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2.2.3 ENCUESTA NACIONAL DE HOGARES EMPLEO URBANO INTRODUCCION La Encuesta Nacional de Hogares constituye una fuente de informacin de gran importancia para el conocimiento de la realidad del pas en sus diferentes aspectos, como son la educacin, el empleo, los niveles de ingreso de la poblacin, el tipo y la calidad de la vivienda entre otros. Su utilidad no slo radica en el hecho de servir de fuente de datos para la realizacin de diversas investigaciones socio-econmicas, sino en que, el adecuado conocimiento y manejo de las diferentes variables contenidas en la encuesta, orientan y hacen posible el diseo de polticas y estrategias destinadas a elaborar programas sociales, con la finalidad de superar la situacin de pobreza en que se encuentra un amplio sector de la poblacin nacional. Es por ello que el equipo de investigadores de la Direccin de Demografa y Estudios Sociales viene analizando la informacin producida por la Encuesta Nacional de Hogares. El presente documento tiene por objetivo mostrar cmo estn siendo explotados estos datos, en funcin del mejor conocimiento de los indicadores de pobreza en nuestra sociedad, y poner toda esta informacin sistematizada, al servicio de las diferentes instituciones pblicas y privadas, encargadas de desarrollar polticas y programas orientados a superar las graves dificultades por las que atraviesa un amplio sector de nuestra poblacin. Seguidamente se presentan algunos resultados, producto de los estudios realizados, respecto de las variables ingreso, empleo, educacin, salud y programas sociales que muestran cmo a partir de ellas, se va conceptualizando la pobreza en el pas y cmo a su vez ellas, posibilitan la formulacin de programas de accin social. La fuente de informacin es la Encuesta Nacional de Hogares, realizada en 1995 por el INEI a 60,000 hogares del rea urbana del pas. EMPLEO URBANO Econ. Mario Cerna* Econ. Martin de los Heros** El anlisis del empleo, se ha centrado en la Poblacin Econmicamente Activa (PEA) Urbana de 14 y mas aos y en forma marginal, se dedica un capitulo al examen de la PEA de 6 a 17 aos. El estudio se divide en cuatro grandes bloques de anlisis: . Composicin de la PEA urbana . Caracterizacin de los Ocupados . Situacin del empleo Asalariado e Independiente . Desempleo y los Sectores mas afectados con el problema de la desocupacin como son las mujeres y los jvenes . Caractersticas bsicas del Empleo Urbano en los Nios y Adolescentes. Las Encuestas de Hogares permiten estimar para 1995 que la PEA Urbana de 14 y mas aos estaba compuesta por 6 millones 370 mil personas. De este total, 5 millones 832 mil estn ocupados y 538 mil desempleados. Lo que significa una Tasa de Ocupacin Urbana de 91,6% y de Desempleo Urbano de 8,4%. Entre los hombres, el 93,3% estaban Ocupados y 6,7% Desocupados. En cambio entre las mujeres, 89,0% estaban Ocupadas y 11,0% Desocupadas. Segn sexo, esta PEA estaba compuesta por 3 millones 783 mil hombres y 2 millones 587 mil mujeres. Distribuida por edades es relevante sealar, que casi la mitad de la PEA Urbana tena entre 25 y 44 aos (51,5%) y en un 23,9% estaba compuesta por jvenes de 14 a 24 aos. Asimismo, segn nivel educativo, el 23,9% tena como mximo la Educacin Primaria y 43,5% la Educacin Secundaria. Dividida por Ambitos Geogrficos, Lima Metropolitana concentra el 46,4% de la PEA Urbana a nivel nacional y la Costa Norte un importante 15,8%. La PEA Urbana se caracteriza por estar dedicada a Actividades Econmicas Terciarias. Es as que el Comercio y los Servicios son las Ramas de Actividad que concentran el mayor porcentaje de la PEA Urbana (50,7%). Segmentada por Categora Ocupacional se distingue que, el empleo asalariado predomina en el rea urbana del pas. Mas de la mitad de la PEA Urbana (3 millones 217 mil personas) son Empleados (28,5%) y Obreros (22,,0%). Los independientes son el 34,0%, los Trabajadores Familiares No Remunerados el 5,3% y los Trabajadores del Hogar el 4,4%. En 19 ocupaciones se concentra el 68.1% de los Ocupados, siendo las ms importantes Comerciante al por Menor (12,4%), Ambulantes (11,5%), Personal Domstico (6,2%) y Profesores (6,0%). Entre los hombres existe mayor diversidad de ocupaciones, destacando las de Choferes, Ambulantes, Comerciantes Minoristas y Albailes (que en forma agregada dan ocupacin al 29,7% de la PEA masculina Ocupada). En cambio entre las mujeres, son tres las ocupaciones que dan empleo a mas de la mitad de la PEA Urbana femenina, Comerciantes al Por Menor, Ambulantes y Personal Domstico (las cuales en conjunto ocupan al 51,8% de las mujeres). En conjunto, un quinto de la PEA ocupada urbana tiene como profesin u oficio, Profesores (4,9%), Choferes y Taxistas (3,1%), Agricultores (2,4%), Albailes (3,4%), Arquitectos, Ingenieros y profesiones afines (2,2%), Contadores (1,4%), Secretarias (1,4%), Costureras (1,3%) y Administradores de Empresas (1,1%). Si se analiza las ocupaciones en funcin de los grupos de edad, un tercio de los jvenes de 14 a 24 aos realizan labores de Comerciante al por menor, Trabajador Domstico y Ambulante. Entre los 25 y 54 aos, alrededor de un 30,0% son Comerciantes Minoristas, Ambulantes y Profesores. Entre los 55 y mas aos, mas de un tercio son Comerciantes Minoristas, Ambulantes y Choferes. El 67,7% de los ocupados en el Per Urbano han realizado como mximo la Educacin Secundaria (entre ellos 42,9% cuentan con Estudios Secundarios realizados) y solo 32,3% Educacin Superior (de los cuales un 16,8% han realizado Estudios Superiores Universitarios). Dos tercios de la PEA Urbana esta ocupada en establecimientos de la Micro y Pequea Empresa con no mas de 10 personas. El 59,1% de los ocupados realiza sus actividades en establecimientos de la Micro-empresa con menos de cinco personas y 6,9% en establecimientos con cinco a diez personas. Gran porcentaje de la PEA Ocupada Urbana no esta afiliada a la Seguridad Social. Existe un 74,0% de esta PEA que no esta asegurada y solamente 26,0% esta afiliada a la Seguridad social. De los asegurados, dos tercios son hombres y un tercio mujeres. Asimismo, el 95,8% de los asegurados son mayores de 25 aos. Entre estos, el 71,0% cuentan como mnimo con educacin secundaria. Solamente 6,9% de los Ocupados Urbanos tiene una Actividad Secundaria, el 93,1% se dedica solamente a su Actividad Principal. Por sexo, entre los hombres, los que tienen actividad secundaria son el 7,2% y entre las mujeres, del 6,4%. La PEA Ocupada Urbana dedica 47,2 horas semanales como promedio para el desarrollo conjunto de su Actividad Principal y su Actividad Secundaria . El Promedio de tiempo dedicado a desarrollo de la Actividad Principal es de 45.6 horas semanales, siendo de 49.1 horas para los hombres y de 40.3 horas para las mujeres. En cambio, el promedio semanal de PEA Ocupada que cuenta con Actividad Secundaria, es de 18.0 horas para el desarrollo de las actividades de esta tipo. El empleo dependiente predomina en el rea urbana del pas. El 54,2% de los ocupados recibe ingresos producto de un trabajo dependiente, ya sea como Empleado (28,3%), Obrero (21,4%) o Trabajador del Hogar (4,5%). Entre los Asalariados un 70,9% son hombres y 29,1% mujeres. Segn el tipo de contratacin laboral el 35,2% tiene un contrato de plazo indeterminado o de carcter indefinido, 30,8% tiene contrato a plazo determinado u obra terminada y existe un 32,5% que no ha formalizado su relacin laboral mediante un contrato. Entre los Independientes se presenta una mayor participacin femenina que entre los Asalariados (Un 55,1% son de sexo masculino y 44,9% de sexo femenino). Asimismo en los Independientes existe un porcentaje significativo que usa su vivienda de residencia como lugar de trabajo (30,7%). Tambin son relevantes, los que se desplazan como Ambulantes de casa en casa (16,4%), los que desarrollan su trabajo en la casa de sus clientes (11,9%), los que utilizan como lugar de trabajo un puesto improvisado o semi-fijo (9,3%), los que tienen un Centro de Trabajo, Local Comercial o Taller (8,8%) y los que utilizan un Vehculo para Transporte como lugar de trabajo (7,4%). Por otro lado, es significativa la cantidad de Independientes que dedican 49 a mas horas semanales a realizar sus labores (43,3%). Mas de la mitad de PEA Desempleada en 1995, eran mujeres (53,1%). El 49,4% son jvenes de 14 a 24 aos. Y asimismo un 29,0% lo constituyen aquellas personas que buscan trabajo por primera vez (de los cuales cerca de dos tercios son jvenes de 14 a 24 aos). Esta situacin nos indica que los sectores mas afectados por el desempleo sean las mujeres y los jvenes. La magnitud del problema del desempleo en estos segmentos de la poblacin, se percibe si comparamos la Tasa de Desempleo urbano de 8,4%, con la Tasa de Desempleo Femenino, de 11,0% y con la Tasa de Desempleo en los jvenes, de 17,4% y mas aun, si se la relaciona con la Tasa de Desempleo en las mujeres jvenes, de 20,0%. El Desempleo Femenino se caracteriza por tener un alto contenido de poblacin joven, pues en 46,7% estaba integrado por grupos de 14 a 24 aos y en 44,2% por mujeres de 25 a 44 aos. El 60,5% de las mujeres desempleadas haban alcanzado como mximo el grado de instruccin secundaria. Por otro lado, el 47,2% de las mujeres desempleadas provienen de hogares con 3 a 5 miembros y 37,0% de hogares con 6 a 8 miembros. La Poblacin de jvenes desempleados de 14 a 24 aos, representan la mitad de los desempleados del rea urbana del pas. Esta poblacin en 50,2% esta conformada por personas del sexo femenino y en 49,8% del sexo masculino. Entre sus caractersticas mas destacables estn su nivel de instruccin alcanzado, se observa que el 61,3% tienen estudios secundarios, asimismo su localizacin, en 55,1% se presenta en zonas urbanas del interior del pas y en 44,9% en Lima Metropolitana y su tipo, 58,2% es de tipo Cesante y 41,8% de tipo Aspirante. Segn resultados de la ENAHO correspondiente al IV trimestre de 1995, los nios y adolescentes que trabajan en el rea urbana del pas, es de 389 mil, de los cuales, 36 mil tienen entre 6 a 11 aos y 353 mil entre 12 a 17 aos. Del total de la Poblacin Urbana de 6 a 17 aos, 7,8% se encuentra en el Mercado de Trabajo. Dentro de estos, 2,6% solo trabaja y 5,2% comparten sus estudios con el trabajo. Asimismo, por cada 10 nios y adolescentes que estn ocupados, 9 tienen entre 12 y 17 aos. Un 30.0% son obreros, 29,5% trabajadores familiares no remunerados y 14,6% trabajadores del hogar. * Economista , Asesor de la Jefatura del INEI. Lima ** Economista , Investigador de la Direccin de Demografa y Estudios Sociales. NIVELES DE INGRESO EN EL PERU URBANO Econ. Javier Vsquez Chihun* La divergencia en el crecimiento y el nivel de ingreso percpita entre los pases ms ricos y ms pobres es la caracterstica dominante de la economa moderna. El cambio tecnolgico especialmente en la microelectrnica (informtica y telemtica) y los avances en el campo de la biogentica, acentuaran las disparidades de productividad entre los pases desarrollados y los Latinoamericanos, si estos ltimos no se adecuan o incorporan con mayor rpidez a las recientes innovaciones tecnolgicas y mejoran de ese modo sus niveles de produccin e ingresos. El estudio de la distribucin de los ingresos no slo debe preocuparse de conocer los factores que explican las diferencias de ingreso entre los diversos grupos poblaciones de un pas. Sino tambin y ms importante aun de las posibilidades que tienen los pases de poder articularse a un mundo que se configura en bloques econmicos y tiende cada vez ms a globalizarse , a fin de obtener mayores niveles de produccin y una distribucin mas equitativa. de los ingresos. En el Per urbano se observa una asociacin positiva entre el nivel educativo del jefe de hogar y los ingresos que reciben las familias, conforme aumenta el nivel de educacin del jefe se incrementa tambin el ingreso medio del hogar. Esta misma relacin se presenta cuando consideramos los ingresos percpita en lugar de los ingresos medios. Los niveles de ingreso aumentan con el numero de perceptores en el hogar, tanto en ingresos medios como percpita. Existe diferenciales de ingreso segn el gnero del jefe, los hogares con jefe de familia hombre reciben mejores ingresos medios que los hogares dirigidos por una mujer, especialmente en la Sierra. No obstante estas diferencias resultan a favor de la mujer, en los mbitos geogrficos ms urbanizados del Per (Lima Metropolitana y la Costa Centro) cuando se considera el ingreso percpita. Las familias con mayor nmero de miembros reciben mejores niveles de ingreso medio, pero si consideramos el ingreso por persona esta relacin se revierte, es decir, los hogares pequeos (con menos de tres miembros) reciben los ingresos por persona ms altos del rea urbana, en tanto, que los hogares numerosos conformados por ms de nueve miembros obtienen los ingresos percpita ms bajos. El trabajo es la principal fuente de obtencin de ingresos de las familias, por tanto debe observarse con mayor detenimiento este mercado para explicar las diferencias en los ingresos. Las variables asociadas al mercado de trabajo presentan las siguientes caractersticas: a) Las familias con jefe de hogar patrono y empleado altamente calificado obtienen los ms elevados niveles de ingreso medio y percpita. b) Los hogares cuyo jefe labora en la actividad financiera e inmobiliaria reciben mejores niveles de ingreso que las familias con jefe ubicados en otras actividades econmicas. c) Los jefes que trabajan como gerentes de empresa y funcionarios con altos cargos pblicos tienen hogares que reciben mejores ingresos que las familias con jefe obrero, agricultor o trabajador no calificado. La mayor parte de la fuerza de trabajo ocupada en el rea urbana se encuentra en el sector terciario de la economa, especialmente en la actividad comercial. El sector secundario le sigue en importancia, como demandante de fuerza de trabajo, destacando la actividad manufacturera. Finalmente, es de sealar que a pesar de la racionalidad econmica que muestran los hogares de menores ingresos al reducir su tamao familiar, ello no resulta suficiente para adecuar sus bajos ingresos a la satisfaccin de sus necesidades y tampoco para disminuir las diferenciales de ingreso existentes en el Per urbano. * Economista, Investigador del INEI - ENEI. Lima. EDUCACION Genara Rivera Araujo* La presente exposicin tiene por objetivo mostrar los resultados de la Encuesta Nacional de Hogares - Cuarto Trimestre de 1995, en lo referente a las principales variables educativas, como son: nivel de educacin, asistencia escolar y analfabetismo. Asimismo, se presenta el perfil socioeconmico de los hogares de los estudiantes de los diferentes niveles educativos. 1. El nivel de educacin de la poblacin peruana ha experimentado una mejora en los ltimos dos aos. Esto se evidencia porque ha crecido la proporcin de personas que cuentan con algn ao de educacin secundaria y superior, de 55.9% subi a 60,6%. 2. La asistencia escolar de los nios de 6 a 11 aos, es de 95 de cada 100 personas y entre los jvenes de 12 a 16, se observa que 88 de cada 100 de ellos asisten a un centro educativo. Es decir, que la escolarizacin es bastante alta entre la poblacin que corresponde a las edades normativas para primaria y secundaria. 3. El analfabetismo, problema importante de la realidad educativa del pas, muestra una tendencia declinante; la tasa de analfabetismo actual es de alrededor de 11 personas analfabetas por cada 100 personas de 15 y ms aos de edad. 4. Los datos indican que el analfabetismo contina siendo un problema que afecta mayormente a las mujeres, principalmente aquellas que residen en el rea rural. La tasa de analfabetismo femenino es 15,5%, en tanto que el analfabetismo masculino es 5,1%. 5. Una rpida caracterizacin de las condiciones en que vive la poblacin analfabeta muestra que el 65,0% de los hogares de este grupo poblacional, tienen al menos una Necesidad Bsica Insatisfecha (NBI), el 53,6% cuentan con un ingreso per cpita inferior a S/.100.00 nuevos soles, el 62,1% no disponen de ningn servicio bsico en sus hogares y el 52,1% son jefaturados por personas que tambin son analfabetas. 6. La ENAHO 1995, 4to. Trimestre encontr que el 23,5% de la poblacin menor de 6 aos estaba asistiendo a los diferentes centros y programas educativos de Educacin Inicial tales como, cunas o guarderas, wawa-wasi, PRONOEI, jardines y otros. 7. Las caractersticas ms notorias de los hogares de este tipo de estudiantes es que el 57,9% tienen alguna NBI, el 38,9% no disponen de ningn servicio bsico en sus hogares, el 47,3% disponen de un ingreso per cpita inferior a S/. 100.00,. el 93,0% de los jefes de hogar son alfabetos y el 57,6% de ellos han estudiado al menos un ao de educacin secundaria y superior. 8. En cuanto a los Estudiantes de Primaria, los resultados de la encuesta sealan que el 97,0% de los nios que asisten a este nivel tienen entre 6 y 14 aos de edad. Se encuentra adems que el 9,6% de este grupo de estudiantes trabajan, es decir forman parte de la PEA ocupada. 9. Respecto a las caractersticas de sus hogares, el 66,3% de ellos tienen alguna NBI, el 37,0% no dispone de ningn servicio bsico y el 48,7% tienen un ingreso per cpita inferior a los S/. 100.00 nuevos soles. El 90,1% de sus hogares son jefaturados por personas alfabetas y el 45,6% de ellos han estudiado algn ao de educacin secundaria y superior. 10.Acerca de los Estudiantes de Secundaria, la encuesta seal que el 89,3% de ellos tienen entre 11 y 17 aos de edad y que el 15,5% trabajan. En cuanto a las caractersticas mas destacadas de sus hogares, el 37,8% tiene al menos una NBI, el 39,8% dispone de los tres servicios bsicos del hogar , el 19,2% no dispone de ninguno y el 67,6% cuenta con un ingreso per cpita inferior a S/.200.00 nuevos soles. En cuanto a los jefes de hogar, el 92,9% son alfabetos y el 56,5% de ellos han estudiado algn ao de educacin secundaria y superior. 11.Sobre los Estudiantes de Institutos Superiores se puede indicar que el 75,6% tiene entre 18 y 24 aos de edad y que el 35,3% de ellos trabaja. Respecto a sus hogares, el 79,0% tienen satisfechas sus necesidades bsicas, el 66,7% disponen de los tres servicios bsicos, el 10,0% no dispone de ninguno de ellos y el 48,5% cuenta con menos de S/.200.00 como ingreso per cpita. Los jefes de hogar de este grupo de estudiantes, en el 95,9% de los casos son alfabetos y el 62,4% han estudiado algn ao de educacin secundaria y superior. 12.En cuanto a los Estudiantes Universitarios, la encuesta permite concluir que este tipo de estudiantes viven en mejores condiciones que los de otros niveles educativos. El 75,8% de ellos tienen entre 16 y 24 aos de edad y el 31,0% trabajan. El 86,2% de sus hogares tienen satisfechas sus necesidades bsicas, el 82,0% disponen de los tres servicios bsicos y slo el 4,0% no tiene ningn servicio bsico. El 44,9% de los hogares de este grupo de estudiantes, cuenta con ingresos superiores a S/.300.00 nuevos soles, El 98,4% de los jefes de sus hogares son alfabetos y el 78,2% han aprobado algn ao de educacin secundaria y superior. * Bachiller en Psicologa, con estudios de post grado en Demografia. Investigadora de la Direccin Tcnica de Demografa y Estudios Sociales. INEI. Lima. SALUD Lic. Cirila Gutirrez Espino* I. POBLACION CON ALGUN SINTOMA DE ENFERMEDAD O ACCIDENTE El presente estudio trata sobre el estado de salud de la poblacin peruana. Investigacin que ha utilizado los resultados de la Encuesta Nacional de Hogares, aplicada por el Instituto Nacional de Estadstica e Informtica (INEI) en el cuarto trimestre de 1995. Se seleccionaron a todos aquellos encuestados que respondieron haber presentado algn sntoma de enfermedad o accidente, en los 15 das previos a la Encuesta, con los resultados obtenidos se caracteriz a la poblacin de acuerdo a las variables demogrficas, sociales y econmicas, con la finalidad de contribuir al conocimiento sobre la incidencia de los sntomas de enfermedad o accidente. Del total de entrevistados, el 29,4% declar haber presentado algn sntoma de enfermedad o accidente dentro de los 15 das previos a la Encuesta. El 93,6% de la poblacin afectada correspondi a sntomas de enfermedad, mientras que el 6,4% expres haber padecido algn accidente. La incidencia y la prevalencia de enfermedades no son las mismas ni tienen el mismo orden de magnitud al ser comparadas entre hombres y mujeres. As de cada 100 entrevistados con sntoma de enfermedad o accidente 55 son mujeres y 45 hombres, es decir, las mujeres se enferman en un 20% ms que los hombres. La incidencia de los sntomas de enfermedad o accidente vara segn grupos de edad. As, mientras la tercera parte de la poblacin menor de 15 aos manifest haber padecido algn sntoma de enfermedad o accidente, la cuarta parte de la poblacin en edad de trabajar se vio afectada por esta situacin. En cambio, la poblacin mayor de 65 aos se ubica como la ms afectada, presentando alrededor del 50% de su poblacin algn sntoma de enfermedad o accidente. Del total de personas entrevistadas que manifestaron haber sentido algn sntoma de enfermedad o accidente, el 49,6% residen en viviendas cuyos hogares presentan al menos una necesidad bsica insatisfecha, mientras que el 50,4% residen en viviendas cuyos hogares tienen sus necesidades bsicas satisfechas. Existe una relacin inversa entre el nivel educativo y la incidencia de los sntomas de enfermedad o accidente. Mientras ms altos son los niveles educativos, menores son las probabilidades de presentar sntoma de enfermedad o accidente. Asimismo, se presenta mayor incidencia de los sntomas de enfermedad o accidente en la poblacin de bajos recursos econmicos. El 49,5% de la poblacin pertenecen a hogares con bajos ingresos. Del total de la poblacin afectada con sntomas de enfermedad, el 52,8% lo fueron del aparato respiratorio, correspondiendo el 33,0% a afecciones gripales y el 19,8% a tos con dificultad para respirar. Afecciones que se manifestaron mayoritariamente en todos los mbitos geogrficos del pas. Las enfermedades diarricas afectaron en mayor proporcin a la poblacin menor de 15 aos. As, del total de personas que enfermaron por este mal, el 82,9% correspondi a los menores de 15 aos y principalmente a los nios menores de 5 aos. Igualmente, la poblacin infantil comprendida en el grupo etreo de 0 a 5 aos, en un 54.4 % de ella estuvo afectada con la enfermedad respiratoria aguda. En cambio, en la poblacin entre 15 a 64 aos, es decir en edad de desempear una actividad econmica, fueron ms frecuentes los accidentes, las enfermedades renales, y se manifestaron las dolencias: como los dolores de cabeza, dentales, del estmago y musculares. En la poblacin de 65 y ms aos de edad, los sntomas o accidentes ms frecuentes son las llamadas de la "tercera edad", siendo los ms comunes: las enfermedades renales, de la piel, dolencias musculares y de cabeza, fracturas y traumatismos. La poblacin econmicamente activa (PEA), se vio afectada por algn sntoma de enfermedad o accidente en un 25,4%. De este total, los ms afectados fueron los trabajadores independientes con el 42,9%, seguidos de los obrero con 16,9%, empleados con el 15,9% y los trabajadores familiares no remunerados con el 14,7%. Aproximadamente las tres cuartas partes, es decir el 73,5% de la poblacin afectada con algn sntoma de enfermedad o accidente, estuvo con alguna dolencia ms de 4 das, mientras en el 26,5% de la poblacin afectada los sntomas duraron entre 1 a 3 das. Del total de la poblacin afectada con algn sntoma de enfermedad o accidente, el 41,8% realizaron consulta y el 58,2% no lo hizo. La poblacin con mayor nivel educativo, afectada con algn sntoma de enfermedad o accidente es la que consulta en mayor proporcin. As, el 54,4% de los que tenan educacin superior hicieron alguna consulta, mientras que los afectados sin nivel de educacin solamente 39,9% lo hicieron. La decisin de consultar de la poblacin con sntoma de enfermedad o accidente sta afectado por el nivel de ingreso de los hogares. As, la poblacin con bajos ingresos, consultaron slo en un 29,4% mientras que la poblacin afectada con altos ingresos lo hizo en un 55,9%. Es necesario aclarar, que del total de la poblacin afectada por algn sntoma de enfermedad o accidente, los estratos ms bajos concentra alrededor del 50% . El profesional de salud ms consultado por la poblacin enferma o accidentada es el mdico. Sin embargo, existen diferencias en la demanda de este profesional, de acuerdo al nivel de ingreso de los hogares y al nivel educativo del paciente, siendo requerido en mayor proporcin por la poblacin de ingresos altos y por los que tienen educacin superior. Otros profesionales de salud, demandados por la poblacin afectada son: la enfermera, el farmacutico y el sanitario. Estos profesionales son requeridos principalmente por la poblacin de bajos ingresos. El 38,9% de las consultas de la poblacin afectada se realizaron en un establecimiento del Ministerio de Salud (Hospital y Centro-Puesto de salud), el 17,7% se efectuaron en la farmacia o botica, 16,6% en un Hospital del Instituto Peruano de Seguridad Social y el 10,0% en un Consultorio o Clnica Particular . Ms del 50% de la poblacin afectada sin nivel de educacin acudi a un establecimiento del Ministerio de Salud, en cambio, el 30,0% de la poblacin afectada con educacin superior se atendi en un Hospital del Instituto Peruano de Seguridad Social. El 75,4% de la poblacin afectada por algn sntoma de enfermedad o accidente que realiz consulta compraron las medicinas recetadas, 20,5% lo adquiri de donacin, el 2,2% no pudo comprarlas y al 1,9% no le haban recetado. El 58,2% de la poblacin afectada con algn sntoma de enfermedad o accidente no consultaron, encontrndose la mayor proporcin en el rea rural del pas. En el rea rural del pas, el 75,7% de los nios entre 5 a 14 aos y el 65,8% de las personas mayores de 65 aos que presentaron algn sntoma de enfermedad o accidente no realizaron consulta. En la encuesta, tambin se indag por las razones que tuvo la poblacin con sntoma de enfermedad o accidente para no consultar. Los resultados sealaron que el 65,0% manifest no haber consultado por la falta de recursos econmicos, el 20,7% no dese consultar, el 6,7% manifest que el lugar de consulta quedaba lejos, el 3,3% falta de atencin y el 2,3% dijo que no haba servicios de salud II. SALUD MATERNA Para investigar sobre la salud materna, la encuesta entrevist a las mujeres de 15 a 49 aos que tuvieron su ltimo embarazo en los 5 aos previos a la encuesta. El control del embarazo se llev a cabo en un 76,9%, presentndose disparidades 25. entre reas urbana y rural y entre los diversos mbitos geogrficos. As, el 94,1% de las mujeres que declararon estar embarazadas en Lima Metropolitana fueron atendidas, mientras que en la Sierra Norte sta atencin descendi al 47,1%. Se aprecia una relacin directa entre los niveles de educacin e ingresos con el control del embarazos. Mientras ms altos son los niveles de educacin e ingresos mayor es la proporcin atenciones. En el control de embarazo el mdico es el profesional de la salud ms consultado. No obstante, existen variaciones por lugar de residencia y mbitos geogrficos. As, mientras que en el rea urbana ms de la mitad de las mujeres embarazadas consultaron con el mdico, en el rea rural sta consulta descendi a poco menos de la cuarta parte, en cambio en la Sierra Sur la enfermera fue el profesional ms consultado. Del total de mujeres que estuvieron embarazadas, el 55,2% se encontraban desempeando alguna actividad econmica. De este total, solamente el 13,5% de ellas tenan seguro de salud. El 33,2% de las parturientas fueron atendidas por un mdico, concentrndose su atencin en el rea urbana del pas, en la Costa y en Lima Metropolitana. Del total de las parturientas el 42,2% fueron atendidas en sus domicilios. En el rea rural, en la Sierra y en la Selva, el 78,4%, 67,6% y 58,3% de las parturientas fueron atendidas en sus casas, respectivamente. III. SALUD INFANTIL La diarrea afect al 6,7% de los nios menores de 5 aos. Esta enfermedad fue ms prevalente en el rea rural. En este sector de cada 100 nios menores de 5 aos 10 se enfermaron de diarrea. La incidencia de la diarrea tuvo relacin con el tipo de abastecimiento de agua de la vivienda de los nios menores de 5 aos. As, se present mayor nmero de casos en los nios cuyas viviendas se abastecan de agua mediante camin cisterna, pozo o ro, donde 68 nios de cada 100 nios presentaron sntomas de esta enfermedad. Alrededor del 50% de los nios enfermos con diarrea recibieron atencin mdica. Esta atencin alcanz al 78,5% de los nios con diarrea del rea urbana, 71,7% de los nios de la Costa y al 88,2% de Lima Metropolitana. En cambio, en el rea rural del pas y en la Sierra alrededor de la tercera parte de los nios con diarrea fueron atendidos por una enfermera. El 61,9% de las madres de nios menores de 5 aos reconocieron como signo de deshidratacin cuando el nmero de deposiciones por da aumenta y/o cuando el nio vomitaba los alimentos que ingiere. * Sociloga Investigadora de la Direccin Tcnica de Demografa y Estudios Sociales. INEI. Lima. LOS HOGARES POBRES EN EL PERU: 1995 Econ. Mirlena Villacorta* En esta exposicin se presenta un resumen de las conclusiones mas importantes a las que se lleg en el estudio que, sobre la distribucin del bienestar de los hogares a 1995 se realiz, de acuerdo con las aproximaciones metodolgicas basadas en la Lnea de pobreza y el Mtodo Integrado. La investigacin se llev a cabo, tomando como base la Encuesta de Niveles de Vida 1995, ENNIV 95-IV. El estudio es bsicamente de carcter descriptivo, ofrecindose posibles explicaciones a las principales vinculaciones entre pobreza y empleo, y entre pobreza y educacin. Los resultados principales del estudio son: 1. En cuanto a la incidencia, y de acuerdo al Mtodo de Lnea de Pobreza, la pobreza en el Per afectara a cerca de 11 millones de peruanos. Es decir, el 45,3 % de la poblacin sera catalogada como pobre bajo esta aproximacin metodolgica. 2. La extrema pobreza alcanzara a cerca de 5 millones de la poblacin peruana, es decir al 19,3 % de ella. 3. Es la poblacin rural la que presenta la mayor incidencia de pobreza, afectndose al 59,8 % de ella. 4. En las reas urbanas de mayor desarrollo relativo, sin incluir Lima Metropolitana, la incidencia de la pobreza es de 44,5 %, y de 28,3 % slo en Lima Metropolitana. 5. Es en la Sierra Rural y en Lima Metropolitana donde se localizan principalmente los pobres del Per. 6. En cuanto a la intensidad y severidad de la pobreza, medidas a partir de la familia de indicadores propuesta por FOSTER- GREER-THORBECKE (FGT), se obtuvo que la intensidad (FGT1) de la pobreza fue de 16,6 % y la severidad o desigualdad (FGT2) fue del orden del 8,2 %. 7. A travs de los ndices FGT se observa que el ncleo de la pobreza se encuentra en el rea rural; donde la incidencia, intensidad y severidad de la pobreza es mayor que en las reas urbanas. Dentro de esta dinmica, en la sierra rural el gasto promedio de los pobres cubre tan slo el 58 por ciento del valor de la lnea de pobreza. 8. Bajo el Mtodo Integrado y de acuerdo con la propuesta metodolgica desarrollada por la CEPAL, la pobreza crnica afecta al 32 por ciento en el Per. Es decir, 7.5 millones de peruanos tienen ingresos inferiores a la lnea de pobreza y presentan una o ms carencias relacionadas con la infraestructura de la vivienda y el analfabetismo del jefe de hogar. Los pobres crnicos se localizan bsicamente en las reas rurales de nuestro pas. Contrariamente, los pobres recientes se encuentran en las reas urbanas y representan el 13,3 % de la poblacin. Los peruanos con carencias inerciales, es decir, aquellos que teniendo ingresos que superan la lnea de pobreza presentan una o ms carencias en materia educativa y habitacional, representan el 21,6 % de los pobres. Finalmente, la poblacin en condiciones de integracin social, es decir, aquella cuyos ingresos estn por encima de la lnea de pobreza y a la vez no presentan carencias, abarca al 33,1 %. 9. La pirmide de edades de la poblacin en pobreza y pobreza extrema, indica una concentracin de menores de 18 aos. De un total de 10,6 millones de pobres, cerca de 6 millones son menores de 18 aos y de 4,6 millones en extrema pobreza casi 3 millones tienen menos de 18 aos. 10. La ENNIV 95-IV indica que del total de hogares en el Per el 83 por ciento se encuentra jefaturado por un varn y que esta representacin es mayor tratndose de los hogares pobres. 11. La vulnerabilidad de los hogares pobres est asociada a sus bajos niveles de instruccin y altas tasas de dependencia por el tamao de sus familias. Pero esta vulnerabilidad es mayor al evaluarla en una perspectiva de gnero, que considera las diferencias en los niveles de instruccin y la falta de equidad en las oportunidades de ascenso econmico y social. As, por ejemplo, de cada 2 mujeres jefes de hogar pobres extremos, una es analfabeta y las que no lo son, tienen en promedio dos aos de escolaridad menos que los varones jefes de hogar pobres extremos. 12. En cuanto a la concentracin de edades de las jefaturas de hogar se advierte una vez ms, una pirmide de edades ms joven tratndose de los hogares pobres en relacin a la de los hogares no pobres y una proporcin mayor de jefaturas de 50 aos a ms en los hogares no pobres. 13. Al evaluar los niveles de instruccin de los jefes de hogar por niveles de pobreza, encontramos que la pobreza est asociada a bajos niveles educativos y ms an, que estos se diferencian segn el grado de pobreza. As, por ejemplo, a nivel nacional ms del 50 por ciento de los jefes de hogares pobres cuentan con slo primaria y tratndose de los pobres extremos el porcentaje supera el 60 por ciento. Contrariamente lo que caracteriza a los hogares no pobres, es contar con jefaturas ms instruidas. 14. En una perspectiva ms amplia basada en el mtodo Integrado, encontramos que los aos promedio de estudio del jefe de hogar caracterizan su nivel de pobreza y condicin de integracin. As, por ejemplo, mientras los pobres crnicos cuentan con casi 5 aos promedio de estudio, los jefes de hogar en condiciones de integracin tienen cerca de 11 aos promedio de estudio. Muy prximos a los jefes de hogar en condiciones de integracin se encuentran los pobres recientes con ms de 7 aos promedio de estudio. 15. De acuerdo con la ENNIV 95-IV, la Poblacin Econmicamente Activa en el Per asciende a 10,5 millones de personas. De ellas slo un 5 por ciento se encuentra desocupada. 16. Del total de la PEA as definida, ms de 4 millones son pobres y su pobreza est asociada a la desocupacin slo en parte, ya que la tasa de desocupacin disminuye a medida que aumenta el grado de pobreza. As tenemos que mientras la tasa de desempleo de los pobres (5,3 % ) supera a la de los no pobres (4,2 %), la tasa de desempleo de los pobres extremos es menor (3,6%) que la de los pobres no extremos (6,3%). 17. Los resultados obtenidos sobre ocupaciones, categora ocupacional y rama de actividad, nos sealan algunas pistas sobre la relacin o vinculacin entre pobreza y empleo. En efecto, la poblacin pobre es aquella bsicamente conformada por trabajadores independientes que a nivel nacional representa el 38 por ciento, trabajadores familiares no remunerados con un 27 por ciento y obreros del sector privado con 21 por ciento. Todos ellos trabajan principalmente en los sectores de agricultura y comercio. 18. El sector agrcola concentra a cerca del 50 por ciento de la fuerza laboral pobre y el comercio al 20 por ciento. 19. Resulta evidente asociar la pobreza al tipo de ocupaciones en las cuales se desempean los pobres. En efecto, del total de trabajadores independientes, el 40 por ciento son agricultores y se localizan en las reas rurales de la Sierra, Selva, y Costa del Per. Un 20 por ciento son vendedores ambulantes con asentamiento en las reas urbanas del pas. 20. Al interior del rea urbana un contingente importante de trabajadores independientes en condicin de pobreza lo conforman los obreros de la construccin, los obreros de calzado, sastres, choferes y el personal domstico. En el medio rural, no obstante la concentracin de agricultores, no es despreciable la proporcin de operarios de las minas y comerciantes y vendedores ambulantes. 21. Otra caracterstica que refuerza las vinculaciones entre pobreza y empleo, es el nivel de instruccin de la fuerza laboral pobre. En efecto, cerca de la mitad de la PEA de 6 aos y ms tiene solo nivel de primaria y un nivel no despreciable de ella, cerca del 14 por ciento no ha recibido ninguna instruccin. 22. La ENNIV 95-4 nos revela como caracterstica fundamental de los pobres, su vulnerabilidad. Resultante de sus altas tasas de dependencia y bajas tasas de actividad; lo que en definitiva determina su menor capacidad para generar ingresos. En efecto, segn podemos apreciar en el cuadro a nivel nacional, mientras que la tasa de dependencia por persona ocupada de los hogares pobres es de 2,4 la de los hogares no pobres es de 1,4. En la misma direccin, la tasa de actividad o participacin de los hogares pobres (48,7%) es menor que la de no pobres (59,5%). 23. Un factor explicativo de la menor tasa de actividad de los pobres podra ser su propia estructura de edades. Como sabemos, la pirmide de edades de los pobres presenta una concentracin de nios y jvenes, este hecho limita la participacin de la madre sobre todo en las edades tempranas de los nios. Por ello la tasa de participacin de las mujeres pobres (38,5%) resulta menor que la de las mujeres no pobres (48,5). 24. Otro factor explicativo de la menor tasa de actividad de los pobres podra ser el desaliento, sobre todo de los jvenes. Al percibir sus pocas posibilidades de conseguir empleo, dado su bajo nivel de instruccin, su falta de experiencia laboral y de mecanismos de insercin, por tales razones la tasa de desempleo de los pobres ( 5,3% ) supera a la de los no pobres ( 4,2 % ). 25. En virtud de los hallazgos de la ENNIV 95-IV, podemos concluir respecto a las relaciones entre pobreza y empleo lo siguiente: Que los pobres tienen pocas posibilidades de conseguir un empleo por su bajo nivel de instruccin y baja calificacin, por tanto se ven obligados a insertarse en el proceso econmico en actividades de baja productividad o en ocupaciones de baja remuneracin para garantizar su sobrevivencia. 26. En el Per la disponibilidad de una vivienda adecuada presenta una distribucin desigual con notables diferencias entre los distintos grupos sociales pobres y no pobres. Slo un 34 por ciento de los pobres cuentan con abastecimiento de agua con red pblica dentro de la vivienda. A nivel nacional slo un 23 por ciento de los hogares cuenta con servicio de desage por red pblica dentro de la vivienda y slo un 49 por ciento de hogares pobres cuentan con alumbrado elctrico. 27. En una perspectiva de gnero se advierte que no existen mayores diferencias en trminos relativos entre varones y mujeres en cuanto a los niveles de instruccin de primaria, secundaria y superior. No sucede as en el caso de la poblacin analfabeta ya que del total de ella ms del 76 por ciento son mujeres. Motivo por el cual la falta de equidad de gnero en el plano educativo sigue siendo un problema para resolver. Ms an cuando de la mujer depende la supervivencia infantil. 28. As mismo, en una perspectiva de gnero, los datos sealan diferencias en cuanto a la asistencia escolar. As, por ejemplo, mientras que en el rea urbana la asistencia de nias pobres supera a la de nios de 6 a 12 aos, en el rea rural sucede lo contrario, es decir, son las nias pobres las que no asisten en mayor proporcin. Esto ltimo es debido a que desde temprana edad la nia cumple el rol de ayudante de la madre, lo que en definitiva disminuye sus posibilidades de asistir a la escuela. 29. Tambin fue posible obtener una evaluacin de la equidad en el acceso a los servicios de salud a travs de la poblacin que declar estar enferma. Del 100 por ciento de pobres que se encontraban enfermos, un 32 por ciento realiz consulta de salud y slo un 58 por ciento de estos consult con un mdico; el resto lo hizo fundamentalmente con el farmacutico o personal paramdico. Al mismo tiempo la razn principal por la cual los pobres que declararon estar enfermos y no hicieron consulta de salud fue por falta de recursos econmicos. 30. Los resultados de la ENNIV 95-IV indican que en el pas, de un total de 2'089,374 hogares beneficiarios, un 53 por ciento son hogares pobres y un 47 por ciento son no pobres. 31. El rea geogrfica que tiene la mayor proporcin de hogares pobres beneficiarios es la Sierra Rural y contrariamente el rea geogrfica que tiene la mayor proporcin de hogares no pobres beneficiarios es Lima Metropolitana. 32. De otro lado, a nivel nacional de un total de 1'097,598 hogares pobres beneficiarios, el 61 por ciento de ellos se beneficia de un programa social, en tanto que el 39 por ciento de hogares pobres beneficiarios participan de ms de un programa social. Slo en la Sierra rural, el 51 de los hogares pobres se benefician de ms de un programa social. * Economista, Investigadora de la Direccin Tcnica de Demografa y Estudios Sociales. INEI. Lima. CARACTERIZACION DE LOS HOGARES QUE ACCESAN A LOS PROGRAMAS SOCIALES, 1995 Lic. Lupe Berrocal Montoya * El propsito central de esta exposicin es, por un lado, dimensionar el nivel de conocimiento y acceso de los hogares a los programas sociales ejecutados en el pas y, del otro, analizarlos de acuerdo a las caractersticas sociodemogrficas del jefe del hogar y a las caractersticas socioeconmicas de los hogares. Las variables consideradas para analizar al jefe del hogar son el sexo y edad, su nivel educativo y la condicin de ocupacin. En el caso de los hogares, se tuvo en cuenta el nmero de miembros del hogar, el ingreso mensual familiar del hogar y el ingreso prcapita. La fuente utilizada, la Encuesta Nacional de Hogares, ejecutada por el INEI en 1995, investig acerca de la accesibilidad a 15 programas de apoyo social, los que se pueden clasificar en 5 reas: Alimentacin y Nutricin, Salud, Bienestar Familiar, Educacin y Servicios de la Vivienda. En el rea de Alimentacin, se consider el acceso a Desayuno Escolar, Vaso de Leche, Comedor Popular, Clubes de Madres, Programa de Alimentacin a Familias en Alto Riesgo (PANFAR) y Comedor Parroquial. Asimismo, como ayuda alimentaria a los hogares del pas se consider la Donacin Directa de Alimentos y el Pago en Alimentos por trabajo. En el rea de Salud, se investig acerca del conocimiento y uso de Campaas preventivas de salud referida a las jornadas VAN, as como a la participacin en Campaas de Planificacin Familiar. En el rea de Bienestar Familiar, los programas sociales considerados corresponden al uso de los Wawa-Wasi y de Cunas Guardera. En el rea educativa se contempl en esta oportunidad el acceso a los programas de alfabetizacin. Finalmente, en el rea de Vivienda, se investig sobre la proporcin de hogares beneficiados con los servicios de abastecimiento de agua y alcantarillado as como Programas de Electrificacin Rural. 1. A nivel global, los resultados de la Encuesta Nacional de Hogares muestran que, aproximadamente, 61 de cada 100 hogares del pas se benefician con al menos un programa social. En trminos absolutos este porcentaje significara que 2 Millones 949 Mil hogares estn accediendo a por lo menos un programa social. 2. El porcentaje de los hogares no usuarios representa el 35,1% y solamente un 3,5% de hogares respondi que desconoca la existencia de programas de apoyo social. 3. Los resultados se muestran a nivel nacional, rea urbana y rural, y 8 dominios conformados adems de Lima Metropolitana, por Costa, Sierra y Selva, clasificadas en Norte, Centro y Sur. 4. El conocimiento y uso de al menos un programa social se advierte en mayor porcentaje en el rea rural con 77,3% de hogares beneficiarios, seguidos de la Sierra Centro con 75,9% y de la Selva y la Sierra Norte con 71,7% y 71,3%, respectivamente. 5. En Lima Metropolitana el porcentaje de hogares beneficiarios por algn programa social alcanza el 49,4%. 6. Otro aspecto que se investig es el nmero de programas con los que se benefician los hogares del pas. Al respecto, a nivel nacional los hogares que se benefician con solamente un programa representan el 41,4% del total, el 28,6% accesa a 2 programas, el 16,5% a 3 y el 13,5% restante de hogares se beneficia con 4 y ms programas. 7. Con relacin a los organismos ejecutores de los programas sociales, visto de manera global y a nivel nacional, de acuerdo a la percepcin de los hogares, destaca la presencia del Ministerio de Salud con 68,7% de hogares que mencionaron a este sector pblico. El 36,9% de hogares refiri tambin a los Gobiernos Locales. El 19,3% de hogares mencion al Programa Nacional de Apoyo Alimentario (PRONAA) y el 17,0% al Ministerio de Educacin. 8. Otros organismos que destacan en la Sierra Centro y Sur son FONCODES y CARITAS. Asimismo, es de sealar las acciones que el Ministerio de la Presidencia ejecuta en Lima Metropolitana y la Costa Centro con 6,0% y 5,1%, respectivamente. 9. El estudio revela tambin que un alto porcentaje de hogares no identifican al organismo ejecutor de los programas de apoyo social. Este porcentaje representa el 44,2% del total de hogares beneficiarios. 10. De manera global, los resultados obtenidos en la Encuesta de Hogares permiten advertir que tanto el sexo como la edad de los jefes de hogar no discriminan el acceso a los programas de apoyo social. Es decir, las diferencias encontradas son poco significativas. 11. Las variables que permiten discriminar la accesibilidad a los programas sociales constituyen el nivel educativo del jefe del hogar, el ingreso familiar mensual y el ingreso prcapita. Esto quiere decir, que entre estas variables y el acceso a programas de apoyo social existe una relacin inversa. As, se encontr que a menor nivel educativo o menor ingreso es mayor el acceso a los programas sociales. 12. Asimismo, en cuanto al tamao del hogar, a mayor nmero de miembros del hogar es mayor el acceso a los aludidos programas, lo que significara que en estas variables se da una relacin directa. 13. El acceso de los hogares a los programas sociales especficos muestra que de los programas alimentarios se benefician el 49,5% de hogares encuestados. El 71,6% de hogares del rea rural respondi haber accesado al menos a un programa alimentario. Asimismo, en la Sierra se advierten porcentajes de 68,7% en el Norte, 68,2% en el Centro, y 60, 6% en el Sur. El 37,2% de hogares de Lima Metropolitana respondieron que se benefician de al menos un programa alimentario 14. Los hogares beneficiarios de programas de salud, representan a nivel nacional, el 42,6%. En el rea rural, el porcentaje de acceso a los programas de vacunacin y planificacin familiar, comprendidos en el rea de salud, estara beneficiando al 54,7% de los hogares. El 32,3% de hogares de Lima Metropolitana respondieron que usan los mencionados programas de salud. 15. Los servicios de wawa-wasi y de cuna guardera que fundamentalmente brindan apoyo a la madre trabajadora estara beneficiando, a nivel nacional, slo al 2,2% de los hogares. Sin embargo, a nivel de rea rural el porcentaje alcanza al 7,1%. En Lima Metropolitana los hogares beneficiados con estos programas alcanzara solamente al 1,1% de los hogares. 16. Con relacin a los hogares beneficiarios de programas de alfabetizacin, a nivel nacional, stos representan el 5,0%. En el mbito rural el beneficio alcanza al 13,2% de hogares, en tanto que en Lima Metropolitana el acceso se restringe slo al 0,6% de hogares. 17. Finalmente, los programas de electrificacin rural as como los de abastecimiento de agua y alcantarillado habra beneficiado al 12,0% de hogares del pas. En el rea urbana este porcentaje representa al 8,4%, en tanto que en el rea rural beneficia al 23,7%. El 4,6% de los hogares del mbito de Lima Metropolitana, tambin habran logrado beneficiarse de estos programas ejecutados bsicamente por entidades gubernamentales. * Sociloga, Directora del Area de Estudios Sociales. Direccin Tcnica de Demografa y Estudios Sociales. INEI. Lima. |