5.2 MORTALIDAD INFANTIL DEPARTAMENTAL 

       Los  indicadores  regionales  presentados  anteriormente,  son
       promedios  de lo  registrado  en los departamentos que la com-
       ponen, que a su vez tienen su propia din mica. Como observamos
       en el  Cuadro 5.1 y el Gr fico 5.2 (a) las tasas de mortalidad
       infantil por  departamentos muestran diferencias dentro de sus
       niveles  altos, la menor  correspondi¢ a Madre de Dios (63 por
       mil), seguida  de Apur¡mac  (85 por mil) y Cusco (92 por mil).
       Los niveles  de MI registrados en Apur¡mac y Cusco  fueron los
       m s altos a nivel  nacional y entre  36 y 47% mayores  que  en
       Madre de Dios.  La menor mortalidad  infantil en Madre de Dios
       puede  atribuirse, entre otros aspectos, a las caracter¡sticas
       especiales de sus  pobladores que b sicamente son inmigrantes,
       con  mejores  condiciones socioecon¢micas y niveles de escola-
       ridad que el promedio  en Cusco y Apur¡mac, principalmente  en
       el  rea rural.
          
       Existe claras  diferencias de MI entre las poblaciones con NBS
       y NBI en cada  departamento, excepto en  Apur¡mac donde la TMI
       de la poblaci¢n departamental, pobre o no, estaba alrededor de
       85 por mil. En Madre de Dios, la TMI de la poblaci¢n con NBI o
       pobre (69 por mil) fue poco m s del doble que la  de la pobla-
       ci¢n con NBS y en el caso del Cusco, la TMI en el sector pobre
       fue de 98 por mil, 75% mayor que en el sector no pobre. Desta-
       ca las  marcadas  diferencias de mortalidad infantil entre las
       poblaciones con NBS o no pobres de los tres departamentos y el
       mayor peso de la poblaci¢n rural del Cusco.

       En  el  rea  urbana, Gr fico 5.2 (b), la  mortalidad  infantil
       tuvo niveles muy similares en Cusco y Apur¡mac en la poblaci¢n
       con NBS o NBI: 57 por mil fue el promedio para el  rea urbana,
       alrededor  de 45 por  mil en los sectores con NBS y 63 por mil
       en los  sectores con  NBI. En ambos  departamentos la MI en el
       sector con  NBI fue, en promedio, 40% mayor  que en el  sector
       con  NBS. Nuevamente  destaca  Madre de Dios por  sus  menores
       niveles  de mortalidad infantil en el  rea urbana (46 por mil)
       y urbana con NBS (30 por mil).

       Si las  diferencias anteriores las analizamos en el  rea rural
       de cada departamento, Gr fico 5.2 (c), vemos que las  tasas de
       mortalidad infantil en Madre de Dios fueron menores. Las dife-
       rencias de MI entre las poblaciones con NBS y con NBI, s¢lo se
       mantuvieron  en  Madre de Dios: 37 por mil en las  poblaciones
       con NBS y 81 por mil en las con NBI,  en Cusco y Apur¡mac  las
       tasas de mortalidad infantil fueron extremadamente altas y sin
       mayores  diferencias  entre  los sectores no pobres y  pobres:
       entre 89 y 95 por mil en Apur¡mac y entre 100 y 110 por mil en
       el Cusco.  Corroboramos los comentarios iniciales sobre que no
       s¢lo  basta la satisfacci¢n de una o m s necesidades, sino que
       existen  otros factores  externos  que tambi‚n  influyen en la
       determinaci¢n de los niveles de mortalidad infantil.