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2.2.3 ENCUESTA NACIONAL DE HOGARES
EMPLEO URBANO
INTRODUCCION
La Encuesta Nacional de Hogares constituye una fuente de
informacin de gran importancia para el conocimiento de la
realidad del pas en sus diferentes aspectos, como son la
educacin, el empleo, los niveles de ingreso de la poblacin, el
tipo y la calidad de la vivienda entre otros.
Su utilidad no slo radica en el hecho de servir de fuente de
datos para la realizacin de diversas investigaciones
socio-econmicas, sino en que, el adecuado conocimiento y manejo
de las diferentes variables contenidas en la encuesta, orientan y
hacen posible el diseo de polticas y estrategias destinadas a
elaborar programas sociales, con la finalidad de superar la
situacin de pobreza en que se encuentra un amplio sector de la
poblacin nacional.
Es por ello que el equipo de investigadores de la Direccin de
Demografa y Estudios Sociales viene analizando la informacin
producida por la Encuesta Nacional de Hogares. El presente
documento tiene por objetivo mostrar cmo estn siendo explotados
estos datos, en funcin del mejor conocimiento de los indicadores
de pobreza en nuestra sociedad, y poner toda esta informacin
sistematizada, al servicio de las diferentes instituciones
pblicas y privadas, encargadas de desarrollar polticas y
programas orientados a superar las graves dificultades por las que
atraviesa un amplio sector de nuestra poblacin.
Seguidamente se presentan algunos resultados, producto de los
estudios realizados, respecto de las variables ingreso, empleo,
educacin, salud y programas sociales que muestran cmo a partir
de ellas, se va conceptualizando la pobreza en el pas y cmo a
su vez ellas, posibilitan la formulacin de programas de accin
social.
La fuente de informacin es la Encuesta Nacional de Hogares,
realizada en 1995 por el INEI a 60,000 hogares del rea urbana del
pas.
EMPLEO URBANO
Econ. Mario Cerna*
Econ. Martin de los Heros**
El anlisis del empleo, se ha centrado en la Poblacin
Econmicamente Activa (PEA) Urbana de 14 y mas aos y en forma
marginal, se dedica un capitulo al examen de la PEA de 6 a 17
aos. El estudio se divide en cuatro grandes bloques de anlisis:
. Composicin de la PEA urbana
. Caracterizacin de los Ocupados
. Situacin del empleo Asalariado e Independiente
. Desempleo y los Sectores mas afectados con el problema de la
desocupacin como son las mujeres y los jvenes
. Caractersticas bsicas del Empleo Urbano en los Nios y
Adolescentes.
Las Encuestas de Hogares permiten estimar para 1995 que la PEA
Urbana de 14 y mas aos estaba compuesta por 6 millones 370 mil
personas. De este total, 5 millones 832 mil estn ocupados y 538
mil desempleados. Lo que significa una Tasa de Ocupacin Urbana de
91,6% y de Desempleo Urbano de 8,4%. Entre los hombres, el 93,3%
estaban Ocupados y 6,7% Desocupados. En cambio entre las mujeres,
89,0% estaban Ocupadas y 11,0% Desocupadas.
Segn sexo, esta PEA estaba compuesta por 3 millones 783 mil
hombres y 2 millones 587 mil mujeres.
Distribuida por edades es relevante sealar, que casi la mitad de
la PEA Urbana tena entre 25 y 44 aos (51,5%) y en un 23,9%
estaba compuesta por jvenes de 14 a 24 aos. Asimismo, segn
nivel educativo, el 23,9% tena como mximo la Educacin Primaria
y 43,5% la Educacin Secundaria.
Dividida por Ambitos Geogrficos, Lima Metropolitana concentra el
46,4% de la PEA Urbana a nivel nacional y la Costa Norte un
importante 15,8%.
La PEA Urbana se caracteriza por estar dedicada a Actividades
Econmicas Terciarias. Es as que el Comercio y los Servicios son
las Ramas de Actividad que concentran el mayor porcentaje de la
PEA Urbana (50,7%).
Segmentada por Categora Ocupacional se distingue que, el empleo
asalariado predomina en el rea urbana del pas. Mas de la mitad
de la PEA Urbana (3 millones 217 mil personas) son Empleados
(28,5%) y Obreros (22,,0%). Los independientes son el 34,0%, los
Trabajadores Familiares No Remunerados el 5,3% y los Trabajadores
del Hogar el 4,4%.
En 19 ocupaciones se concentra el 68.1% de los Ocupados, siendo
las ms importantes Comerciante al por Menor (12,4%), Ambulantes
(11,5%), Personal Domstico (6,2%) y Profesores (6,0%). Entre los
hombres existe mayor diversidad de ocupaciones, destacando las de
Choferes, Ambulantes, Comerciantes Minoristas y Albailes (que en
forma agregada dan ocupacin al 29,7% de la PEA masculina
Ocupada). En cambio entre las mujeres, son tres las ocupaciones
que dan empleo a mas de la mitad de la PEA Urbana femenina,
Comerciantes al Por Menor, Ambulantes y Personal Domstico (las
cuales en conjunto ocupan al 51,8% de las mujeres).
En conjunto, un quinto de la PEA ocupada urbana tiene como
profesin u oficio, Profesores (4,9%), Choferes y Taxistas (3,1%),
Agricultores (2,4%), Albailes (3,4%), Arquitectos, Ingenieros y
profesiones afines (2,2%), Contadores (1,4%), Secretarias (1,4%),
Costureras (1,3%) y Administradores de Empresas (1,1%).
Si se analiza las ocupaciones en funcin de los grupos de edad, un
tercio de los jvenes de 14 a 24 aos realizan labores
de Comerciante al por menor, Trabajador Domstico y Ambulante.
Entre los 25 y 54 aos, alrededor de un 30,0% son Comerciantes
Minoristas, Ambulantes y Profesores. Entre los 55 y mas aos, mas
de un tercio son Comerciantes Minoristas, Ambulantes y Choferes.
El 67,7% de los ocupados en el Per Urbano han realizado como
mximo la Educacin Secundaria (entre ellos 42,9% cuentan con
Estudios Secundarios realizados) y solo 32,3% Educacin Superior
(de los cuales un 16,8% han realizado Estudios Superiores
Universitarios).
Dos tercios de la PEA Urbana esta ocupada en establecimientos de
la Micro y Pequea Empresa con no mas de 10 personas. El 59,1% de
los ocupados realiza sus actividades en establecimientos de la
Micro-empresa con menos de cinco personas y 6,9% en
establecimientos con cinco a diez personas.
Gran porcentaje de la PEA Ocupada Urbana no esta afiliada a la
Seguridad Social. Existe un 74,0% de esta PEA que no esta
asegurada y solamente 26,0% esta afiliada a la Seguridad social.
De los asegurados, dos tercios son hombres y un tercio mujeres.
Asimismo, el 95,8% de los asegurados son mayores de 25 aos. Entre
estos, el 71,0% cuentan como mnimo con educacin secundaria.
Solamente 6,9% de los Ocupados Urbanos tiene una Actividad
Secundaria, el 93,1% se dedica solamente a su Actividad Principal.
Por sexo, entre los hombres, los que tienen actividad secundaria
son el 7,2% y entre las mujeres, del 6,4%.
La PEA Ocupada Urbana dedica 47,2 horas semanales como promedio
para el desarrollo conjunto de su Actividad Principal y su
Actividad Secundaria . El Promedio de tiempo dedicado a desarrollo
de la Actividad Principal es de 45.6 horas semanales, siendo de
49.1 horas para los hombres y de 40.3 horas para las mujeres. En
cambio, el promedio semanal de PEA Ocupada que cuenta con
Actividad Secundaria, es de 18.0 horas para el desarrollo de las
actividades de esta tipo.
El empleo dependiente predomina en el rea urbana del pas. El
54,2% de los ocupados recibe ingresos producto de un trabajo
dependiente, ya sea como Empleado (28,3%), Obrero (21,4%) o
Trabajador del Hogar (4,5%).
Entre los Asalariados un 70,9% son hombres y 29,1% mujeres. Segn
el tipo de contratacin laboral el 35,2% tiene un contrato de
plazo indeterminado o de carcter indefinido, 30,8% tiene contrato
a plazo determinado u obra terminada y existe un 32,5% que no ha
formalizado su relacin laboral mediante un contrato.
Entre los Independientes se presenta una mayor participacin
femenina que entre los Asalariados (Un 55,1% son de sexo masculino
y 44,9% de sexo femenino). Asimismo en los Independientes existe
un porcentaje significativo que usa su vivienda de residencia como
lugar de trabajo (30,7%). Tambin son relevantes, los que se
desplazan como Ambulantes de casa en casa (16,4%), los que
desarrollan su trabajo en la casa de sus clientes (11,9%), los que
utilizan como lugar de trabajo un puesto improvisado o semi-fijo
(9,3%), los que tienen un Centro de Trabajo, Local Comercial o
Taller (8,8%) y los que utilizan un Vehculo para Transporte como
lugar de trabajo (7,4%). Por otro lado, es significativa la
cantidad de Independientes que dedican 49 a mas horas semanales a
realizar sus labores (43,3%).
Mas de la mitad de PEA Desempleada en 1995, eran mujeres (53,1%).
El 49,4% son jvenes de 14 a 24 aos. Y asimismo un 29,0% lo
constituyen aquellas personas que buscan trabajo por primera vez
(de los cuales cerca de dos tercios son jvenes de 14 a 24 aos).
Esta situacin nos indica que los sectores mas afectados por el
desempleo sean las mujeres y los jvenes. La magnitud del
problema del desempleo en estos segmentos de la poblacin, se
percibe si comparamos la Tasa de Desempleo urbano de 8,4%, con la
Tasa de Desempleo Femenino, de 11,0% y con la Tasa de Desempleo en
los jvenes, de 17,4% y mas aun, si se la relaciona con la Tasa de
Desempleo en las mujeres jvenes, de 20,0%.
El Desempleo Femenino se caracteriza por tener un alto contenido
de poblacin joven, pues en 46,7% estaba integrado por grupos de
14 a 24 aos y en 44,2% por mujeres de 25 a 44 aos. El 60,5% de
las mujeres desempleadas haban alcanzado como mximo el grado de
instruccin secundaria. Por otro lado, el 47,2% de las mujeres
desempleadas provienen de hogares con 3 a 5 miembros y 37,0% de
hogares con 6 a 8 miembros.
La Poblacin de jvenes desempleados de 14 a 24 aos, representan
la mitad de los desempleados del rea urbana del pas. Esta
poblacin en 50,2% esta conformada por personas del sexo femenino
y en 49,8% del sexo masculino. Entre sus caractersticas mas
destacables estn su nivel de instruccin alcanzado, se observa
que el 61,3% tienen estudios secundarios, asimismo su
localizacin, en 55,1% se presenta en zonas urbanas del interior
del pas y en 44,9% en Lima Metropolitana y su tipo, 58,2% es de
tipo Cesante y 41,8% de tipo Aspirante.
Segn resultados de la ENAHO correspondiente al IV trimestre de
1995, los nios y adolescentes que trabajan en el rea urbana del
pas, es de 389 mil, de los cuales, 36 mil tienen entre 6 a 11
aos y 353 mil entre 12 a 17 aos.
Del total de la Poblacin Urbana de 6 a 17 aos, 7,8% se encuentra
en el Mercado de Trabajo. Dentro de estos, 2,6% solo trabaja y
5,2% comparten sus estudios con el trabajo. Asimismo, por cada 10
nios y adolescentes que estn ocupados, 9 tienen entre 12 y 17
aos. Un 30.0% son obreros, 29,5% trabajadores familiares no
remunerados y 14,6% trabajadores del hogar.
* Economista , Asesor de la Jefatura del INEI. Lima
** Economista , Investigador de la Direccin de Demografa y
Estudios Sociales.
NIVELES DE INGRESO EN EL PERU URBANO
Econ. Javier Vsquez Chihun*
La divergencia en el crecimiento y el nivel de ingreso percpita
entre los pases ms ricos y ms pobres es la caracterstica
dominante de la economa moderna.
El cambio tecnolgico especialmente en la microelectrnica
(informtica y telemtica) y los avances en el campo de la
biogentica, acentuaran las disparidades de productividad entre
los pases desarrollados y los Latinoamericanos, si estos ltimos
no se adecuan o incorporan con mayor rpidez a las recientes
innovaciones tecnolgicas y mejoran de ese modo sus niveles de
produccin e ingresos.
El estudio de la distribucin de los ingresos no slo debe
preocuparse de conocer los factores que explican las diferencias
de ingreso entre los diversos grupos poblaciones de un pas. Sino
tambin y ms importante aun de las posibilidades que tienen los
pases de poder articularse a un mundo que se configura en bloques
econmicos y tiende cada vez ms a globalizarse , a fin de obtener
mayores niveles de produccin y una distribucin mas equitativa.
de los ingresos.
En el Per urbano se observa una asociacin positiva entre el
nivel educativo del jefe de hogar y los ingresos que reciben las
familias, conforme aumenta el nivel de educacin del jefe se
incrementa tambin el ingreso medio del hogar. Esta misma relacin
se presenta cuando consideramos los ingresos percpita en lugar de
los ingresos medios.
Los niveles de ingreso aumentan con el numero de perceptores en el
hogar, tanto en ingresos medios como percpita.
Existe diferenciales de ingreso segn el gnero del jefe, los
hogares con jefe de familia hombre reciben mejores ingresos medios
que los hogares dirigidos por una mujer, especialmente en la
Sierra. No obstante estas diferencias resultan a favor de la
mujer, en los mbitos geogrficos ms urbanizados del Per (Lima
Metropolitana y la Costa Centro) cuando se considera el ingreso
percpita.
Las familias con mayor nmero de miembros reciben mejores niveles
de ingreso medio, pero si consideramos el ingreso por persona esta
relacin se revierte, es decir, los hogares pequeos (con menos de
tres miembros) reciben los ingresos por persona ms altos del rea
urbana, en tanto, que los hogares numerosos conformados por ms de
nueve miembros obtienen los ingresos percpita ms bajos.
El trabajo es la principal fuente de obtencin de ingresos de las
familias, por tanto debe observarse con mayor detenimiento este
mercado para explicar las diferencias en los ingresos.
Las variables asociadas al mercado de trabajo presentan las
siguientes caractersticas: a) Las familias con jefe de hogar
patrono y empleado altamente calificado obtienen los ms elevados
niveles de ingreso medio y percpita. b) Los hogares cuyo jefe
labora en la actividad financiera e inmobiliaria reciben mejores
niveles de ingreso que las familias con jefe ubicados en otras
actividades econmicas. c) Los jefes que trabajan como gerentes
de empresa y funcionarios con altos cargos pblicos tienen hogares
que reciben mejores ingresos que las familias con jefe obrero,
agricultor o trabajador no calificado.
La mayor parte de la fuerza de trabajo ocupada en el rea urbana
se encuentra en el sector terciario de la economa, especialmente
en la actividad comercial.
El sector secundario le sigue en importancia, como demandante de
fuerza de trabajo, destacando la actividad manufacturera.
Finalmente, es de sealar que a pesar de la racionalidad
econmica que muestran los hogares de menores ingresos al reducir
su tamao familiar, ello no resulta suficiente para adecuar sus
bajos ingresos a la satisfaccin de sus necesidades y tampoco
para disminuir las diferenciales de ingreso existentes en el Per
urbano.
* Economista, Investigador del INEI - ENEI. Lima.
EDUCACION
Genara Rivera Araujo*
La presente exposicin tiene por objetivo mostrar los resultados
de la Encuesta Nacional de Hogares - Cuarto Trimestre de 1995, en
lo referente a las principales variables educativas, como son:
nivel de educacin, asistencia escolar y analfabetismo. Asimismo,
se presenta el perfil socioeconmico de los hogares de los
estudiantes de los diferentes niveles educativos.
1. El nivel de educacin de la poblacin peruana ha experimentado
una mejora en los ltimos dos aos. Esto se evidencia porque ha
crecido la proporcin de personas que cuentan con algn ao de
educacin secundaria y superior, de 55.9% subi a 60,6%.
2. La asistencia escolar de los nios de 6 a 11 aos, es de 95 de
cada 100 personas y entre los jvenes de 12 a 16, se observa
que 88 de cada 100 de ellos asisten a un centro educativo. Es
decir, que la escolarizacin es bastante alta entre la
poblacin que corresponde a las edades normativas para primaria
y secundaria.
3. El analfabetismo, problema importante de la realidad
educativa del pas, muestra una tendencia declinante; la tasa
de analfabetismo actual es de alrededor de 11 personas
analfabetas por cada 100 personas de 15 y ms aos de edad.
4. Los datos indican que el analfabetismo contina siendo un
problema que afecta mayormente a las mujeres, principalmente
aquellas que residen en el rea rural. La tasa de
analfabetismo femenino es 15,5%, en tanto que el analfabetismo
masculino es 5,1%.
5. Una rpida caracterizacin de las condiciones en que vive
la poblacin analfabeta muestra que el 65,0% de los hogares de
este grupo poblacional, tienen al menos una Necesidad Bsica
Insatisfecha (NBI), el 53,6% cuentan con un ingreso per cpita
inferior a S/.100.00 nuevos soles, el 62,1% no disponen de
ningn servicio bsico en sus hogares y el 52,1% son
jefaturados por personas que tambin son analfabetas.
6. La ENAHO 1995, 4to. Trimestre encontr que el 23,5% de la
poblacin menor de 6 aos estaba asistiendo a los diferentes
centros y programas educativos de Educacin Inicial tales como,
cunas o guarderas, wawa-wasi, PRONOEI, jardines y otros.
7. Las caractersticas ms notorias de los hogares de este tipo
de estudiantes es que el 57,9% tienen alguna NBI, el 38,9% no
disponen de ningn servicio bsico en sus hogares, el 47,3%
disponen de un ingreso per cpita inferior a S/. 100.00,. el
93,0% de los jefes de hogar son alfabetos y el 57,6% de ellos
han estudiado al menos un ao de educacin secundaria y
superior.
8. En cuanto a los Estudiantes de Primaria, los resultados de la
encuesta sealan que el 97,0% de los nios que asisten a este
nivel tienen entre 6 y 14 aos de edad. Se encuentra adems
que el 9,6% de este grupo de estudiantes trabajan, es decir
forman parte de la PEA ocupada.
9. Respecto a las caractersticas de sus hogares, el 66,3% de
ellos tienen alguna NBI, el 37,0% no dispone de ningn servicio
bsico y el 48,7% tienen un ingreso per cpita inferior a los
S/. 100.00 nuevos soles. El 90,1% de sus hogares son
jefaturados por personas alfabetas y el 45,6% de ellos han
estudiado algn ao de educacin secundaria y superior.
10.Acerca de los Estudiantes de Secundaria, la encuesta seal que
el 89,3% de ellos tienen entre 11 y 17 aos de edad y que el
15,5% trabajan. En cuanto a las caractersticas mas destacadas
de sus hogares, el 37,8% tiene al menos una NBI, el 39,8%
dispone de los tres servicios bsicos del hogar , el 19,2% no
dispone de ninguno y el 67,6% cuenta con un ingreso per cpita
inferior a S/.200.00 nuevos soles. En cuanto a los jefes de
hogar, el 92,9% son alfabetos y el 56,5% de ellos han estudiado
algn ao de educacin secundaria y superior.
11.Sobre los Estudiantes de Institutos Superiores se puede
indicar que el 75,6% tiene entre 18 y 24 aos de edad y que el
35,3% de ellos trabaja. Respecto a sus hogares, el 79,0%
tienen satisfechas sus necesidades bsicas, el 66,7% disponen
de los tres servicios bsicos, el 10,0% no dispone de ninguno
de ellos y el 48,5% cuenta con menos de S/.200.00 como ingreso
per cpita. Los jefes de hogar de este grupo de estudiantes, en
el 95,9% de los casos son alfabetos y el 62,4% han estudiado
algn ao de educacin secundaria y superior.
12.En cuanto a los Estudiantes Universitarios, la encuesta permite
concluir que este tipo de estudiantes viven en mejores
condiciones que los de otros niveles educativos. El 75,8% de
ellos tienen entre 16 y 24 aos de edad y el 31,0% trabajan. El
86,2% de sus hogares tienen satisfechas sus necesidades
bsicas, el 82,0% disponen de los tres servicios bsicos y slo
el 4,0% no tiene ningn servicio bsico. El 44,9% de los
hogares de este grupo de estudiantes, cuenta con ingresos
superiores a S/.300.00 nuevos soles, El 98,4% de los jefes de
sus hogares son alfabetos y el 78,2% han aprobado algn ao de
educacin secundaria y superior.
* Bachiller en Psicologa, con estudios de post grado en
Demografia. Investigadora de la Direccin Tcnica de Demografa
y Estudios Sociales. INEI. Lima.
SALUD
Lic. Cirila Gutirrez Espino*
I. POBLACION CON ALGUN SINTOMA DE ENFERMEDAD O ACCIDENTE
El presente estudio trata sobre el estado de salud de la
poblacin peruana. Investigacin que ha utilizado los
resultados de la Encuesta Nacional de Hogares, aplicada por el
Instituto Nacional de Estadstica e Informtica (INEI) en el
cuarto trimestre de 1995. Se seleccionaron a todos aquellos
encuestados que respondieron haber presentado algn sntoma de
enfermedad o accidente, en los 15 das previos a la Encuesta,
con los resultados obtenidos se caracteriz a la poblacin de
acuerdo a las variables demogrficas, sociales y econmicas,
con la finalidad de contribuir al conocimiento sobre la
incidencia de los sntomas de enfermedad o accidente.
Del total de entrevistados, el 29,4% declar haber presentado
algn sntoma de enfermedad o accidente dentro de los 15 das
previos a la Encuesta. El 93,6% de la poblacin afectada
correspondi a sntomas de enfermedad, mientras que el 6,4%
expres haber padecido algn accidente.
La incidencia y la prevalencia de enfermedades no son las
mismas ni tienen el mismo orden de magnitud al ser comparadas
entre hombres y mujeres. As de cada 100 entrevistados con
sntoma de enfermedad o accidente 55 son mujeres y 45 hombres,
es decir, las mujeres se enferman en un 20% ms que los
hombres.
La incidencia de los sntomas de enfermedad o accidente vara
segn grupos de edad. As, mientras la tercera parte de la
poblacin menor de 15 aos manifest haber padecido algn
sntoma de enfermedad o accidente, la cuarta parte de la
poblacin en edad de trabajar se vio afectada por esta
situacin. En cambio, la poblacin mayor de 65 aos se ubica
como la ms afectada, presentando alrededor del 50% de su
poblacin algn sntoma de enfermedad o accidente.
Del total de personas entrevistadas que manifestaron haber
sentido algn sntoma de enfermedad o accidente, el 49,6%
residen en viviendas cuyos hogares presentan al menos una
necesidad bsica insatisfecha, mientras que el 50,4% residen
en viviendas cuyos hogares tienen sus necesidades bsicas
satisfechas.
Existe una relacin inversa entre el nivel educativo y la
incidencia de los sntomas de enfermedad o accidente. Mientras
ms altos son los niveles educativos, menores son las
probabilidades de presentar sntoma de enfermedad o accidente.
Asimismo, se presenta mayor incidencia de los sntomas de
enfermedad o accidente en la poblacin de bajos recursos
econmicos. El 49,5% de la poblacin pertenecen a hogares con
bajos ingresos.
Del total de la poblacin afectada con sntomas de enfermedad,
el 52,8% lo fueron del aparato respiratorio, correspondiendo
el 33,0% a afecciones gripales y el 19,8% a tos con dificultad
para respirar. Afecciones que se manifestaron mayoritariamente
en todos los mbitos geogrficos del pas. Las enfermedades
diarricas afectaron en mayor proporcin a la poblacin menor
de 15 aos. As, del total de personas que enfermaron por
este mal, el 82,9% correspondi a los menores de 15 aos y
principalmente a los nios menores de 5 aos. Igualmente, la
poblacin infantil comprendida en el grupo etreo de 0 a 5
aos, en un 54.4 % de ella estuvo afectada con la enfermedad
respiratoria aguda.
En cambio, en la poblacin entre 15 a 64 aos, es decir en
edad de desempear una actividad econmica, fueron ms
frecuentes los accidentes, las enfermedades renales, y se
manifestaron las dolencias: como los dolores de cabeza,
dentales, del estmago y musculares.
En la poblacin de 65 y ms aos de edad, los sntomas o
accidentes ms frecuentes son las llamadas de la "tercera
edad", siendo los ms comunes: las enfermedades renales, de la
piel, dolencias musculares y de cabeza, fracturas y
traumatismos.
La poblacin econmicamente activa (PEA), se vio afectada por
algn sntoma de enfermedad o accidente en un 25,4%. De este
total, los ms afectados fueron los trabajadores
independientes con el 42,9%, seguidos de los obrero con 16,9%,
empleados con el 15,9% y los trabajadores familiares no
remunerados con el 14,7%.
Aproximadamente las tres cuartas partes, es decir el 73,5% de
la poblacin afectada con algn sntoma de enfermedad o
accidente, estuvo con alguna dolencia ms de 4 das, mientras
en el 26,5% de la poblacin afectada los sntomas duraron
entre 1 a 3 das.
Del total de la poblacin afectada con algn sntoma de
enfermedad o accidente, el 41,8% realizaron consulta y el
58,2% no lo hizo.
La poblacin con mayor nivel educativo, afectada con algn
sntoma de enfermedad o accidente es la que consulta en mayor
proporcin. As, el 54,4% de los que tenan educacin
superior hicieron alguna consulta, mientras que los afectados
sin nivel de educacin solamente 39,9% lo hicieron.
La decisin de consultar de la poblacin con sntoma de
enfermedad o accidente sta afectado por el nivel de ingreso
de los hogares. As, la poblacin con bajos ingresos,
consultaron slo en un 29,4% mientras que la poblacin
afectada con altos ingresos lo hizo en un 55,9%. Es necesario
aclarar, que del total de la poblacin afectada por algn
sntoma de enfermedad o accidente, los estratos ms bajos
concentra alrededor del 50% .
El profesional de salud ms consultado por la poblacin
enferma o accidentada es el mdico. Sin embargo, existen
diferencias en la demanda de este profesional, de acuerdo al
nivel de ingreso de los hogares y al nivel educativo del
paciente, siendo requerido en mayor proporcin por la
poblacin de ingresos altos y por los que tienen educacin
superior.
Otros profesionales de salud, demandados por la poblacin
afectada son: la enfermera, el farmacutico y el sanitario.
Estos profesionales son requeridos principalmente por la
poblacin de bajos ingresos.
El 38,9% de las consultas de la poblacin afectada se
realizaron en un establecimiento del Ministerio de Salud
(Hospital y Centro-Puesto de salud), el 17,7% se efectuaron en
la farmacia o botica, 16,6% en un Hospital del Instituto
Peruano de Seguridad Social y el 10,0% en un Consultorio o
Clnica Particular .
Ms del 50% de la poblacin afectada sin nivel de educacin
acudi a un establecimiento del Ministerio de Salud, en
cambio, el 30,0% de la poblacin afectada con educacin
superior se atendi en un Hospital del Instituto Peruano de
Seguridad Social.
El 75,4% de la poblacin afectada por algn sntoma de
enfermedad o accidente que realiz consulta compraron las
medicinas recetadas, 20,5% lo adquiri de donacin, el 2,2% no
pudo comprarlas y al 1,9% no le haban recetado.
El 58,2% de la poblacin afectada con algn sntoma de
enfermedad o accidente no consultaron, encontrndose la mayor
proporcin en el rea rural del pas.
En el rea rural del pas, el 75,7% de los nios entre 5 a 14
aos y el 65,8% de las personas mayores de 65 aos que
presentaron algn sntoma de enfermedad o accidente no
realizaron consulta.
En la encuesta, tambin se indag por las razones que tuvo la
poblacin con sntoma de enfermedad o accidente para no
consultar. Los resultados sealaron que el 65,0% manifest no
haber consultado por la falta de recursos econmicos, el 20,7%
no dese consultar, el 6,7% manifest que el lugar de consulta
quedaba lejos, el 3,3% falta de atencin y el 2,3% dijo que no
haba servicios de salud
II. SALUD MATERNA
Para investigar sobre la salud materna, la encuesta entrevist
a las mujeres de 15 a 49 aos que tuvieron su ltimo embarazo
en los 5 aos previos a la encuesta.
El control del embarazo se llev a cabo en un 76,9%,
presentndose disparidades 25. entre reas urbana y rural y
entre los diversos mbitos geogrficos. As, el 94,1% de las
mujeres que declararon estar embarazadas en Lima Metropolitana
fueron atendidas, mientras que en la Sierra Norte sta
atencin descendi al 47,1%.
Se aprecia una relacin directa entre los niveles de educacin
e ingresos con el control del embarazos. Mientras ms altos
son los niveles de educacin e ingresos mayor es la proporcin
atenciones.
En el control de embarazo el mdico es el profesional de la
salud ms consultado. No obstante, existen variaciones por
lugar de residencia y mbitos geogrficos. As, mientras que
en el rea urbana ms de la mitad de las mujeres embarazadas
consultaron con el mdico, en el rea rural sta consulta
descendi a poco menos de la cuarta parte, en cambio en la
Sierra Sur la enfermera fue el profesional ms consultado.
Del total de mujeres que estuvieron embarazadas, el 55,2% se
encontraban desempeando alguna actividad econmica. De este
total, solamente el 13,5% de ellas tenan seguro de salud.
El 33,2% de las parturientas fueron atendidas por un mdico,
concentrndose su atencin en el rea urbana del pas, en la
Costa y en Lima Metropolitana.
Del total de las parturientas el 42,2% fueron atendidas en sus
domicilios. En el rea rural, en la Sierra y en la Selva, el
78,4%, 67,6% y 58,3% de las parturientas fueron atendidas en
sus casas, respectivamente.
III. SALUD INFANTIL
La diarrea afect al 6,7% de los nios menores de 5 aos. Esta
enfermedad fue ms prevalente en el rea rural. En este sector
de cada 100 nios menores de 5 aos 10 se enfermaron de
diarrea.
La incidencia de la diarrea tuvo relacin con el tipo de
abastecimiento de agua de la vivienda de los nios menores de
5 aos. As, se present mayor nmero de casos en los nios
cuyas viviendas se abastecan de agua mediante camin
cisterna, pozo o ro, donde 68 nios de cada 100 nios
presentaron sntomas de esta enfermedad.
Alrededor del 50% de los nios enfermos con diarrea
recibieron atencin mdica. Esta atencin alcanz al 78,5% de
los nios con diarrea del rea urbana, 71,7% de los nios de
la Costa y al 88,2% de Lima Metropolitana. En cambio, en el
rea rural del pas y en la Sierra alrededor de la tercera
parte de los nios con diarrea fueron atendidos por una
enfermera.
El 61,9% de las madres de nios menores de 5 aos reconocieron
como signo de deshidratacin cuando el nmero de deposiciones
por da aumenta y/o cuando el nio vomitaba los alimentos que
ingiere.
* Sociloga Investigadora de la Direccin Tcnica de Demografa
y Estudios Sociales. INEI. Lima.
LOS HOGARES POBRES EN EL PERU: 1995
Econ. Mirlena Villacorta*
En esta exposicin se presenta un resumen de las conclusiones mas
importantes a las que se lleg en el estudio que, sobre la
distribucin del bienestar de los hogares a 1995 se realiz, de
acuerdo con las aproximaciones metodolgicas basadas en la Lnea
de pobreza y el Mtodo Integrado.
La investigacin se llev a cabo, tomando como base la
Encuesta de Niveles de Vida 1995, ENNIV 95-IV. El estudio es
bsicamente de carcter descriptivo, ofrecindose posibles
explicaciones a las principales vinculaciones entre pobreza y
empleo, y entre pobreza y educacin. Los resultados principales
del estudio son:
1. En cuanto a la incidencia, y de acuerdo al Mtodo de Lnea de
Pobreza, la pobreza en el Per afectara a cerca de 11
millones de peruanos. Es decir, el 45,3 % de la poblacin sera
catalogada como pobre bajo esta aproximacin metodolgica.
2. La extrema pobreza alcanzara a cerca de 5 millones de la
poblacin peruana, es decir al 19,3 % de ella.
3. Es la poblacin rural la que presenta la mayor incidencia de
pobreza, afectndose al 59,8 % de ella.
4. En las reas urbanas de mayor desarrollo relativo, sin incluir
Lima Metropolitana, la incidencia de la pobreza es de 44,5 %,
y de 28,3 % slo en Lima Metropolitana.
5. Es en la Sierra Rural y en Lima Metropolitana donde se
localizan principalmente los pobres del Per.
6. En cuanto a la intensidad y severidad de la pobreza, medidas a
partir de la familia de indicadores propuesta por FOSTER-
GREER-THORBECKE (FGT), se obtuvo que la intensidad (FGT1) de la
pobreza fue de 16,6 % y la severidad o desigualdad (FGT2) fue
del orden del 8,2 %.
7. A travs de los ndices FGT se observa que el ncleo de la
pobreza se encuentra en el rea rural; donde la incidencia,
intensidad y severidad de la pobreza es mayor que en las reas
urbanas. Dentro de esta dinmica, en la sierra rural el gasto
promedio de los pobres cubre tan slo el 58 por ciento del
valor de la lnea de pobreza.
8. Bajo el Mtodo Integrado y de acuerdo con la propuesta
metodolgica desarrollada por la CEPAL, la pobreza crnica
afecta al 32 por ciento en el Per. Es decir, 7.5 millones de
peruanos tienen ingresos inferiores a la lnea de pobreza y
presentan una o ms carencias relacionadas con la
infraestructura de la vivienda y el analfabetismo del jefe de
hogar.
Los pobres crnicos se localizan bsicamente en las reas
rurales de nuestro pas. Contrariamente, los pobres recientes
se encuentran en las reas urbanas y representan el 13,3 % de
la poblacin. Los peruanos con carencias inerciales, es decir,
aquellos que teniendo ingresos que superan la lnea de pobreza
presentan una o ms carencias en materia educativa y
habitacional, representan el 21,6 % de los pobres. Finalmente,
la poblacin en condiciones de integracin social, es decir,
aquella cuyos ingresos estn por encima de la lnea de pobreza
y a la vez no presentan carencias, abarca al 33,1 %.
9. La pirmide de edades de la poblacin en pobreza y pobreza
extrema, indica una concentracin de menores de 18 aos. De un
total de 10,6 millones de pobres, cerca de 6 millones son
menores de 18 aos y de 4,6 millones en extrema pobreza casi 3
millones tienen menos de 18 aos.
10. La ENNIV 95-IV indica que del total de hogares en el Per el
83 por ciento se encuentra jefaturado por un varn y que esta
representacin es mayor tratndose de los hogares pobres.
11. La vulnerabilidad de los hogares pobres est asociada a sus
bajos niveles de instruccin y altas tasas de dependencia por
el tamao de sus familias. Pero esta vulnerabilidad es mayor al
evaluarla en una perspectiva de gnero, que considera las
diferencias en los niveles de instruccin y la falta de equidad
en las oportunidades de ascenso econmico y social. As, por
ejemplo, de cada 2 mujeres jefes de hogar pobres extremos, una
es analfabeta y las que no lo son, tienen en promedio dos aos
de escolaridad menos que los varones jefes de hogar pobres
extremos.
12. En cuanto a la concentracin de edades de las jefaturas de
hogar se advierte una vez ms, una pirmide de edades ms joven
tratndose de los hogares pobres en relacin a la de los
hogares no pobres y una proporcin mayor de jefaturas de 50
aos a ms en los hogares no pobres.
13. Al evaluar los niveles de instruccin de los jefes de hogar por
niveles de pobreza, encontramos que la pobreza est asociada a
bajos niveles educativos y ms an, que estos se diferencian
segn el grado de pobreza. As, por ejemplo, a nivel nacional
ms del 50 por ciento de los jefes de hogares pobres cuentan
con slo primaria y tratndose de los pobres extremos el
porcentaje supera el 60 por ciento. Contrariamente lo que
caracteriza a los hogares no pobres, es contar con jefaturas
ms instruidas.
14. En una perspectiva ms amplia basada en el mtodo Integrado,
encontramos que los aos promedio de estudio del jefe de hogar
caracterizan su nivel de pobreza y condicin de integracin.
As, por ejemplo, mientras los pobres crnicos cuentan con casi
5 aos promedio de estudio, los jefes de hogar en condiciones
de integracin tienen cerca de 11 aos promedio de estudio. Muy
prximos a los jefes de hogar en condiciones de integracin se
encuentran los pobres recientes con ms de 7 aos promedio de
estudio.
15. De acuerdo con la ENNIV 95-IV, la Poblacin Econmicamente
Activa en el Per asciende a 10,5 millones de personas. De
ellas slo un 5 por ciento se encuentra desocupada.
16. Del total de la PEA as definida, ms de 4 millones son pobres
y su pobreza est asociada a la desocupacin slo en parte, ya
que la tasa de desocupacin disminuye a medida que aumenta el
grado de pobreza. As tenemos que mientras la tasa de
desempleo de los pobres (5,3 % ) supera a la de los no pobres
(4,2 %), la tasa de desempleo de los pobres extremos es menor
(3,6%) que la de los pobres no extremos (6,3%).
17. Los resultados obtenidos sobre ocupaciones, categora
ocupacional y rama de actividad, nos sealan algunas pistas
sobre la relacin o vinculacin entre pobreza y empleo. En
efecto, la poblacin pobre es aquella bsicamente conformada
por trabajadores independientes que a nivel nacional representa
el 38 por ciento, trabajadores familiares no remunerados con un
27 por ciento y obreros del sector privado con 21 por ciento.
Todos ellos trabajan principalmente en los sectores de
agricultura y comercio.
18. El sector agrcola concentra a cerca del 50 por ciento de la
fuerza laboral pobre y el comercio al 20 por ciento.
19. Resulta evidente asociar la pobreza al tipo de ocupaciones en
las cuales se desempean los pobres. En efecto, del total de
trabajadores independientes, el 40 por ciento son agricultores
y se localizan en las reas rurales de la Sierra, Selva, y
Costa del Per. Un 20 por ciento son vendedores ambulantes con
asentamiento en las reas urbanas del pas.
20. Al interior del rea urbana un contingente importante de
trabajadores independientes en condicin de pobreza lo
conforman los obreros de la construccin, los obreros de
calzado, sastres, choferes y el personal domstico. En el
medio rural, no obstante la concentracin de agricultores, no
es despreciable la proporcin de operarios de las minas y
comerciantes y vendedores ambulantes.
21. Otra caracterstica que refuerza las vinculaciones entre
pobreza y empleo, es el nivel de instruccin de la fuerza
laboral pobre. En efecto, cerca de la mitad de la PEA de 6 aos
y ms tiene solo nivel de primaria y un nivel no despreciable
de ella, cerca del 14 por ciento no ha recibido ninguna
instruccin.
22. La ENNIV 95-4 nos revela como caracterstica fundamental de
los pobres, su vulnerabilidad. Resultante de sus altas tasas de
dependencia y bajas tasas de actividad; lo que en definitiva
determina su menor capacidad para generar ingresos. En efecto,
segn podemos apreciar en el cuadro a nivel nacional, mientras
que la tasa de dependencia por persona ocupada de los hogares
pobres es de 2,4 la de los hogares no pobres es de 1,4. En la
misma direccin, la tasa de actividad o participacin de los
hogares pobres (48,7%) es menor que la de no pobres (59,5%).
23. Un factor explicativo de la menor tasa de actividad de los
pobres podra ser su propia estructura de edades. Como sabemos,
la pirmide de edades de los pobres presenta una
concentracin de nios y jvenes, este hecho limita la
participacin de la madre sobre todo en las edades tempranas de
los nios. Por ello la tasa de participacin de las mujeres
pobres (38,5%) resulta menor que la de las mujeres no pobres
(48,5).
24. Otro factor explicativo de la menor tasa de actividad de los
pobres podra ser el desaliento, sobre todo de los jvenes. Al
percibir sus pocas posibilidades de conseguir empleo, dado su
bajo nivel de instruccin, su falta de experiencia laboral y de
mecanismos de insercin, por tales razones la tasa de desempleo
de los pobres ( 5,3% ) supera a la de los no pobres ( 4,2 % ).
25. En virtud de los hallazgos de la ENNIV 95-IV, podemos concluir
respecto a las relaciones entre pobreza y empleo lo siguiente:
Que los pobres tienen pocas posibilidades de conseguir un
empleo por su bajo nivel de instruccin y baja calificacin,
por tanto se ven obligados a insertarse en el proceso econmico
en actividades de baja productividad o en ocupaciones de baja
remuneracin para garantizar su sobrevivencia.
26. En el Per la disponibilidad de una vivienda adecuada presenta
una distribucin desigual con notables diferencias entre los
distintos grupos sociales pobres y no pobres. Slo un 34 por
ciento de los pobres cuentan con abastecimiento de agua con red
pblica dentro de la vivienda. A nivel nacional slo un 23 por
ciento de los hogares cuenta con servicio de desage por red
pblica dentro de la vivienda y slo un 49 por ciento de
hogares pobres cuentan con alumbrado elctrico.
27. En una perspectiva de gnero se advierte que no existen mayores
diferencias en trminos relativos entre varones y mujeres en
cuanto a los niveles de instruccin de primaria, secundaria y
superior. No sucede as en el caso de la poblacin analfabeta
ya que del total de ella ms del 76 por ciento son mujeres.
Motivo por el cual la falta de equidad de gnero en el plano
educativo sigue siendo un problema para resolver. Ms an
cuando de la mujer depende la supervivencia infantil.
28. As mismo, en una perspectiva de gnero, los datos sealan
diferencias en cuanto a la asistencia escolar. As, por
ejemplo, mientras que en el rea urbana la asistencia de nias
pobres supera a la de nios de 6 a 12 aos, en el rea rural
sucede lo contrario, es decir, son las nias pobres las que no
asisten en mayor proporcin. Esto ltimo es debido a que desde
temprana edad la nia cumple el rol de ayudante de la madre, lo
que en definitiva disminuye sus posibilidades de asistir a la
escuela.
29. Tambin fue posible obtener una evaluacin de la equidad en el
acceso a los servicios de salud a travs de la poblacin que
declar estar enferma. Del 100 por ciento de pobres que se
encontraban enfermos, un 32 por ciento realiz consulta de
salud y slo un 58 por ciento de estos consult con un mdico;
el resto lo hizo fundamentalmente con el farmacutico o
personal paramdico. Al mismo tiempo la razn principal por la
cual los pobres que declararon estar enfermos y no hicieron
consulta de salud fue por falta de recursos econmicos.
30. Los resultados de la ENNIV 95-IV indican que en el pas, de un
total de 2'089,374 hogares beneficiarios, un 53 por ciento son
hogares pobres y un 47 por ciento son no pobres.
31. El rea geogrfica que tiene la mayor proporcin de hogares
pobres beneficiarios es la Sierra Rural y contrariamente el
rea geogrfica que tiene la mayor proporcin de hogares no
pobres beneficiarios es Lima Metropolitana.
32. De otro lado, a nivel nacional de un total de 1'097,598 hogares
pobres beneficiarios, el 61 por ciento de ellos se beneficia de
un programa social, en tanto que el 39 por ciento de hogares
pobres beneficiarios participan de ms de un programa social.
Slo en la Sierra rural, el 51 de los hogares pobres se
benefician de ms de un programa social.
* Economista, Investigadora de la Direccin Tcnica de Demografa
y Estudios Sociales. INEI. Lima.
CARACTERIZACION DE LOS HOGARES QUE ACCESAN A LOS PROGRAMAS
SOCIALES, 1995
Lic. Lupe Berrocal Montoya *
El propsito central de esta exposicin es, por un lado,
dimensionar el nivel de conocimiento y acceso de los hogares a
los programas sociales ejecutados en el pas y, del otro,
analizarlos de acuerdo a las caractersticas sociodemogrficas del
jefe del hogar y a las caractersticas socioeconmicas de los
hogares.
Las variables consideradas para analizar al jefe del hogar son el
sexo y edad, su nivel educativo y la condicin de ocupacin. En el
caso de los hogares, se tuvo en cuenta el nmero de miembros del
hogar, el ingreso mensual familiar del hogar y el ingreso
prcapita.
La fuente utilizada, la Encuesta Nacional de Hogares, ejecutada
por el INEI en 1995, investig acerca de la accesibilidad a 15
programas de apoyo social, los que se pueden clasificar en 5
reas: Alimentacin y Nutricin, Salud, Bienestar Familiar,
Educacin y Servicios de la Vivienda.
En el rea de Alimentacin, se consider el acceso a Desayuno
Escolar, Vaso de Leche, Comedor Popular, Clubes de Madres,
Programa de Alimentacin a Familias en Alto Riesgo (PANFAR) y
Comedor Parroquial. Asimismo, como ayuda alimentaria a los hogares
del pas se consider la Donacin Directa de Alimentos y el Pago
en Alimentos por trabajo.
En el rea de Salud, se investig acerca del conocimiento y uso de
Campaas preventivas de salud referida a las jornadas VAN, as
como a la participacin en Campaas de Planificacin Familiar.
En el rea de Bienestar Familiar, los programas sociales
considerados corresponden al uso de los Wawa-Wasi y de Cunas
Guardera.
En el rea educativa se contempl en esta oportunidad el acceso a
los programas de alfabetizacin.
Finalmente, en el rea de Vivienda, se investig sobre la
proporcin de hogares beneficiados con los servicios de
abastecimiento de agua y alcantarillado as como Programas de
Electrificacin Rural.
1. A nivel global, los resultados de la Encuesta Nacional de
Hogares muestran que, aproximadamente, 61 de cada 100 hogares
del pas se benefician con al menos un programa social. En
trminos absolutos este porcentaje significara que 2 Millones
949 Mil hogares estn accediendo a por lo menos un programa
social.
2. El porcentaje de los hogares no usuarios representa el 35,1% y
solamente un 3,5% de hogares respondi que desconoca la
existencia de programas de apoyo social.
3. Los resultados se muestran a nivel nacional, rea urbana y
rural, y 8 dominios conformados adems de Lima Metropolitana,
por Costa, Sierra y Selva, clasificadas en Norte, Centro y
Sur.
4. El conocimiento y uso de al menos un programa social se
advierte en mayor porcentaje en el rea rural con 77,3% de
hogares beneficiarios, seguidos de la Sierra Centro con 75,9%
y de la Selva y la Sierra Norte con 71,7% y 71,3%,
respectivamente.
5. En Lima Metropolitana el porcentaje de hogares beneficiarios
por algn programa social alcanza el 49,4%.
6. Otro aspecto que se investig es el nmero de programas con los
que se benefician los hogares del pas. Al respecto, a nivel
nacional los hogares que se benefician con solamente un
programa representan el 41,4% del total, el 28,6% accesa a 2
programas, el 16,5% a 3 y el 13,5% restante de hogares se
beneficia con 4 y ms programas.
7. Con relacin a los organismos ejecutores de los programas
sociales, visto de manera global y a nivel nacional, de acuerdo
a la percepcin de los hogares, destaca la presencia del
Ministerio de Salud con 68,7% de hogares que mencionaron a este
sector pblico. El 36,9% de hogares refiri tambin a los
Gobiernos Locales. El 19,3% de hogares mencion al Programa
Nacional de Apoyo Alimentario (PRONAA) y el 17,0% al Ministerio
de Educacin.
8. Otros organismos que destacan en la Sierra Centro y Sur son
FONCODES y CARITAS. Asimismo, es de sealar las acciones que el
Ministerio de la Presidencia ejecuta en Lima Metropolitana y la
Costa Centro con 6,0% y 5,1%, respectivamente.
9. El estudio revela tambin que un alto porcentaje de hogares no
identifican al organismo ejecutor de los programas de apoyo
social. Este porcentaje representa el 44,2% del total de
hogares beneficiarios.
10. De manera global, los resultados obtenidos en la Encuesta de
Hogares permiten advertir que tanto el sexo como la edad de los
jefes de hogar no discriminan el acceso a los programas de
apoyo social. Es decir, las diferencias encontradas son poco
significativas.
11. Las variables que permiten discriminar la accesibilidad a los
programas sociales constituyen el nivel educativo del jefe del
hogar, el ingreso familiar mensual y el ingreso prcapita. Esto
quiere decir, que entre estas variables y el acceso a programas
de apoyo social existe una relacin inversa. As, se encontr
que a menor nivel educativo o menor ingreso es mayor el acceso
a los programas sociales.
12. Asimismo, en cuanto al tamao del hogar, a mayor nmero de
miembros del hogar es mayor el acceso a los aludidos programas,
lo que significara que en estas variables se da una relacin
directa.
13. El acceso de los hogares a los programas sociales especficos
muestra que de los programas alimentarios se benefician el
49,5% de hogares encuestados. El 71,6% de hogares del rea
rural respondi haber accesado al menos a un programa
alimentario. Asimismo, en la Sierra se advierten porcentajes de
68,7% en el Norte, 68,2% en el Centro, y 60, 6% en el Sur.
El 37,2% de hogares de Lima Metropolitana respondieron que se
benefician de al menos un programa alimentario
14. Los hogares beneficiarios de programas de salud, representan a
nivel nacional, el 42,6%. En el rea rural, el porcentaje de
acceso a los programas de vacunacin y planificacin familiar,
comprendidos en el rea de salud, estara beneficiando al 54,7%
de los hogares. El 32,3% de hogares de Lima Metropolitana
respondieron que usan los mencionados programas de salud.
15. Los servicios de wawa-wasi y de cuna guardera que
fundamentalmente brindan apoyo a la madre trabajadora estara
beneficiando, a nivel nacional, slo al 2,2% de los hogares.
Sin embargo, a nivel de rea rural el porcentaje alcanza al
7,1%. En Lima Metropolitana los hogares beneficiados con estos
programas alcanzara solamente al 1,1% de los hogares.
16. Con relacin a los hogares beneficiarios de programas de
alfabetizacin, a nivel nacional, stos representan el 5,0%. En
el mbito rural el beneficio alcanza al 13,2% de hogares, en
tanto que en Lima Metropolitana el acceso se restringe slo al
0,6% de hogares.
17. Finalmente, los programas de electrificacin rural as como los
de abastecimiento de agua y alcantarillado habra beneficiado
al 12,0% de hogares del pas. En el rea urbana este porcentaje
representa al 8,4%, en tanto que en el rea rural beneficia al
23,7%. El 4,6% de los hogares del mbito de Lima Metropolitana,
tambin habran logrado beneficiarse de estos programas
ejecutados bsicamente por entidades gubernamentales.
* Sociloga, Directora del Area de Estudios Sociales.
Direccin Tcnica de Demografa y Estudios Sociales.
INEI. Lima.
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