Entre 1983 y 1997 se han erradicado 22,244.55 Has. de cultivos de hoja de coca. Si se consideran los índices de conversión de los almácigos de coca destruidos en superficie cultivable en todo el período se habrían erradicado 105,763.21 Has., superficie que equivale, aproximadamente, a las 129,100 Has. de hoja de coca considerada en los programas de sustitución y desarrollo alternativo del Plan Nacional de Prevención y Control de Drogas 1994-2000 ( D.S Nš 82-94-PCM).

Los datos estadísticos sobre los decomisos de hoja de coca realizados por ENACO S.A en el período 1993-97, muestran que estos varían entre 100 y 250 toneladas anuales. En cambio, es notorio que los decomisos de hoja de coca realizados por la PNP en 1996, el 47% están en el departamento de Cusco y en 1997 similar porcentaje se encuentra en la DINANDRO.

En lo que se refiere al decomiso de drogas, en el período 1993-97 hay una tendencia creciente de los decomisos de pasta básica de cocaína, cocaína y marihuana, lo cual indica los mejores resultados en la interdicción del TID. Cabe indicar, que a partir de 1994 se dan los primeros resultados de lucha de la PNP contra el cultivo de amapola y el tráfico de opio.

De otro lado, durante 1996 se decomisaron 303 TM de insumos químicos y 260 TM en 1997. Estas no indican una tendencia tan definida en la labor de represión del Tráfico Ilícito de Drogas como si se presenta en el caso del decomiso de drogas.

Según los datos de la Dirección Nacional Antidrogas DINANDRO sobre detenidos por consumo y tráfico de drogas para los años 1996 y 1997, se tiene que un 71.0% y 71,6% respectivamente, son detenidos por consumo de drogas.

De la población detenida por tráfico y consumo de drogas durante 1996 y 1997 , más del 2% son menores de 18 años de edad, y más de 67% de los detenidos se encuentran entre los 18 y 35 años.

Respecto a los detenidos por tráfico ilícito de drogas en los penales de la República, los datos nos permiten observar que en el período 1986-97, éstos representan el 24% del total de la población penal.

Según los resultados de la Encuesta Nacional de Hogares aplicado en el I Trimestre de 1997 por el INEI, para el 14,8% de los entrevistados sobre compra y venta de drogas en el ámbito de su residencia, la opinión era afirmativa, es decir que se comercializaba droga. El 38,0% indicó que no sabía nada al respecto y casi la mitad ( 47,1%) dijo que no se comercializaba drogas en su barrio.

Según el sexo del jefe de hogar, la opinión sobre la comercialización de droga es variable. Las jefas mujeres muestran una percepción mayor ( 17,0%) al respecto, mientras que los jefes varones en un porcentaje menor ( 14,2%) de casos opinaron en ese sentido.

Según ámbito de estudio, se observa que algo más de la quinta parte de los jefes de hogar de Lima Metropolitana ( 21,4%) declararon haber percibido que se comercializaba drogas en su barrio o localidad. En la Costa Centro, Costa Norte y Selva se aprecian proporciones mayores de 10,0% que declararon lo mismo. La Sierra Sur con 0,9% y la Sierra Norte con 1,2% muestran los porcentajes más bajos.

Otro aspecto negativo en este tema es que alrededor de 2 millones de Has. de bosques tropicales se encuentran afectados en el deterioro de los suelos, su flora y fauna por la depredación de bosques naturales para el cultivo de coca y por el uso de insumos químicos como el ácido sulfúrico, ácido clorhídrico, carbonato de sodio, permanganato de potasio, ácido muriático, etc., así como el empleo de herbicidas, pesticidas y fertilizantes químicos.