Analfabetismo y escolaridad

     Al igual que lo registrado en el Censo de 1981, en la actualidad la tasa 
de analfabetismo de la  poblaci¢n  nacional es tambi‚n cuatro veces menor en 
las personas con NBS que la correspondiente a aquellas con NBI e inferior en 
cinco veces a la estimada  para la poblaci¢n en miseria (5.2%, 20.5% y 25.0%,
respectivamente). Tal  como  se observa en el Cuadro N§ 15 las diferencias a 
nivel  urbano  y  rural son, asimismo, realmente significa-tivas (6.8% y 30%, 
respectivamente).

     Como  expresi¢n  de  una tendencia hist¢rica, el analfabetismo contin£a 
afectando  considerablemente a los sectores pobres rurales. As¡, mientras la 
poblaci¢n  con  NBS  urbana tiene  una  tasa  de  analfabetismo de 4.1%, las 
correspondientes rurales asumen una tasa de 20.8%, en tanto que las personas 
en pobreza urbana cuentan  con niveles de analfabetismo que resultan casi la 
tercera  parte  de la obtenida para la poblaci¢n con NBI rural (11.2% y 31.3%, 
respectivamente).

     Sin  embargo, es  posible  afirmar  que  en  el  per¡odo  1981-1993  el 
analfabetismo  ha descendido  en el pa¡s, particularmente en los sectores en 
pobreza  y  en miseria.  Tomando  como  referencia  resultados alcanzados en 
estudios sobre la pobreza con informaci¢n Censal de 1981 (PNUD-INP, 1990), a 
nivel nacional  la  tasa  de  analfabetismo  descendi¢ en el per¡odo para la 
poblaci¢n con NBS de 6.9% a 5.2%, en la poblaci¢n con NBI de 27.3% a 20.5% y 
para  el  caso  de  personas  en miseria  de  36.4% a 25.0%. Asimismo, en la 
poblaci¢n urbana con NBI el analfabetismo pr cticamente mantuvo su nivel pues 
s¢lo  descendi¢  de  12.6%  en 1981 a  11.2%  en  1993, en tanto que para la 
poblaci¢n rural con NBI fue de 39.6% en 1981 a 31.3% en 1993. 

     Complementariamente,  se puede  apreciar  los  niveles  de  escolaridad 
alcanzados,  expresados  por la tasa de asistencia escolar correspondiente a 
los grupos de edad de 6 a 12 a¤os y 13 a 19 a¤os, asociados  a los grados de 
educaci¢n primaria y secundaria, respectivamente. En el mismo Cuadro N§ 15 se 
observa  igualmente  importantes  brechas  seg£n niveles  de  vida y  rea de 
residencia.

     Para el total del pa¡s, la escolaridad alcanzada en la poblaci¢n con NBS 
de 6-12 a¤os  es casi generalizada pues se logra una tasa de 99.6%, mientras 
que  para  el grupo con NBI es de 81.3% y entre las personas en miseria s¢lo 
llega  a 75.2%.  Estos  valores  son similares a los obtenidos con datos del 
Censo  1981, donde  alcanzaron  a  un  99.4%, 85%  y  76.7%, respectivamente
(PNUD-INP, 1990).

     La  comparaci¢n  entre  los  niveles  de  escolaridad urbanos y rurales 
se¤alar  resultados  favorables para los primeros en los grupos en pobreza y 
en  miseria  pues  en 1993 la tasa de asistencia escolar de  6-12 a¤os es la 
misma  para  la poblaci¢n  urbana y rural  con  NBS  (99.6%).  Sin  embargo,  
en  el  per¡odo  intercensal,  la  escolaridad  ha  disminu¡do  en  t‚rminos 
relativos para la  poblaci¢n en  reas urbanas en este grupo de  edad con NBI 
(de 92% en 1981 a 83% en 1993),  mientras  que  para  el grupo con NBI rural 
el  nivel  de escolaridad pr cticamente  se   ha   mantenido  (de  79.2%  en  
1981  a  79.4%  en  1993) (PNUD-INP, 1990).

     Las  cifras  muestran objetivamente  que  la  escolaridad  a  nivel  de
educaci¢n primaria guarda proporciones similares para lapoblaci¢n que no est  
en  pobreza  tanto  urbana  como  rural,  pero  que  la  accesibilidad a los 
servicios   educativos   se   va  haciendo  m s  dif¡cil  a  medida  que  la 
pobreza aumenta,  particularmente en lo que respecta a las  reas rurales del 
pa¡s.

TASA DE ANALFABETISMO Y DE ASISTENCIA ESCOLAR EN LA POBLACION CON
NECESIDADES 
BASICAS SATISFECHAS, INSATISFECHAS Y EN MISERIA, SEGUN AREAS - 1993     
                    

ÚÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ¿
³   TOTAL Y AREAS   ³     TASA DE     ³       TASA DE ASISTENCIA          ³
³        DE         ³  ANALFABETISMO  ³             ESCOLAR               ³
³    RESIDENCIA     ³     15 A¥OS     ÃÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÂÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ´
³                   ³      Y MAS      ³    6-12 a¤os    ³    3-19 a¤os    ³
ÀÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÁÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÙ 

TOTAL REPUBLICA             13.0                  87.3              62.2
    CON NBS                  5.2                  99.6              69.7
    CON NBI                 20.5                  81.3              56.1
    EN MISERIA              25.0                  75.2              51.9
                                                                                        
   URBANA                    6.8                  90.8              67.6
    CON NBS                  4.1                  99.6              70.7
    CON NBI                 11.2                  83.0              63.2
    EN MISERIA              13.9                  78.0              59.8
                                                                                       
   RURAL                    30.0                  80.8              48.4
    CON NBS                 20.8                  99.6              54.7
    CON NBI                 31.3                  79.4              47.6
    EN MISERIA              32.7                  73.5              46.3
 ÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄÄ
 Fuente: INEI
 Elaboraci¢n: Propia                                                                    


     Una   situaci¢n   m s   preocupante   es  la  que  se  presenta  en  la 
accesibilidad a  los  servicios  de  educaci¢n  secundaria  a  juzgar por lo 
que se  observa  tambi‚n en  el Cuadro N§ 15.  En efecto,  para la poblaci¢n 
entre los 13 y 19  a¤os  de  edad,  la oferta de este servicio es al parecer 
insuficiente, sobre todo  para los residentes rurales,  donde alcanza a s¢lo 
el 48.4% en tanto  que  para  este  grupo a nivel urbano es de 67.6%.  Si se 
distingue la escolaridad para los grupos en pobreza,  la poblaci¢n urbana de  
13 a 19 a¤os  con  NBI  que  asiste  a la escuela es de 63.2% mientras que a 
nivel rural es de s¢lo 47.6%. 

     Al  comparar  estos  datos  recientes  con  los  obtenidos  para  estos 
mismos  grupos con informaci¢n del  Censo 1981, se llega a la conclusi¢n que 
la  educaci¢n  secundaria  es  relativamente  menos atendida ahora que en el 
referido  a¤o  Censal.  As¡  se tiene que la cobertura de estos servicios ha 
disminu¡do  tanto  para  los  grupos  con NBS, NBI y en miseria de un 79.4%, 
64.1%  y  57.0%,  respectivamente,  en  1981,  a  un  69.7%,  56.1% y 51.9%, 
respectivamente, en el a¤o 1993. En este per¡odo se presenta una mayor ca¡da 
en  la  accesibilidad  a  la educaci¢n  secundaria  de  la  poblaci¢n urbana 
en  pobreza  (76.2%  en  1981 a 63.2% en 1993) respecto a la rural (52.5% en 
1981  a  47.6%  en 1993). Inclusive se da el caso que la poblaci¢n urbana en
miseria  alcanza  una mayor escolaridad en 1981 que la poblaci¢n no pobre de 
este mismo  mbito en 1993 (71.2% y 70.7%, respectivamente) (PNUD-INP, 1990).

     Los  departamentos  que en 1993 cuentan simult neamente con las mayores 
tasas  de  analfabetismo y menores tasas de asistencia escolar son Cajamarca, 
Hu nuco,  La Libertad  y  San Mart¡n.  Adicionalmente,  se  comprueba que el 
anafabetismo  contin£a  siendo  un  importante problema en Amazonas, Ancash, 
Apur¡mac, Ayacucho, Huancavelica, Piura y Puno, ya que sus niveles est n por 
encima  del promedio nacional.  Igualmente,  la educaci¢n primaria tiene una 
baja cobertura tambi‚n en los departamentos de Ayacucho, Lambayeque y Loreto, 
en   tanto  que  los  servicios  educativos  correspondientes  al  nivel  de 
educaci¢n  secundaria  asumen  tasas  por  debajo  del  promedio nacional en 
Amazonas,  Loreto,  Madre de Dios, Piura y Tumbes (ver Cuadro N§ 6 del Anexo 
Estad¡stico).