I. MARCO TEORICO DE LA INVESTIGACION

El análisis del presente trabajo empírico adopta como guía la concepción del desarrollo sostenida sobre la calidad del capital humano. Este pensamiento, en síntesis señala que no es posible alcanzar el desarrollo de las naciones sin contar con capital humano, de allí que esta teoría se concentró y destacó el efecto del factor educación sobre el desarrollo.

La idea central en la teoría del capital humano es que el uso de escasos recursos para conseguir educación, salud y trabajo adecuado es una inversión en la persona humana, con la finalidad de elevar su productividad. Esta inversión proviene generalmente de dos fuentes, del mismo individuo o de su hogar voluntariamente y de la sociedad, en parte canalizada a través del Estado. Sin esa inversión social es imposible salir de la condición de país en vías de desarrollo, marcada por la gran proporción de población en situación de pobreza, como es el caso del Perú.

En la sociedad peruana se percibe que el gran contingente de pobres muestra una tendencia a reproducirse de una generación a otra y que, por la dinámica social, solo una pequeña parte logra salir de dicho estado. Asimismo, se observa que lo predominante de la recomposición de la población pobre tiene su origen, en gran parte, en la misma pobreza y que la misma adopta la forma de un proceso de circularidad de la pobreza. Proceso que es explicable, en parte, por el escaso nivel educativo de los individuos, resultado que es una consecuencia del atraso escolar de los mismos. Circularidad que se produce como un proceso repetitivo y de efecto en ambos sentidos entre el estado de pobreza y la baja educación de la población. Es decir, desde una perspectiva se percibe a la pobreza como consecuencia de la baja educación y, desde otra percepción, la baja educación es un producto de la pobreza; y, tal vez, lo que realmente ocurre es que ambas situaciones se refuerzan mutuamente, constituyendo un círculo vicioso.

Considerando que uno de los principales elementos explicativos de la pobreza es el bajo nivel educativo y que el atraso escolar respecto de la edad normativa, es un fenómeno social que afecta a pobres y no pobres, la recomposición de los sucesivos estratos de no pobres y pobres, es acompañada por una movilidad social parcial entre los miembros de tales estratos. Movilidad social amparada en el factor educación, en la cual los individuos poco educados del estrato no pobre por el atraso escolar en su etapa de estudiantes; posteriormente, cuando adultos, pasan a formar parte del estrato pobre. En el lado positivo de la movilidad social, conjuntamente con otros factores, la educación es un fuerte determinante del ascenso social de aquellos individuos adecuadamente educados del estrato pobre. Estos últimos, con una trayectoria de estudios en su respectiva edad normativa y, probablemente, con metas trazadas sobre periodos más prolongados de educación que otros individuos, son los potencialmente más hábiles para salir del estado de pobreza e integrarse al estrato de los no pobres.

Esta última vertiente de la movilidad social esta concebida a partir del sustento teórico que explica el desarrollo por el acrecentamiento de capital humano. Capital humano que se valoriza y revaloriza, en el tiempo, con los años de estudio aprobados y la experiencia acumulada, agregados al capital innato de los individuos. En ese sentido, se concibe que la situación de pobreza es superable actuando fundamentalmente con el factor educativo. Así, se plantea que la pobreza sería superada luego de comprender que existe una evidente asociación entre pobreza y bajo nivel educativo y de mantener, en el tiempo, el esfuerzo de canalizar recursos de inversión social en la formación del capital humano. Por ello, para esta investigación el tema central es hallar la evidencia empírica que muestre la asociación entre el resultado educativo del hijo (estudia en edad normativa) y el nivel educativo del padre y el nivel de ingreso del hogar. Esta es una asociación entre variables que permite explicar el efecto directo sobre el logro educativo del hijo como consecuencia fundamental de la educación de los padres, incluidas las madres, y complementariamente de la acción de otras variables como el ingreso del hogar.

La percepción de la asociación entre el bajo nivel educativo y el estado de pobreza de las personas, permite postular y probar empíricamente que la ausencia de educación o el bajo nivel educativo, en general de los padres y en particular de aquellos en estado de pobreza, es el elemento con mayor fuerza explicativa, entre otros factores, del círculo vicioso de la pobreza en la que esta se reproduce. Es decir, de hogares pobres es de esperar la mayor probabilidad de hijos sin educación o con bajo nivel educativo, como consecuencia del atraso educativo respecto del grado o año correspondiente a la edad normativa. Por cierto, entre los pobres también hay un pequeño componente de individuos que estudian sin atraso escolar, alcanzan secundaria completa y/o educación superior y logran salir de la pobreza.

El logro educativo, para fines de la presente investigación, responde al año de estudio aprobado con relación a la edad normativa. En ese sentido, un logro educativo adecuado refiere de aquellos estudiantes que se encuentran matriculados o han aprobado dentro de su respectiva edad normativa y, con algo de flexibilidad, incluye a aquellos que aprobaron con un año de atraso. Asimismo, un logro educativo bajo, el cual sirve de sustento para reproducir la pobreza, es aquel relativo a los estudiantes con atraso escolar mayor a un año. Con esta definición de logro educativo (variable dependiente) examinaremos la mayor o menor incidencia de diversas variables contextuales (independientes) sobre la educación de la población examinada de 12 a 19 años de edad.

El logro educativo, aún en los casos en que el individuo no ha concluido un determinado nivel educativo, es utilizado en la presente investigación como la evidencia de un equivalente al ingreso potencial de un estudiante o una persona. Es a base de este equivalente que un individuo es susceptible de ser calificado para, a futuro, integrarse como miembro de uno u otro estrato de pobreza (no pobre, pobre y pobreza extrema). Dado que por otros estudios sabemos que los individuos mas educados son los que captan los mayores ingresos (ver citas 8 y 9 de los pié de página), de aquí deducimos que aquella parte de la población en edad escolar en situación de pobreza que alcanza logros educativos adecuados (estudian en edad normativa), son los que reúnen las mejores condiciones y/o calificaciones para salir del estado de pobreza en el que se encuentran. Es decir, que las evidencias de su continuidad de haber aprobado estudios en su respectiva edad normativa, es una importante credencial para aspirar su inserción en el estrato de los no pobres. Es decir, se asume que los jóvenes educados tienen la virtud de estar capacitados para alcanzar su propio beneficio personal y contribuir con el desarrollo del país y que en la medida que se amplíe el componente de población educada y se eleve la calidad de la educación, se habrá logrado reducir los actuales niveles de pobreza existentes.

Aunque no es demostrado aquí, por el avance de la investigación "Dinámica de la pobreza y desigualdades en el Perú" () sabemos que hay una permanente movilidad de los individuos tanto para salir como para entrar en uno u otro estrato de pobreza, esto es, desde los pobres hacia los no pobres y viceversa. De allí, también se deduce que dependiendo del esfuerzo individual y de la gama de oportunidades que la sociedad brinda, se producen tales movimientos. Sea por la continuidad del esfuerzo o el aprovechamiento de alguna oportunidad, son las personas mas educadas, con pocas excepciones, las que predominan entre los miembros del estrato no pobre.

Como en otras sociedades, en el Perú ocurre que la pobreza esta asociada a bajos niveles educativos ( ). Por lo tanto, se asume que los individuos más educados son los candidatos más fuertes para integrar el estrato de los no pobres. De manera más generalizada, se puede decir que con cierta independencia del origen familiar, los individuos que cuentan con el atributo de la educación (con secundaria completa o educación superior) son depositarios de otras virtudes y capacidades adicionales. A ellos, la sociedad les concede la oportunidad de ser probados y el privilegio de ser elegibles, entre otros, para permanecer o insertarse en el estrato de lo no pobres y, en muchos casos, ocupar las posiciones de alta jerarquía en las diferentes actividades económicas y desempeños sociales. Aún cuando el fenómeno del círculo vicioso es una realidad, también es cierto que una mayor parte de los pobres integran ese proceso reproductivo de la pobreza, en tanto que otra parte de los mismos serán los encargados de construir la evidencia del círculo virtuoso de la educación. Para estos últimos, gracias al factor educativo, la herencia de la pobreza no sería lo suficiente pesada como para condenarlos a permanecer en dicho estado.

Por supuesto que la compleja realidad señala que son diversos los elementos los que determinan el nivel educativo de las personas y su respectiva habilidad para insertarse en el estrato de los no pobres. Sin duda, la presente investigación asume que gran parte de dicha realidad ha sido recogida por las encuestas ENAHO. Por lo tanto, aquí son utilizados, con sus respectivas restricciones en cuanto a elementos y temporalidades, las variables y datos que nos proporciona la ENAHO 1998 II, en particular las que contribuyen a sustentar y describir el proceso de la circularidad de la pobreza entre padres e hijos y las que se constituyen en condicionantes contextuales para permanecer en dicho estado.