|
6. Ecosistemas Especiales
Las "lomas" constituyen formaciones vegetales de porte corto que se
generan como consecuencia de las neblinas advectivas invernales y de primavera,
provenientes del sur y suroeste y que humedecen los cerros de pendiente suave y las
quebradas orientales hacia el mar, en la costa del Perú y Chile; son definidas también
como biocenosis cercana al mar o biocenosis de vegetación de neblina.
Ecológicamente las lomas pertenecen a la faja altitudinal Montano Bajo de la
Región Subtropical. La vegetación de las lomas podría clasificarse como una
asociación atmosférica, debido a la bruma o mayor humedad relativa del aire, en
comparación con la asociación climática en un clima normal, a la misma temperatura y precipitación.
Al considerar ambas anormalidades cismáticas, quizás la vegetación podría
ser denominada más acertadamente como Asociación de Chaparral Nublado de la
zona de Vida Matorral Desértico.
Las lomas costeras, son el resultado de una combinación de factores cismáticos
propios de la Costa, condicionados por una geografía peculiar. En términos simples, las
lomas se forman en el punto de contacto de las nubosidades, que cubren la Costa
durante gran parte del año, con las primeras estribaciones de los Andes. En dichos sitios,
por un fenómeno electrostático, la humedad ambiental se condensa y queda
depositada sobre rocas, piedras y en especial sobre la vegetación que actúan como captadores
de neblinas. El volumen de agua captada llega a ser tan importante como para permitir
el desarrollo de una vegetación arbórea muy conspicua que pueden constituir bosques
o sabanas según la altitud y la densídad correspondiente del colchón de nubes.
La formación de las lomas depende, de la nubosidad que cubre permanen-temente
la Costa en invierno y parte de la primavera y ésta, a su vez, es consecuencia del
sistema de corrientes del mar peruano que originan su baja temperatura, los vientos
provenientes del Pacífico y de la presencia de la Cordillera de los Andes que impiden el paso de
los alisios húmedos provenientes del Atlántico y que se descargan en la Selva. La
escasa temperatura del mar provoca un fenómeno de inversión térmica que consiste en que
la masa de aire que cubre la Costa, transportada desde el Océano Pacífico por los
vientos alisios, es mucho más fría de lo que corresponde a la latitud. A una altura de 800
a 900 m.s.n.m., este efecto enfriante termina y la temperatura de la atmósfera
sube bruscamente de 131'C a 241'C. De este modo las nubes no pueden transformarse
en lluvias y tampoco son barridas por los vientos debido a los Andes.
Se conocen en el país 9 lomas correspondientes a la Costa Norte, 23 en la
costa Central y 35 en la Costa Sur. Este ecosistema abarca, según los mapas
ecológicos basados en el sistema Holdridge, un 0,64% del territorio nacional. Las
lomas, actualmente separadas las unas de las otras, probablemente constituyeron en el
pasado una franja casi continua a lo largo de la costa. Su aislamiento ha dado lugar a
un acentuado proceso de especiación que hace difícil escoger muestras representativas
de esta zona de vida natural.
Las lomas más importantes en el Perú, son de Norte a Sur, las de Trujillo, Casma,
Lachay, lguanil (casi desaparecida), Chancay y Chancayllo, Chilca, Pongo o Acarí,
Jahuay, Atiquipa, Arantes, Yuta, Jesús, Yerbabuena, Atico, Camaná, Ilo y Sama.
La cuenca del Lago Titicaca conforma en sí una región, única en el Neotrópico.
La extensa altiplanicie circundante al lago conocida como meseta del Collao, está
cubierta por estepas de gramímeas como iru-ichu (Festuca orthophylla), estepas con
matorrales y algunas asociaciones de bosques montanos de c'colle (Buddíeia coriacea) y
queñuales (Poíyiepis spp.) en las depresiones. La rodean la Cordillera Real al este y la
Cordillera Occidental al oeste. Es una región de clima frío y seco, con una estación seca de
mayo a agosto; sin embargo, debido a la acción termorreguladora de sus aguas,
las temperaturas son más templadas que en las punas subtropícales vecinas de igual altitud.
El Titicaca es el lago navegable más alto del mundo; su extensión es de
aproximadamente 8 mil km2, siendo la profundidad media de 100 m. y la máxima
de 181 m. cerca de la isla Soto. En él se pueden encontrar numerosas islas entre las
que sobresalen: Taquile, Amantani y Ustute. La cuenca tiene como afluentes a los ríos
Coata, Llave, Huancané, Suches y el Ramis, el más largo de todos y como efluente se tiene al
río Desaguadero que va al lago Poopó.
La depresión en la cual se encuentra el lago, al norte de la meseta del Collao, parece
ser de origen tectónico y data del Mioceno, 24 millones de años aproximadamente.
De acuerdo a los depósitos aluviales y lacustres existentes por encima del actual nivel
del lago, pareciera que en aquella era existía un lago (Bailivián) de dimensiones mayores,
el cual disminuyó sensiblemente sus aguas durante el Plioceno y el Pleistoceno, hasta
los niveles actuales del Titicaca y el Poopó. A las orillas del lago se encuentran
piedras calizas del grupo Copacabana con abundantes fósiles que serían parte de la
transgresión marina del Pérmico, hace 280 millones de años.
La flora representativa del lago incluye diversas especies acuáticas entre las que
sobresalen las grandes extensiones de totorales (Schoenoplectus totora) que llegan a formar
islas flotantes, el hinojo llacho (Miriophyllum spp), y otras plantas flotantes como la lenteja
de agua (Lemna sp) o algas de los fondos de las aguas abiertas del lago entre las
que destaca la purina (Chara sp).
Las orillas del lago son el albergue de numerosas aves como las
Parihuanas (Phoenícopterus chílensis), Yanavicos (Plegadis ridgwayí), Huallatas
(Chloephaga melanoptera) y los Zambuilidores del Titicaca (Rollandia micropterum) únicos de
este ecosistema. También habitan aves como el cormorán (Nycticorax nycticorax), el
Totorero (Pheleocryptes melanops), la Choca (Fulica americana) y el Kelle
(Centropelma micropterum). En total son más de 40 las especies de aves asociadas al lago. Los
peces nativos comprenden 23 especies diferentes y endémicas de Carachis o
Chalhuas (Orestías spp.) de los cuales sólo dos son de aguas abiertas o pelágicas (Orestias muellerí,
0. ispi).
Entre otras especies de vertebrados acuáticos propios del lago están el suche
(Pygidium rivulatum), dos especies de bagres (Trychomycterus spp) y la rana del Titicaca
(Telmatobíus celeus), entre otras. También existe un alto grado de especies de caracoles
endémicas al lago, entre ellos Expomastrum mirun, Limnothauma crawfordí,
Brachypyrogulina carrera, o endémicas a la cuenca como Taphius montanus (Planorbiidae). En
los alrededores del lago existe una especie endémica de roedor, el ratón puneño
(Punomys lemminus).
Además de la totora, son recursos importantes de la región los llachos
(Elodea potomogeton) y las chocas o pollas de agua (Fulica americana). Las zonas
adyacentes al lago poseen poblaciones importantes de algunas especies silvestres como la
vicuña (Vicugna vicugna), taruca (Hippocamelus antisensís), vizcacha (Lagidium
peruvianum), y chinchilla (Chinchilla brevicaudata).
La introducción de dos especies de peces, la trucha y el pejerrey, han causado la
sensible disminución de las numerosas especies de carachis, (Orestias spp), peces
endémicos de este ecosistema como ya lo hemos mencionado.
La contaminación del lago por desechos urbanos y del puerto constituyen también
un problema importante del entorno. El lago tiene una gran influencia en las
actividades agropecuarias de las poblaciones humanas asentadas en la cuenca, las cuales
son mayoritariamente Aymaras, con algunos subgrupos como los Uros. Su
principal actividad desarrollada por ellos es la ganadería.
En el lago, las actividades están relacionadas con el uso de los recursos
hidrobiológicos, las aves acuáticas y los totorales; estos últimos son utilizados como alimentos para
el ganado, fertilizantes, artesanías, construcción de botes, techos, etc.
Los bosques montanos ocupan un lugar importante en la biogeografía del
Perú, son conocidos como bosques de neblina, y ceja de montaña. Mucho del
carácter único de la flora y fauna peruana está concentrado en las vertientes orientales
y occidentales de la cordillera de los Andes.
Estos bosques son de extrema importancia por su diversidad, que es única por
los ecosistemas, las especies y el germoplasma que contienen. Muchos
contienen ecosistemas únicos como los bosques de la Cordillera de Los Tarros (Cutervo),
Ampay (Abancay) y Taulis-Udima (La Florida). Constituyen hábitat de especies raras de
mamíferos (Oso de anteojos, pudú, mono choro cola amarilla). Contienen especies
silvestres parientes de especies domesticadas, especialmente Solanáceas (Brugmansia,
Nicotiana, Solanum), Caricáceas (Carica) Lauráceas (Persea), Rosáceas (Fragaría, Rubus),
Fabáceas (Phaseolus), Oxalidáceas (Oxalis), Cucurbitáceas (Cucurbita, Cyclanthera),
Apiáceas (Arracachia), Aráceas (Xanthosoma). Contienen el 78% de los recursos
hidroenergéticos del país, especialmente en las vertientes orientales andinas. Son importantes para la
protección de cuencas altas de los ríos, aspecto que es crucial para los ríos de la
zona norte donde el agua es de trascendental importancia para la agricultura y el uso urbano.
Para la seguridad de los pobladores, su importancia radica en su utilidad para
la conservación de la infraestructura vial y el agua, y para el control de los
desastres naturales en forma de aluviones.
Su importancia económica directa o indirecta no ha sido calculada en su magnitud.
Así tenemos que la agricultura de la costa norte (Piura, Lambayeque, La Libertad)y de
muchos valles interandinos (Jaén, Bagua) dependen del agua proveniente de estos bosques.
La industria maderera depende de especies propias de los bosques montanos
como Podocarpus (ulcumano, diablo fuerte, intimpa), Jugíans (nogal), constituyéndose
en fuentes de energía en forma de leña para los pobladores rurales.
Son amplias áreas de depósitos fluviales, alimentados principalmente
por inundaciones fuertes de grandes ríos de la selva amazóníca. La más conocida es
la ubicada entre los ríos Marañón y Ucayali, conocida como "depresión Ucumumara",
la que tiene una gran variedad de flora y fauna, muy peculiar y no conocida en
otros ecosistemas; permanece gran parte del año inundada. Existen otras pequeñas en
las cercanías del río Ucayali. Todas ellas son parte del concepto de humedales, del
Convenio Internacional RAMSAR.
Como parte del ecosistema de pantanos, se encuentra los "aguajales', que
son ecosístemas hidromórficos, se desarrollan sobre terrenos de topografía plana
a ligeramente depresíonadas, alimentadas por desbordes de pequeños ríos, de
drenaje pobre. Constituyen formaciones de asociaciones homogéneas de palmeras
llamadas "aguajes"(Maurítia flexuoso). Existen dos tipos de aguajales, unos densos
con predominancia de aguaje, y otros en asociación con otras especies vegetales
resistentes a los excesos de agua.
Otro tipo de ecosistemas hídromórficos ubicados en las partes alto andinas del
sur del país, donde existen diferentes tipos de pastos naturales muy suculentos, que
sirven de alimentos a algunos camélidos sudamericanos tales como la alpaca. Este
animal domesticado tiene un lugar importante en la economía de la zona, por la calidad de
la fibra de lana de esta fauna. Sin embargo, estos ecosistemas se encuentran en
peligro de desaparecer, por la posibilidad de implementar proyectos de irrigaciones en las
partes altas de la costa.
Zonas hidromórficas, ubicadas en la región costera, que son producto de la
afloración de agua proveniente de la napa freática del agua de los ríos costeros. Por
su cercanía al mar, la mayoría de ellas son salobres, es decir tienen algún grado de salinidad.
Muchas de ellas hospedan aves migratorias y vegetación como totora, juncos, y
plantas flotantes como el "repollito de agua".
Las lagunas costeras se encuentran rodeadas por los gramadales, comunidad
herbácea halófila que tolera una fuerte salinidad al medio físico, conformado por grama
salada (Distichlis spicata, Sporobolus virginicus).
A algunas de ellas les denominan también "bañados", debido a sus condiciones
de poca profundidad y amplia extensión, como los "Bañados de Puerto Viejo" en Cañete.
Son importantes porque son lugar de descanso y anidación de aves migratorias.
Su dinámica, así como su estructura poblacional está poco estudiada. Las
mayores investigaciones se centran en la flora acuática y en grupos de fauna de vertebrados.
|