010 939 Viv, CON HACINAMIENTO 18 849 724 25 5 457 966 Viv, SIN DESAGUE 38 1 800 790 37 7 954 151 Hogares CON NI¥OS QUE NO ASISTEN 8 365 807 11 2 300 208 Hogares ALTA DEPENDENCIA ECONOMICA 10 456 501 14 2 969 148 AREA URBANA 39 1 308 424 42 6 465 428 Viv, CARACT, FISICAS INADECUADAS 11 356 302 10 1 569 068 Viv, CON HACINAMIENTO 13 445 116 18 2 808 038 Viv, SIN DESAGUE 21 707 818 20 3 012 862 Hogares CON NI¥OS QUE NO ASISTEN 5 172 368 7 1 065 111 Hogares ALTA DEPENDENCIA ECONOMICA 6 202 855 9 1 328 618 AREA RURAL 88 1 258 125 90 5 908 894 Viv, CARACT, FISICAS INADECUADAS 23 321 085 22 1 441 871 Viv, CON HACINAMIENTO 28 404 608 40 2 649 928 Viv, SIN DESAGUE 77 1 092 972 75 4 941 289 Hogares CON NI¥OS QUE NO ASISTEN 14 193 439 19 1 235 097 Hogares ALTA DEPENDENCIA ECONOMICA 18 253 646 25 1 640 530 ÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ FUENTE: INEI - CENSOS NACIONALES DE 1993, Cuadro 3 PERU: HOGARES CON NECESIDADES BASICAS INSATISFECHAS Y POBLACION AFECTADA SEGUN AREA DE RESIDENCIA Y NUMERO DE NECESIDADES BASICAS INSATISFECHAS ÚÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ¿ ³ Area de residencia y n£mero ³ Hogares con NB ³ Poblaci¢n con NBI ³ ³ ÃÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÅÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ´ ³ de necesidades insatisfechas ³ % ³ Absoluto ³ % ³ Absoluto ³ ÀÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÙ TOTAL PAIS 54 2 566 549 56,8 12 374 322 UNA NECESIDAD 31 1 458 540 28,4 6 195 970 DOS NECESIDADES 15 734 446 17,2 3 745 873 TRES NECESIDADES 6 282 721 8,3 1 804 557 CUATRO A CINCO NECESIDADES 2 90 842 2,9 627 922 AREA URBANA 39 1 308 424 42,4 6 465 428 UNA NECESIDAD 26 866 148 26,4 4 017 449 DOS NECESIDADES 10 329 902 11,3 1 726 865 TRES NECESIDADES 3 92 813 3,8 585 191 CUATRO A CINCO NECESIDADES 1 19 561 0,9 135 923 AREA RURAL 88 1 258 125 90,1 5 908 894 UNA NECESIDAD 42 592 392 33,2 2 178 521 DOS NECESIDADES 28 404 544 30,8 2 019 008 TRES NECESIDADES 13 189 908 18,6 1 219 366 CUATRO A CINCO NECESIDADES 5 71 281 7,5 491 999 ÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ FUENTE: INEI - CENSOS NACIONALES DE 1993. Cuadro 4 PERU: TOTAL DE HOGARES CON AL MENOS UNA NECESIDAD BASICA INSATISFECHA Y POBLACION AFECTADA SEGUN DEPARTAMENTOS (Ranking seg£n el % de hogares con NBI) ÚÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ¿ ³ Nø ³ ³ Total ³ Hogares con NBI ³ Poblaci¢n ³ Poblaci¢n con NBI ³ ³ de ³ Departamento ³ de ÃÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ´ en ÃÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ´ ³ Orden ³ ³ Hogares ³ % ³ Absoluto ³ Hogares ³ % ³ Absoluto ³ ÀÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÙ TOTAL PAIS 4 762 779 54 2 566 549 21 801 654 57 12 374 322 1 HUANCAVELICA 89 483 92 81 853 382 436 92 352 726 2 AYACUCHO 118 440 83 98 013 485 417 83 404 489 3 APURIMAC 86 104 83 71 069 378 038 83 314 478 4 PASCO 48 529 79 38 358 223 259 81 181 250 5 HUANUCO 135 848 76 103 838 649 430 79 513 115 6 CUSCO 235 056 74 174 680 1 019 579 76 773 816 7 LORETO 120 648 74 89 529 674 013 79 530 550 8 CAJAMARCA 255 738 74 188 337 1 254 056 79 991 843 9 AMAZONAS 67 916 73 49 704 333 970 78 260 397 10 MADRE DE DIOS 14 000 72 10 088 64 916 77 49 852 11 PUNO 284 892 72 204 334 1 071 330 74 787 657 12 UCAYALI 57 978 69 40 137 308 163 73 226 007 13 SAN MARTIN 111 893 68 75 958 542 760 72 390 201 14 PIURA 276 368 68 186 435 1 377 572 70 968 459 15 JUNIN 225 443 63 142 046 1 022 642 66 675 981 16 ANCASH 209 058 62 129 311 948 542 64 608 483 17 TUMBES 31 252 59 18 431 149 010 62 91 731 18 MOQUEGUA 32 450 49 15 759 124 080 48 59 493 19 LA LIBERTAD 264 239 48 126 083 1 259 681 51 637 841 20 LAMBAYEQUE 180 101 44 78 997 914 028 49 444 435 21 ICA 121 929 42 50 701 559 687 44 248 095 22 AREQUIPA 208 390 42 86 413 904 884 43 392 176 23 TACNA 51 322 37 18 847 212 314 39 82 106 24 LIMA 1 397 370 32 443 906 6 312 672 35 2 179 293 25 CALLAO 138 332 32 43 722 629 175 33 209 848 ÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ FUENTE: INEI - CENSOS NACIONALES DE 1993. |
![]() ![]() ![]() |